Mientras que muchos adolescentes ganan su dinero de bolsillo trabajando en tiendas o repartiendo periódicos, para Alex Macheras las cosas han sido un poco más glamurosas.
Ahora con 20 años, Macheras viaja alrededor del mundo – a menudo en primera clase – probando aviones nuevos antes de que sean entregados a sus clientes.
Esto implica evaluar los asientos en cada cabina, disfrutar de su comida, y por lo general tomarse una o dos copas de champán, y posteriormente, compartir fotos de sus experiencias con sus seguidores en Instagram y Twitter.
Macheras le contó a Business Insider que había estado interesado en la aviación desde que era pequeño – y con 14 años de edad, comenzó a ofrecer análisis de aviación a fuentes tales como la BBC, Sky News, y LBC, lo que le llevó al mundo de los viajes aéreos.
Este chico de 20 años de edad, experto en el campo de la aviación, recorre el mundo en primera clase en aviones vacíos, comprobando cada asiento antes de que sean entregados a sus compradores.
Suele compartir actualizaciones y fotos de su fabulosa vida con sus 13.000 seguidores a través de Instagram y Twitter.
A Business Insider le contó que había estado interesado en la aviación desde que tiene uso de memoria.
“Nací con la afición por los viajes. Hay vídeos míos de cuando era niño apuntando al cielo. Mi familia nunca tuvo ese interés – mis padres trabajaban en la cocina y los deportes de motor”.
Estudiaba aviación siempre que podía, e incluso asistió a clases de vuelo. “Mi familia solía bromear diciendo que a los ocho años podía hacer una demostración de normas de seguridad previas al vuelo en cinco idiomas diferentes”, agrega.
Estaba leyendo constantemente sobre las nuevas tendencias en la industria de la aviación y su mayor inspiración era Richard Branson – un héroe al que ha tenido la oportunidad de conocer. Macheras leyó su libro a una edad muy temprana.
“No me permitían llevarlo a la escuela porque contenía palabrotas, pero estaba completamente fascinado por la conexión que decía tener con la aviación, y la historia de cómo creó Virgin Atlantic”.
Cuando solo tenía 14 años, fue abordado por una estación de radio del Reino Unido que se había visto su análisis sobre la industria de la aviación en Twitter.
“Tuiteaba sobre todo lo que apareciera en las noticias en ese entonces. Me permitieron salir al aire, sin revelar mi edad. Estuve trabajando para LBC durante años, antes de que nadie se diera cuenta de lo joven que era”.
Cuando tenía 16 años – incluso antes de terminar sus exámenes finales en el instituto – apareció en Sky News, y luego firmó contratos con otras emisoras para continuar con el análisis de la aviación en televisión. Decidió terminar sus estudios a medio tiempo para poder dedicarle más tiempo al trabajo.
“Tan pronto como pude acabar los estudios, empecé a trabajar a tiempo completo”.
Ahora, que trabaja en estrecha colaboración con los fabricantes para completar las entregas de aviones nuevos, lo que significa que ve los aviones cuando salen de la fábrica...
... participa en vuelos de prueba...
... y está presente cuando el avión es entregado al cliente.
Comprueba todos los asientos en cada cabina – incluida la primera clase.
Los aviones suelen estar completamente vacíos, por lo que goza de total libertad.
Cuando no está viajando, pasa el tiempo hablando sobre las últimas noticias de la aviación en directo, redactando artículos sobre un vuelo de prueba, o participando en una sesión de preguntas y respuestas de Twitter.
Cuando viaja, vive la experiencia completa, incluyendo las salas de primera clase o preferente...
... probando platos suntuosos...
... las bebidas...
... e incluso puede tomar una siesta antes de comenzar el vuelo.
También ha probado lo mejor que hay en comidas de aviones.
Está familiarizado con el personal de las líneas aéreas.
“Se trata de conocerlos como aerolínea y entender por qué se hacen las cosas en cabina de una determinada manera”.
Algunas tripulaciones son más animadas que otras.
Incluso se reúne con los pilotos...
... y, por supuesto, los auxiliares de vuelo.
Pasa la mayor parte de su tiempo viajando de un lugar a otro. “A veces necesito cuatro días solo para volver a casa”.
Pero en el aire, él se siente como en casa. La ubicación en su perfil de Twitter dice: “Normalmente a 11.000 km de altura”.
Pero por lo general disfruta de buenos alojamientos cada vez que está en el suelo.
“Mi horario es flexible – no como el de la tripulación de cabina”, explica, añadiendo que por lo general hay tiempo suficiente para tomarse un descanso de sus viajes.
Su destino favorito hasta ahora ha sido Ruanda.