Como director ejecutivo de SpaceX, director ejecutivo de Tesla y cofundador de OpenAI, Musk parece estar en todo a la vez, impulsando todo tipo de increíbles nuevas tecnologías. Se dice que no estará contento hasta que nos vayamos de la tierra y colonicemos Marte. Entre cohetes espaciales, coches eléctricos, baterías solares, investigación de robots asesinos, y los miles de millones que ha ganado en el camino, Musk es en esencia un Tony Stark de la vida real – que es por lo que lo han usado como referencia para “Iron Man”. Pero todo no ha sido siempre fácil para Elon Musk. Aquí vemos cómo pasó de sufrir bullying en el colegio a ser un pequeño emprendedor y director ejecutivo de dos grandes empresas de ciencia ficción… y cómo esto casi le lleva a la ruina absoluta.
Elon Musk nació el 28 de junio de 1971, en Pretoria, Sudáfrica.
Su padre Errol Musk, ingeniero electrónico, comentó en una ocasión, “Elon ha sido siempre un pensador introvertido”.
De manera que mientras mucha gente iba a una gran fiesta y lo pasaba bien bebiendo y hablando de todo tipo de cosas como rugby o deportes, Elon había encontrado la biblioteca del anfitrión y se sumergía en todos sus libros”.
La madre de Musk es una dietista y modelo profesional.
La madre de Elon, Maye Musk, de nacionalidad canadiense, aparecía en las cajas de los cereales Special K y en la portada de la revista Time.
En 1979, Errol y Maye Musk se divorciaron y Musk, de nueve años, y su hermano Kimbal decidieron vivir con su padre.
En 1983, a los 12 años, Musk vendió un sencillo juego llamado Blastar a una revista de informática por 500 dólares.
Musk dijo en una ocasión que era “un juego trivial… mucho mejor que Flappy Bird”.
Sin embargo, la etapa de colegio de Musk no fue fácil.
Según se relató en el libro “Elon Musk: Tesla, SpaceX, and the Quest for a Fantastic Future“, fue hospitalizado en una ocasión cuando un grupo de acosadores le tiraron por las escaleras y le golpearon hasta que se desvaneció.
Tras graduarse en la escuela secundaria, Musk se trasladó a Canadá y pasó dos años estudiando en Queen’s University, en Kingston, Ontario.
Musk se trasladó a Canadá con su madre Maye, su hermana Tosca y su hermano Kimbal.
Pero finalizó sus estudios en la Universidad de Pensilvania, llevándose a casa las licenciaturas de física y económicas respectivamente.
Mientras estudiaba en la Universidad de Pensilvania, Musk y su compañero Adeo Ressi alquilaron una casa destartalada de 10 habitaciones y la convirtieron en un club nocturno legal.
Fue un primer experimento emprendedor.
Tras su graduación, Musk viajó a Stanford University para estudiar el doctorado.
Pero terminó posponiendo su ingreso tras solo dos días en California, y decidió probar suerte en el boom de las punto-com que justo comenzaba. Nunca volvió para terminar sus estudios en Stanford.
Musk y su hermano Kimbal lanzaron Zip2.
Los hermanos emplearon 28.000 dólares del dinero de su padre para emprender Zip2, una startup que proporcionaba guías de viajes de ciudades para los periódicos como el New York Times y el Chicago Tribune.
Mientras Zip2 despegaba, Musk dijo en una ocasión que vivía literalmente en la oficina y que se duchaba en un YMCA local.
Todo ello fue compensado cuando Compaq compró Zip2 bajo un acuerdo de compra de 341 millones de dólares en dinero y acciones, lo que le proporcionó a Musk 22 millones de dólares.
Con 10 millones de dólares del dinero que consiguió de la venta de Zip2, Musk emprendió X.com, una empresa de banca online en 1999.
Aproximadamente un año más tarde, X.com se fusionó con Confinity, una startup monetaria cofundada por Peter Thiel, creando una nueva compañía llamada PayPal.
Musk fue nombrado director ejecutivo de la recién estrenada PayPal. Pero esto no duraría mucho.
En octubre comenzó una cruenta lucha con los cofundadores de PayPal cuando les presionó para que cambiaran sus servidores del sistema operativo gratuito Unix a Microsoft Windows. El cofundador de PayPal y el entonces director técnico Max Levchin, se resistió duramente.
A finales del año 2000, Musk disfrutó sus primeras vacaciones en mucho tiempo. Mientras el vuelo de Musk estaba aún en el aire de camino a Australia, la junta directiva de PayPal le despidió y convirtió a Thiel en el nuevo director ejecutivo.
“Eso es lo que tiene irse de vacaciones”, le dijo Musk a Fortune años más tarde.
Las cosas le salieron bien a Musk.
Permaneció como el mayor accionista único en PayPal, con lo que ganó 165 millones de dólares de los 1.500 miles de millones que eBay pagó por PayPal a finales de 2002.
Incluso intentó comprar misiles soviéticos retirados del servicio para ese fin.
Pero los vendedores rusos pedían 8 millones de dólares o más por cada misil y Musk pensó que podía fabricar los suyos más baratos.
De esta forma, a principios de 2002 Musk fundó la compañía que se conocería como Space Exploration Technologies o SpaceX.
El objetivo de Musk era crear procesos que abarataran los vuelos espaciales en gran volumen.
Los primeros vehículos de SpaceX recibieron el nombre del Millennium Falcon de Star Wars.
Fueron los cohetes Falcon 1 y 9.
Y la nave SpaceX Dragon, que debe su nombre al tema “Puff the Magic Dragon”.
Este nombre fue la puñalada de Musk a los detractores que afirmaron que SpaceX nunca podría poner vehículos en el espacio.
El objetivo de SpaceX a largo plazo es hacer asequible la colonización de Marte.
Se dice que SpaceX no venderá sus acciones en oferta pública inicial hasta que lo que llama el “Transportador Colonial de Marte” vuele de forma regular.
Mientras tanto, Musk ha estado muy ocupado aquí en la Tierra, especialmente en Tesla.
En 2004 hizo la primera de muchas inversiones, 70 millones de dólares en Tesla Motors, una compañía de coches eléctricos cofundada por el veterano ejecutivo de la startup Martin Eberhard.
Musk participó activamente en el producto de la compañía y fue presidente de la Junta Directiva.
Ayudó a desarrollar el Tesla Roadster totalmente eléctrico, el primer coche de la compañía que lanzó en 2006.
Por si eso no fuera suficiente, también en 2006 a Musk se le ocurrió la idea de SolarCity, una compañía de energía solar diseñada para combatir el calentamiento global.
Concedió a sus primos Peter y Lyndon Rive el capital de trabajo para hacerla despegar.
Pero a su vuelta a Tesla, no todo fue bien.
Con Eberhard, Tesla gastaba mucho más dinero del que ingresaba. En 2007 Musk ideó un golpe para acaparar el poder y despidió a Eberhard.
En 2008, con la crisis financiera limitando seriamente sus opciones, Musk invirtió 40 millones de dólares en Tesla y le prestó otros 40 millones más para salvar a la compañía de la quiebra.
No fue una coincidencia que le nombraran director ejecutivo de Tesla ese mismo año.
Pero entre SpaceX, Tesla, y SolarCity, Musk realmente terminó arruinado.
Describe 2008 como “el peor año de mi vida”, con Tesla perdiendo dinero y SpaceX con problemas para lanzar su cohete Falcon 1. Antes de 2009 Musk vivía de los préstamos personales solo para sobrevivir.
Durante esa misma época, Musk pasó por un divorcio.
Musk tuvo 6 hijos con Justine Musk, una autora canadiense.
Pero justo a la vuelta de las Navidades de 2008, Musk recibió dos buenas noticias.
SpaceX firmó un contrato de 1.500 millones de dólares con la NASA para la entrega de provisiones al espacio, y Tesla finalmente encontró más inversores en el exterior. Todo parecía de repente resurgir de nuevo.
Antes de 2010, todo había dado un vuelco radical. Ese mes de junio, Tesla hizo una venta de acciones en oferta pública inicial.
Recaudó 226 millones de dólares y se convirtió en la primera compañía de coches que se hacía pública desde Ford en 1956. En esa oferta, Musk vendió acciones por valor de cerca de 15 millones de dólares para conseguir que sus finanzas volvieran a recuperar su rumbo.
La extraordinaria carrera de Musk empezaba a notarse en otros círculos también.
El papel de Robert Downey Jr. como Tony Stark en la saga de “Iron Man” se inspira al menos en parte en Elon Musk, y el empresario tiene incluso un cameo en "Iron Man 2”.
Durante todo el tiempo, la vida personal de Musk ha estado en una especie de fluctuación.
En 2008, Musk comenzó a salir con la actriz Talulah Riley. Se casaron en 2010 y se divorciaron en 2012. En julio de 2013 se volvieron a casar; en diciembre de 2014 Musk solicitó el divorcio pero retiró los papeles; en marzo de 2016 Riley presentó una demanda de divorcio, y el divorcio se hizo efectivo en octubre.
Sin embargo el trabajo va bien, especialmente en SpaceX.
Antes de finalizar 2015, SpaceX realizó 24 lanzamientos con encargos como reabastecer la Estación Espacial Internacional, estableciendo muchos récords por el camino. Más recientemente, el Falcon 9 de SpaceX efectuó el primer aterrizaje en el agua con éxito de un cohete orbital reutilizable.
Pero Musk no puede dejar de surgir con nuevas ideas. Entre ellas Hyperloop.
Aunque ha impulsado la energía solar, los vehículos eléctricos y la colonización de Marte, Musk también ha diseñado lo que llama el Hyperloop, un sistema de transporte que puede trasladarte entre Los Ángeles y San Francisco en 30 minutos. Musk está permitiendo a otras empresas que construyan sus propias versiones.
Musk también ha fundado recientemente otra empresa – The Boring company, que es más interesante de lo que su nombre podría indicar.
Lanzada el año pasado, la misión The Boring Company es cavar una red de túneles por debajo bajo y alrededor de las ciudades para Hyperloop. Musk ha dicho que ha discutido con la Casa Blanca la idea de construir un túnel entre Nueva York y Washington D. C. que podría ser utilizado por Hyperloop.
Y a finales de 2015, Musk co-fundó OpenAI, una organización sin ánimo de lucro dedicada a investigar la inteligencia artificial y asegurarse de que no destruya a la humanidad.
Musk ha expresado su preocupación de que la carrera por una mejor IA podría acabar desencadenando una tercera guerra mundial.
Al mismo tiempo que se preocupa por la IA, Musk está promoviendo las capacidades de autoconducción de Tesla.
El sistema de "piloto automático" de Tesla está disponible en sus tres modelos, incluyendo el nuevo Model 3, un coche de bajo coste lanzado a principios de este año que acerca a la compañía a su meta de hacer que los vehículos eléctricos sean accesibles para las masas.
El año pasado, Tesla compró SolarCity en un acuerdo de 2.600 millones de dólares.
La adquisición aunó las dos grandes ideas verdes de Musk bajo la misma empresa.
Hasta ahora, 2017 ha sido un año difícil para Musk, al menos políticamente.
Musk se unió al consejo asesor de negocios del presidente Trump, una medida que causó un enorme revés público. Inicialmente defendió la medida, afirmando que podría usar su proximidad a la Casa Blanca para efectuar el cambio. Pero abandonó el barco después de que Trump retirara a Estados Unidos del Acuerdo de París sobre el cambio climático.