Habiendo tanta gente que aconseja sobre la pérdida de peso, puede resultar difícil distinguir entre realidad y ficción.
Con demasiada frecuencia habrá escuchado los consejos con buena intención pero sin base científica de un aficionado al gimnasio a otro aficionado o incluso a usted mismo. Y usted no es el único que ha escuchado el intercambio de las creencias populares sobre el deporte que se hace en el gimnasio. En este artículo, los entrenadores comparten los mitos más comunes sobre el deporte que escuchan de sus clientes. Desde los cuasi milagros del área «quema grasas» hasta la mala información sobre los efectos mágicos de entrenar con el estómago vacío. Aquí tiene las mentiras sobre el Fitness que nunca debería de seguir:
1. La mejor forma de perder peso es reducir drásticamente el consumo calórico
Nuestro cuerpo es más inteligente de lo que pensamos. Si comemos muy poco, el cuerpo cree que nos morimos de hambre y ralentiza nuestro metabolismo y retiene la grasa como fuente potencial de energía. Una opción mucho mejor: coma más a menudo pero en menos cantidad. Para perder peso rápidamente, divida su ingesta calórica (no consuma menos de 1.200 calorías si es una mujer y menos de 1.800 si es un hombre) en cinco o seis comidas más pequeñas para mantener al metabolismo en funcionamiento.
2. Mantenga su ritmo cardíaco en la zona quema grasas
Si hace ejercicio al 60 -70% de su ritmo cardiaco máximo para deshacerse de la grasa, podría estar frenando la pérdida de peso. La zona quema-grasas es completamente un mito. Si bien es cierto que se quema un mayor porcentaje de calorías cuando se hace ejercicio a un ritmo medio, se queman menos calorías en general. Por ejemplo, si se sube a una cinta y camina a 5,6 km/h durante 30 minutos, puede quemar 250 calorías. Si aumenta la velocidad a 11 km/h, quemaría 500. ¿Resultado? Es mucho mejor ir más rápido. ¿Prefiere la elíptica? Solo asegúrese de que no comete uno de estos 10 errores sobre las elípticas.
3. Las pesas de mayor peso le harán ganar músculo
Esto es prácticamente imposible para las mujeres ya que tienen demasiados estrógenos en su constitución hormonal. Sí, las pesas más pesadas generan músculo y fuerza, pero ninguna de nosotras levantamos algo tan pesado como para acabar generando músculos masculinos. Además, los músculos son el secreto de un metabolismo acelerado ya que queman más calorías que grasas incluso estando sentado en el sofá o el escritorio.
4. Puede adelgazar pasándose a los refrescos light
Puede que no tengan calorías, pero consumir estas latas de químicos puede engordarle la barriga. Un estudio de la Universidad de Purdue averiguó que las ratas a las que se le habían suministrado dulcificantes artificiales ingerían más calorías y subían más de peso que aquellas a las que se les dio azúcar. Una opción mejor es beber agua con sabores naturales como añadiéndole limón o rodajas de pepino para mantener las calorías a raya y una buena hidratación.
5. Los abdominales son el camino más rápido hacia un vientre plano
Hacer abdominales fortalece los diferentes músculos del abdomen, pero no quema grasa corporal ni conseguirá la «tableta de chocolate». Los abdominales se forman con la dieta y no haciendo abdominales. Una dieta correcta baja en hidratos refinados y abundante en proteínas magras, grasas saludable, mucha fruta de índice glucémico bajo y las verduras le acercarán más al vientre plano que está buscando. ¡Aunque tiene que trabajar el vientre de todos modos!
6. Hacer sentadillas engrosará su trasero
Con esta me parto de risa. Todos sabemos lo que hace que el trasero engrose y no son las sentadillas. Todos los que estamos sentados delante del ordenador, un escritorio o asiento de coche todo el día corremos el riesgo de desarrollar glúteos flácidos a menos que hagamos algo para remediarlo. Una de las mejores soluciones: ¡las sentadillas! La ciencia ha demostrado que realizar este movimiento ayuda a levantar, reafirma y fortalecer los glúteos. Solo céntrese en hacerlas correctamente. Mantenga las rodillas encima de las puntas de los pies y siéntese en una silla imaginaria. Apriete los glúteos cuando se levante.
7. Fomentar el cardio es la mejor forma de evitar el estancamiento
La forma más efectiva de perder peso es incluir el cardio y las pesas en la rutina deportiva. Un estudio averiguó que aquellos que hacían bicicleta 30 minutos al día, perdían 1,3 kilos de grasa y ganaban 0,2 kilos de músculo en 8 semanas. Los individuos que hacían 15 minutos diarios de bicicleta y otros 15 de pesas, perdían 4,5 kilos de grasa y ganaban 0,9 kilos de músculo quema-calorías.
8. Solo se necesitan unas pocas semanas para que la pérdida de peso se estanque
Una mujer me contó recientemente que llevaba un mes entrenando y que la báscula ya había dejado de moverse. Insistió en que había seguido la dieta al pie de la letra y que había llegado a un estancamiento, pero con poca probabilidad se trataba de eso. ¿Por qué no? Un estudio de la Revista de la Asociación Americana de Dietética averiguó que se necesitan 6 meses para que una persona alcance el parón de pérdida de peso. Si solo lleva un par de semanas con el programa y se ha parado la pérdida de peso, quizá debería controlar la dieta.
9. Se queman más grasas con el estómago vacío
Probablemente ha escuchado que entrenar en ayunas fuerza al cuerpo a atacar las reservas de grasa, pero nada más lejos de la verdad. La ciencia ha demostrado que se necesita tener algo de glucosa en el organismo para poder accionar los hornos quema-calorías. Si se queda sin glucosa almacenada, la llama se consume y comienza a quemar músculo. Comer un pequeño tentempié 30-60 minutos antes de entrenar, le proporciona la energía para aguantar más y mejor, potenciando la quema.
10. Puede actuar en las zonas problemáticas
Estaría genial poder elegir dónde el cuerpo quema grasas (¡aumento de talla de copa y muslos más finos por favor!), pero es imposible. La verdad científica es que el cuerpo decide dónde quema la grasa basándose en la genética sin importarle qué parte del cuerpo esté ejercitando. En lugar de centrarse en un área, dedique tiempo a entrenamientos corporales completos que quemen calorías como correr o los circuitos con pesas para perder peso uniformemente.