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6 regiones vinícolas poco conocidas que debes visitar en 2018.

El turismo enológico no solo está ganando impulso, sino que se ha convertido en un pasatiempo cada vez más sofisticado. Muchas bodegas de todo el mundo están listas para satisfacer los gustos más exigentes de los amantes y expertos del alcohol.

Estos son seis rincones del planeta famosos por sus vinos y excelentes viñedos. Además, podrás disfrutar de paisajes increíbles y encantadores, de una deliciosa cocina local y de cómodas habitaciones de hotel.

Para los aventureros

Bodega Colomé, Salta, Argentina

Mendoza es el Napa Valley de Argentina, pero la verdadera aventura te espera en la provincia de Salta, la región vinícola montañosa enclavada en el escarpado rincón noroeste del país, cerca de Bolivia y Chile. Es el epicentro de las fragantes torrontas blancas, sabrosas malbecs concentradas y un espectacular paisaje de cactus gigantes, formaciones rocosas de color óxido y los Andes nevados.

Remote Bodega Colomé, una bodega del siglo XIX comprada por el multimillonario y coleccionista de arte suizo Donald Hess en 2001 (también propietario de la colección Hess en Napa), es un lugar donde los amantes del vino pueden escapar de todos los problemas y preocupaciones. A cuatro horas y media de la ciudad de Salta por caminos de tierra, se trata de un espectáculo de vino, arte y 64.000 hectáreas donde puedes hacer senderismo, ciclismo o simplemente disfrutar del paisaje.

Además de producir un malbec de alta calidad de un viñedo a una altitud de 3.100 metros, Hess ha creado un impresionante museo dedicado a las instalaciones de luz del artista estadounidense James Turrell.

A partir del 1 de noviembre, la bodega reabre Casa del Fundador, su lujoso hotel de 9 habitaciones (250 $ la noche) en un típico edificio de una estancia con techo de teja. Las habitaciones grandes y ventiladas en tonos tierra se abren en un patio con una fuente de estilo zen, y sí, hay un buen restaurante.

Para los hipsters del vino

Hotel Jackalope en Willow Creek Vineyard, Península de Mornington, Australia

Los famosos viñedos de pinot noir y chardonnay se alternan con playas de arena blanca, aguas termales naturales, imponentes eucaliptos (y tres de los 10 mejores campos de golf del país) en esta región vinícola de fácil acceso a tan solo una hora de Melbourne.

A principios de este año, la bodega Willow Creek abrió un nuevo hotel chic Jackalope (desde 500 $ por habitación), cuyo diseño ya ha ganado varios premios. Su estilo futurista llenó los pasillos con extrañas luces de neón, mesas de billar de color azul eléctrico, piscinas negras aparentemente sin fondo y baños japoneses. Y, por supuesto, excelentes vinos. Los que quieran disfrutar del vino deben prestar atención a lo siguiente: muchas excelentes bodegas locales son poco conocidas fuera de Australia, pero sus vinos pronto recibirán reconocimiento a nivel internacional.

En la región también hay varias otras bodegas que merece la pena visitar: Moorooduc Estate, Paringa Estate, Quealy Winemakers y, sobre todo, Two Minutes by Tractor, donde hay un restaurante con una carta de vinos impresionante que ha ganado algunos premios.

Para los amantes de la historia

Monte Etna, Sicilia, Italia

Un volcán humeante, inusuales viñedos, unas ruinas de templos griegos, playas salvajes y una vino excelente - todo esto atrae a los amantes del vino interesados ​​en la historia de Sicilia. Los científicos han descubierto recientemente que en esta isla, la más grande del Mediterráneo, ya se hacia vino hace 6.000 años.

Hasta hace poco, los vinos sicilianos tintos, blancos y rosados ​​no disfrutaban de una especial fama. Sin embargo, ahora, a pesar del riesgo de erupciones, la región que rodea el Etna se ha convertido en un lugar de renacimiento de la vinificación siciliana. Su suelo único con partículas de lava y cenizas ha atraído a docenas de los mejores productores de vino de Italia y del resto del mundo.

Asegúrate de visitar bodegas como Benanti, Tenuta delle Terre Nere, Vino di Anna y Planeta Sciara Nuova.

Los amantes del vino suelen alojarse en el Hotel Monaci delle Terre Nere (el precio de las habitaciones va desde los 250 $ hasta los 750 $), situado en el edificio de un antiguo monasterio. A día de hoy se ha convertido en un complejo ecológico de lujo con una superficie de 16 hectáreas, donde se puede practicar yoga con los viñedos al fondo y alojarse en unas habitaciones con paredes de lava y vistas al Etna y el mar.

Para los amantes de la comida

Granja de rosca simple en Sonoma, California

La atmósfera relajada de Sonoma a menudo se ve ensombrecida por el brillo y el glamour de Napa. Pero Sonoma, sin duda, supera a su gemela en lo que se refiere a la diversidad de vinos, con excelentes chardonnays, pinot noirs, syrahs y una docena de otras variedades. Decenas de fincas gastronómicas, cervecerías artesanales, sidras y destilerías lo convierten en un paraíso para los amantes de la comida.

Ahora cuenta con una nueva razón para visitarla: Single Thread Farms, un restaurante combinado, posada, finca y pequeña bodega que abrió sus puertas en diciembre del año pasado en Healdsburg. Gracias al Single Thread Farms, la tranquila industria del vino de Sonoma ha alcanzado un nuevo nivel.

Situado en un antiguo edificio de correos frente a la encantadora plaza central de Healdsburg, el restaurante-posada son también el lugar perfecto para explorar las bodegas cercanas en Russian River, Dry Creek y Alexander Valley, y los nuevos y sofisticados salones de degustación ubicados alrededor de la plaza.

La joya de la corona de Single Thread es su restaurante, donde el chef Kyle Connaughton prepara su menú de 11 platos japoneses y californianos para los que utiliza ingredientes provenientes de la granja de Single Thread.

Las cinco habitaciones (cuyo precio es de 900 $) reflejan una estética inspirada en el ryokan japonés, e incluyen un infusor de té Teforia Leaf. Los expertos recomiendan especialmente visitar las siguientes bodegas: Ridge Lytton Springs, J Vineyards, Ramey Wine Cellars, Jordan, Copain.

Para los amantes de la naturaleza

Central Otago, Nueva Zelanda

No todo el mundo sabe que Nueva Zelanda no solo produce Sauvignon blanc, sino también otros vinos, y el número de excelentes regiones vinícolas es tan grande que destacar una sola no es tarea fácil. Sin embargo, si hablamos de los más pintorescos, el más destacado es Central Otago con sus impresionantes montañas y lagos de aguas cristalinas de color azul, así como un pinot noir maravilloso.

Central Otago está situado junto a Queenstown (por cierto, allí comienza la famosa ruta Milford, considerada la mejor ruta de senderismo del mundo). También podrás encontrar la pequeña bodega Monte Michael. El año pasado, esta bodega abrió directamente en los viñedos el único hotel B&B de la región.

Sin embargo, el lugar más lujoso para relajarse es el Azur Lodge, que ofrece nueve lujosas villas privadas, cada una de ellas con una vista fabulosa del lago y las montañas (850 $ la noche).

También debes intentar visitar las siguientes bodegas: Peregrine, Rippon, Burn Cottage, Mt. Difficulty, Two Paddocks, Quartz Reef y Felton Road.

Para los amantes del arte y el vino rosado

Chateau La Coste, Provenza, Francia

Si crees que en la Provenza tan solo encontrarás vino rosado, estás totalmente equivocado. Esta región de Francia es increíblemente hermosa, y hoy en día cabe destacar la bodega y centro de arte Château La Coste cerca de Aix-en-Provence, donde el hotel de lujo Villa La Coste, que cuenta con 28 habitaciones con vistas a los viñedos, acabó de construirse este mismo año (800 $ la habitación).

Cuando un desarrollador irlandés y coleccionista de arte Patrick McKillen compró esta bodega de 240 hectáreas hace 15 años, invitó a una serie de escultores de primera categoría y arquitectos que convirtieron el complejo en un lugar único.

Las elegantes y minimalistas habitaciones dan acceso a unas espaciosas terrazas privadas que ofrecen una hermosa vista de los viñedos. El verano pasado Francis Mullmann, famoso por cocinar platos a la brasa, abrió allí un restaurante, mientras que los amantes de la cocina clásica francesa pueden disfrutar de la comida de un chef francés.

Un complejo de spa fantástico, obras maestras de arte, piscinas privadas, un bar con una biblioteca, un cine al aire libre y una excelente cocina. Puedes visitar otras bodegas, pero ¿tendría sentido?

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