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En muchos videojuegos, la civilización muere a causa del calentamiento global. Aunque resulte extraño, Civilization y Call of Duty no son la excepción.

El presidente Trump ha anunciado su intención de retirarse del Acuerdo Climático de París, convirtiendo a Estados Unidos en uno de los tres únicos países en no unirse al tratado junto con Siria y Nicaragua. (Nicaragua se retiró porque el acuerdo no era lo suficiente ambicioso).

La decisión ha dado lugar a que el tema vuelva a acaparar todos los titulares, con advertencias de lo que podría suceder si más países optan por ignorar la importancia de cuidar el medio ambiente. Algunos creen que la decisión no tendrá verdaderas consecuencias, mientras que otros están preocupados de que esta dañará la economía de energía limpia que tanto ha crecido últimamente y cederá el liderazgo tecnológico de Estados Unidos a países dispuestos a comprometerse con los sectores energéticos emergentes.

Sin embargo, ahora vamos a hablar de videojuegos. Si después del anuncio de Trump crees que el cambio climático tendrá un importante impacto en el mundo, entonces estos videojuegos seguro que te gustan.

Civilization 1, 2, 3 y 4

El papel de la contaminación ha cambiado en los últimos juegos de Civilization, pero algunos de los títulos anteriores cuentan con una interesante perspectiva de lo que podría suceder cuando ignoras el cambio climático. Si permitimos el aumento de la contaminación y no hacemos nada para evitar el calentamiento global, todo el mundo se convertirá en pantanos inútiles y un desierto. En función de cuál sea tu decisión en el juego, la partida puede cambiar mucho. El juego no trata el tema del calentamiento global con total precisión.

Sin embargo, también tiene algunos puntos positivos. En Civilization, algunas de las funciones te permiten impulsar tu economía, producir unidades y convertirte en el poder militar más temido de la Tierra. Es como si no hubiera ningún inconveniente. Aunque la contaminación es un problema, se puede solucionar mediante un desembolso económico. Hasta cierto punto. Si realmente ignoras la contaminación, acabarás teniendo problemas, dejando sin comida a grandes ciudades, paralizando los sistemas y rompiendo el equilibrio de poder. Seguro que prefieres controlar la contaminación antes de llegar a ese punto.

Call of Duty: Black Ops 3

Sí, Call of Duty. Puede que este juego no haga un análisis de la situación del mundo, pero sí que incluye algunos matices si prestas atención. Activision y sus desarrolladores profundizaron en la investigación de una serie de juegos de futuro cercano, centrándose principalmente en la tecnología militar, pero también extendiéndose a otras áreas. Cuando lo hicieron, los desarrolladores tomaron la decisión de que sería deshonesto crear un mundo sin tener en cuenta el cambio climático.

Call of Duty: Black Ops 3 nos muestra un mundo caracterizado no solo por soldados mejorados y robots asesinos, sino también por un clima impredecible, ciudades inundadas y una sociedad global drásticamente reorganizada. Y aunque le puedes disparar a los robots asesinos en la cabeza, el cambio climático resulta ser un enemigo mucho más astuto. Funciona bastante bien para tratarse de un videojuego donde la violencia global y la inestabilidad se traducen en unos escenarios de combate interesantes.

SimCity Societies

Simcity Societies es bastante explícito sobre el cambio climático. Al igual que con otros títulos del videojuego, el juego ofrece al jugador una amplia variedad de opciones con respecto a la alimentación de su ciudad, desde baratas plantas de carbón hasta plantas solares y eólicas. El juego también ha introducido el carbono, que da lugar a unos acontecimientos climáticos más extremos como resultado del cambio climático si el jugador opta por las plantas de carbón. Sin embargo, cabe destacar que este videojuego se centra en ciudades, no en el mundo entero.

Enslaved: Odyssey to the West

Como muchos juegos post-apocalípticos de futuro lejano, Enslaved: Odyssey to the West achaca el fin del mundo a un guerra global en vez de al cambio climático. Los ejércitos de robots inteligentes tampoco parecen haber ayudado. Sin embargo, está bastante claro que el mundo de Enslaved sufría un importante calentamiento global. Enslaved nos presenta un exuberante mundo tropical donde las ciudades están repletas de viñas y vegetación. Ese sería el aspecto del mundo si subiera un poco su temperatura. Es hermoso, a su manera, aunque todo el mundo ya esté muerto.

Fuel

¿Qué haces cuando la sociedad se ha desmoronado debido al catastrófico calentamiento global? Conducir coches, por supuesto. ¿Qué tiene de malo otro cigarrillo para el paciente con cáncer de pulmón terminal?

Fuel es un videojuego de carreras de mundo abierto en un mundo post-apocalíptico donde el calentamiento global ha alimentado el clima extremo y el colapso total, con una saludable dosis de Mad Max. Si quieres saber lo divertido que puede ser conducir en un mundo destrozado por el cambio climático, esta es tu mejor opción.

Juego extra: Bioshock

Para ser claros, BioShock no trata sobre el cambio climático en absoluto. Sin embargo, sí toca el tema de cómo hemos llegado hasta él. BioShock tiene lugar en Rapture, una ciudad submarina construida sobre los conceptos del objetivismo Randian y el individualismo. Rapture estaba destinado a ser una utopía gobernada por leyes naturales, donde los fuertes y brillantes podían vivir sin la intervención del gobierno y perseguir su propio valor con la ayuda de la modificación biológica. Teóricamente, esto debería funcionar bien, porque un mercado libre nos muestra que el egoísmo impulsa el progreso y la libertad. Sin embargo, resulta que todo el mundo se muere o se vuelve loco.

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