Lo que hay detrás de la historia de éxito del legendario Oráculo de Omaha.
Con un patrimonio neto de más de 70 mil millones de dólares, Warren Buffett es la segunda persona más rica del mundo, por detrás solo de su buen amigo Bill Gates.
Sin embargo, para aquellos que lo conocían desde el principio, el éxito de Buffett no resulta sorprendente: a los 11 años estaba invirtiendo en acciones y a los 16 ya había ganado una suma que hoy en día equivale a 53.000 dólares.
Inspirándonos en una pregunta del portal Quora que decía "¿Cuáles son algunos hechos asombrosos sobre Warren Buffett", reunimos 24 hechos sorprendentes sobre el "Oráculo de Omaha" y su increíble riqueza.
Mientras sus compañeros del colegio soñaban con las grandes ligas y Hollywood, Buffett a los 10 años ya almorzaba con un miembro de la Bolsa de Nueva York y establecía metas en la vida.
Su legendaria carrera comenzó con una revelación que experimentó a los 10 años, durante un viaje a Nueva York con su padre.
Cenando con un miembro de la Bolsa de Nueva York surgió el deseo en el joven Buffett de dedicar su vida a ganar dinero.
Compró sus primeras acciones a los 11 años.
Compró varias acciones del Cities Service Preferred por 38 dólares cada una.
Cuando Buffett era un adolescente, ya ganaba aproximadamente 175 dólares al mes– más que sus profesores (y la mayoría de adultos).
Ganó dinero repartiendo el Washington Post.
Había conseguido una cantidad equivalente a 53.000 dólares cuando solo tenía 16 años.
El reparto de periódicos fue solo una de las muchas formas del joven Buffett para enriquecerse. También vendió bolas de golf y sellos usados, dio brillo a los coches, montó una empresa de máquinas de pinball y convirtió un hipódromo en una lucrativa zona de juegos.
No fue admitido en la Escuela de Negocios de Harvard.
Buffett, seguro de haber clavado su entrevista de admisión, ya le había dicho a un amigo: "Vente conmigo a Harvard".
"Parecía tener unos 16 años pero emocionalmente tenía solo nueve", recordó de la entrevista en persona. Obligado a mirar hacia otro lado, se decidió por la Universidad de Columbia, que solo requería una solicitud por escrito y no tenía entrevista.
Su ídolo se negó a contratarlo la primera vez que le solicitó trabajo.
Buffett soñaba trabajar con su ídolo y autor de "El inversor inteligente", Benjamín Graham. Sin embargo, Graham lo rechazó porque no era judío (estaba reservando un puesto en su empresa para alguien judío porque en ese momento para el pueblo hebreo era difícil encontrar trabajo en Wall Street).
Buffett no aceptaría un no por respuesta y continuó hablando de las ideas de Graham hasta que finalmente lo contrató.
Buffett gastó 100 dólares en un curso de Dale Carnegie sobre hablar en público.
A los 21 años le tenía pánico a hablar en público. El curso terminó siendo una buena inversión ya que le ayudó a proponerle matrimonio a su esposa.
Su casa es una vivienda humilde de cinco dormitorios en Omaha, Nebraska, que compró en 1956 por 31.500 dólares.
Si quieres ser vecino de Buffett, la casa de enfrente te costará alrededor de 2,15 mil millones de dólares.
Buffett no tiene un ordenador en su escritorio y utiliza un móvil con tapa en vez de un smartphone.
No obstante, hay una Enciclopedia Mundial colocada en su estantería.
De hecho, solo ha enviado un correo electrónico en su vida, a Jeff Raikes, de Microsoft.
Su distancia de la tecnología le deja tiempo para el bridge, al que juega durante unas 12 horas a la semana.
Su compañero habitual de bridge es Bill Gates.
Dedica el 80% de su día a la lectura.
Cuando no está jugando al bridge, está leyendo. "Simplemente me siento en mi oficina y leo durante todo el día", cuenta.
Bebe una cantidad alarmante de Coca-Cola cada día.
El magnate de los negocios come de manera muy poco saludable.
"Si tomo 2.700 calorías al día, una cuarta parte de ellas es Coca-Cola. Me bebo, por lo menos, 12 latas de 0,33 litros. Lo hago todos los días".
También le gusta echarle mucha sal a la comida y se suele tomar un tazón de helado para el desayuno.
Buffet consiguió el 99% de su riqueza tras su 50 cumpleaños.
Entre las leyendas de la inversión, Buffett cuenta con la trayectoria más larga de éxito en el mercado de valores.
La longevidad del alto rendimiento de Buffett es mayor que la de otros grandes inversores, como David Einhorn y Walter Schloss.
1.000 dólares invertidos en acciones de Berkshire Hathaway de Buffett en 1964, cuando Buffett se hizo cargo de la empresa y las acciones solo costaban 19 dólares, tendrían hoy día un valor de aproximadamente 13 millones de dólares.
El patrimonio neto de Buffett es mayor que el PIB de Uruguay.
Se estimó que el PIB de Uruguay en 2014 era de 57.471.277.325 dólares.
Aunque Buffett vive austeramente, es generoso. En 2010, se asoció con Bill y Melinda Gates para formar ‘The Giving Pledge’ (La promesa de dar), una iniciativa que pide a las personas más ricas del mundo que dediquen la mayoría de su riqueza a la filantropía.
Desde junio de 2016, más de 154 personas acaudaladas han firmado el compromiso, entre ellas Michael Bloomberg, Mark Zuckerberg y Larry Ellison.
Buffett ha donado hasta ahora casi el dinero suficiente para construir seis campus de Apple Spaceship, valorados en 5 mil millones de dólares.
El Apple Campus, uno de los últimos grandes proyectos en los que trabajó Steve Jobs, es un campus empresarial con aspecto futurista que contará con paneles de vidrio curvado, un aparcamiento subterráneo, un auditorio privado para conferencias y lanzamientos de productos, así como unas vistas panorámicas de la naturaleza.
Buffett ha donado casi 30 mil millones de dólares – la segunda cantidad más alta (después de la de Bill Gates).
En 2013, Buffett ganó una media de 37 millones de dólares al día – eso es más de lo que Jennifer Lawrence consiguió en todo el año.
Según Forbes, Jennifer Lawrence fue la segunda actriz mejor pagada en 2013 y se calcula que ese año ganó 34 millones de dólares. En 2013, Warren Buffett ganaba 37 millones de dólares al día.
En julio de 2016, Buffett batió su propio récord de donaciones al donar 2,9 mil millones de dólares a varias organizaciones benéficas, entre las que se incluyeron la Fundación Bill y Melinda Gates y la Fundación Susan Thompson Buffett, que lleva el nombre de su difunta esposa.
Al parecer, el multimillonario solo gana 100.000 dólares al año en Berkshire Hathaway –y lo gasta frugalmente.
La gente está tan fascinada con el legendario Buffett que gastaría millones de dólares par almorzar con él.
Desde el año 2000, Buffett ha estado realizando una subasta en un acto benéfico para la Fundación GLIDE, donde el ganador consigue un almuerzo con él.
El mejor postor puede llevar hasta siete personas para cenar con el magnate de los negocios en el restaurante Smith & Wollensky en Manhattan y el ganador más reciente pagó 3.456.789 dólares.
Buffett no cree que el éxito venga determinado por el dinero: "Mido el éxito por la cantidad de personas que me quieren. Y la mejor manera de ser querido es ser amable".
