El CEO de la agencia de publicidad Y&R, David Sable ha compartido su opinión y unas inspiradoras citas sobre el liderazgo.
Una de las formas de descubrirlo es haciendo uno de los muchos tests disponibles en internet. No obstante, tienes que tener en cuenta que muchos son una trampa para venderte productos tales como cursos para mejorar tus habilidades o cuchillos Ginsu al finalizar el test.
Otra opción es no hacer el test si piensas que aún no eres el líder que te gustaría ser (en función de lo que consideres que es un líder) y que hagas un curso.
Lo bueno es que, al contrario de la superficialidad de algunos de los tests que se pueden hacer online (aunque reconozco que me encantó lo de los cuchillos), las mejores escuelas de negocios de EE. UU. ofrecen cursos para que te conviertas en el próximo César, Napoleón, Bolívar, Mao, Washington, Shaka Zulu. Tú eliges. Por cierto, no era mi intención hablar solo de políticos, también podría haber añadido a la lista a Gandhi, King y Mandela... Así de fácil.
El artículo de Duff McDonald «Can You Learn to Lead?» (¿Se puede aprender a ser un líder?) , publicado en The New York Times mostraba los cursos disponibles y la polémica que existe sobre cómo lograr este objetivo.
De hecho, el liderazgo se ha convertido en una habilidad tan importante en las universidades de prestigio que han formado y generado a tantos grandes ejecutivos que el uso de la palabra ha alcanzado cierto estatus:
Os dejo que leáis el artículo y que forméis vuestra propia opinión, aunque os doy un adelanto:
«¿Es el liderazgo una cualidad que puede aparecer tanto en una situación como en un contexto determinado, o es algo que se puede enseñar? Es decir, ¿se puede ser un líder sin haberlo sido en alguna situación antes? Las escuelas de negocios insisten en decir que sí se puede». John Van Maanen, profesor de gestión en la Escuela de Administración y Dirección de Empresas Sloan del MIT, imparte un curso denominado «Organizaciones líderes» y no cree completamente que esto se pueda enseñar. «Incluso hoy en día, más de tres décadas después, no existe una definición concreta del concepto», indicó. «Podemos hacer que las personas sean más conscientes de los dilemas éticos a nivel empresarial y de la dificultad de estar a cargo de un grupo en periodos difíciles, y enseñarles a desarrollar la confianza en sí mismos y las habilidades de comunicación que necesitan para ello». La idea de que estas habilidades se pueden transmitir para liderar a cualquier persona y en cualquier momento no está fundamentada.
Sin embargo, indica que a esto se le añade el aliciente del dinero.
«Resulta difícil no frustrarse ante la atención excesiva que se le da al liderazgo», dijo, «pero se ha convertido en algo tan famoso que parece que no es suficiente con lo que enseñamos».
«Tal y como Joseph C. Rost señaló en su libro de 1991 Leadership for the 21st Century, la falta de acuerdo sobre el asunto significa que el liderazgo es en cierto modo "lo que cualquiera quiera que sea", y los líderes son "aquellos que son nombrados para serlo"».
Este es un punto importante. Si piensas en los grandes líderes de la historia y en los momentos históricos que lideraron (sí, conozco la teoría de que un gran cambio comienza con pequeñas acciones, es verdad, pero siempre ha habido un líder o líderes para que esto se lleve a cabo), no podría imaginarme que estos, o al menos los que considero héroes, eran personas que simplemente fueron nombradas para que lideraran estos momentos.
Quizás este sea el problema de hoy en día. El problema viene de hacer un test online sobre liderazgo, de los distintos niveles de liderazgo (los profesores se consideran líderes en el aula y sin duda algunos lo son, pero otros...), de confundir el ser emprendedor con ser líder y confundir a los emprendedores con líderes (aunque sin duda algunos lo son); de los políticos que confunden lo que significa el poder y esto afecta a su capacidad de liderazgo, y otros directivos que confunden lo que significa su puesto con ser líderes, entre otros muchos casos.
Creo firmemente en que nos enfrentamos a una falta de verdaderos líderes inspiradores y un verdadero liderazgo inspirador.
Esto me lleva a citar la siguiente frase:
«Las grandes empresas no contratan a personas con habilidades y los motivan, si no que contratan a personas motivadas y las inspiran». – Simon Sinek, La clave es el porqué. Cómo los grandes líderes nos enseñan a actuar
El problema es que necesitamos que los líderes inspiren a los que ya están motivados y ahí es donde se falla.
Además, diría que la Inteligencia emocional es clave en el liderazgo, y cuando los líderes fallan es cuando estos se hacen los sordos.
«How to Be Emotionally Intelligent» (Cómo ser emocionalmente inteligente) es otro artículo publicado por Daniel Goleman en The New York Times que viene a completar lo que se dice en el libro anterior. En este artículo Goleman muestra una lista corta pero concisa de competencias que merece la pena leer:
1. Autoconciencia
Autoestima realista: Entiendes tus puntos fuertes y limitaciones. Actúas en base a tus competencias y sabes cuándo debes confiar en alguien de tu equipo.
Relaciones interpersonales: Conoces tus propios sentimientos. Por ejemplo, ser consciente de lo que te enfada te puede ayudar a controlar ese enfado.
2. Autocontrol
Resiliencia: Mantienes la calma bajo presión y te recuperas pronto de las adversidades. No le das demasiadas vueltas a las cosas ni te dan ataques de pánico. En una situación de crisis, las personas acuden al líder para encontrar el consuelo que necesitan. Si el líder mantiene la calma, los demás también.
Equilibrio emocional: Mantienes el estrés bajo control en vez de pagarlo con los demás. Les dejas claro lo que está mal y cuál es la situación.
Automotivación: Sigues avanzando hacia los objetivos establecidos a largo plazo a pesar de las adversidades.
3. Empatía
Empatía cognitiva y emocional. Entiendes otras perspectivas y puedes hacer que tus compañeros comprendan la situación. Aceptas las preguntas que tengan los demás para asegurarte de que entiendes el problema. La empatía cognitiva, además de entender los sentimientos de la otra persona adecuadamente, es clave para que se produzca una comunicación eficaz.
Saber escuchar: Prestas toda tu atención a la otra persona y dedicas tiempo a entender lo que están diciendo, sin interrumpirlas o interrumpir su agenda.
4. Aptitudes relacionales
Comunicación convincente: Eres capaz de comunicarte de forma clara y convincente para que las personas se sientan motivadas y no tengan dudas sobre tus expectativas.
Trabajo en equipo: Las personas se sienten relajadas cuando trabajan contigo. Una señal de esto es que se ríen cuando están contigo.
Conclusión
Si crees que se puede aprender a ser un líder, este es un buen lugar para empezar.
Ni los tiburones ni los depredadores son líderes. No confundas el ir por delante a cualquier precio con ser un líder.
Trabaja para mejorar tu IE y así podrás ver hasta donde llegas:
- Los líderes lideran – en silencio cuando reina la calma y con su presencia cuando hay problemas;
- Los líderes escuchan – siempre... Tienen ideas pero están dispuestos a cambiarlas rápidamente si alguien tiene una propuesta mejor;
- Los líderes se preocupan – no eres el único que tiene vida personal, y si no tienes una no intentes pagar este vacío con alguien, aunque sí, los líderes sí tienen vida personal;
- Los líderes ganan y pierden – cuando ganan no se dan el mérito y cuando pierden asumen la responsabilidad;
- Los líderes son imparables – nunca dejan de luchar, sea lo que sea;
- Los líderes se comprometen – a veces ser imparable significa no dejar de luchar, lo que muestra el compromiso;
- Los líderes sonríen – sonreír no hace daño;
- Los líderes son líderes – eso es lo que hacen;
- Y escuchan: «La gestión consiste en hacer las cosas de forma correcta; el liderazgo consiste en hacer las cosas correctas». –Peter Drucker