Seguramente creas que no merece la pena dedicar tu tiempo a intentar mantener la salud mental, especialmente en los momentos en los que estás desbordado. Estás equivocado.
Hoy en día, ser empresario significa estar en constante movimiento. Si tienes un nuevo negocio que acabas de abrir, estás buscando socios potenciales de negocios y financiación o estás ampliando la startup que has estado dirigiendo durante los últimos años, ¿no parece que siempre tienes algo que hacer?
Estar en movimiento puede ser emocionante (la mayor parte del tiempo), pero también puede ser perjudicial para tu salud mental. Trabajar constantemente significa estar estresado la mayor parte del tiempo, pasar menos tiempo con tu familia y amigos y descuidar el cuidado de ti mismo. Pero si realmente te importa tu salud - y la salud de tu empresa, entonces necesitas mantener tu salud mental bajo control.
Por suerte, existen muchas maneras fáciles de mantener la salud emocional, incluso aunque seas un empresario ocupado. Estas son algunas de las mejores maneras para priorizar tu salud mental sin sacrificar la salud de tu negocio.
1. Desintoxícate de las redes sociales
Lo más probable es que pases demasiado tiempo en las redes sociales. Ya sea para uso personal o para gestionar tu negocio, es probable que estés pasando más tiempo en estas plataformas del que deberías. Según un estudio del MIT, el estadounidense medio pasa 24 horas a la semana navegando por sus redes sociales.
Aunque pasar un poco de tiempo viendo Netflix mientras te relajas al final del día no tiene nada mala, es probable que gran parte de ese tiempo que pases en Internet esté ocupando un tiempo que podrías estar aprovechando para salir a correr o para echarle un último vistazo al último balance de tu empresa.
Si no estás seguro de cuánto tiempo pasas en las redes sociales, descárgate una aplicación para saber cuántas horas pierdes al día, la cantidad podría sorprenderte. Además, si crees que podrías tener un problema, una verdadera adicción a las redes sociales, es posible que desees hablar con un terapeuta o probar algunas técnicas de desintoxicación.
2. Expresa tus sentimientos
Hablando de terapia, es probable que necesites deshacerte de algunos de los factores estresantes de tu vida y discutirlos con alguien. Para algunos de nosotros, eso significa abrirse a un familiar o amigo cercano o incluso llevar un diario sobre lo que está pasando para entender cómo nos sentimos. Según una reciente encuesta llevada a cabo por Accountemps, el 15% de los trabajadores encuestados habían tenido problemas para dormir debido al trabajo “muy a menudo”, mientras que el 29% dijo que esto les había sucedido “con alguna frecuencia”.
Este es un número enorme, y es muy probable que tú también hayas sufrido el mismo problema. Abrirse e identificar estos factores estresantes puede marcar la gran diferencia para tu salud mental.
Si tienes problemas reales y hablar con un amigo no es suficiente, hablar con un profesional es una buena opción. Incluso si no tienes tiempo para ir a la consulta de un terapeuta, existen consultorías online que te permiten hablar con un profesional sin perder demasiado tiempo.
3. Invierte en tu salud física. ¿Cómo? Simplemente relájate
El sueño es uno de los activos más valiosos. El descanso profundo te da el tiempo que necesitas para deshacerte del estrés y te da la oportunidad no solo de reflexionar, sino también de alejarte de todo lo relacionado con los negocios por un minuto.
Dormir lo suficiente también te da la capacidad mental completa que necesitas para liderar. La Fundación Nacional del Sueño de EE. UU. recomienda dormir entre siete y nueve horas cada noche. Aunque fijarte una hora determinada para irte a la cama puede parecer cosa de niños, establecer un horario que coincida con tu productividad (por ejemplo, si eres un búho nocturno, entonces ese es tu momento ideal para trabajar), te da la oportunidad de ser lo mejor que puedes ser cuando es hora de trabajar.
Dormir no es la única manera de relajarse, por supuesto: Encontrar rutinas que te ayuden a relajarte también es un componente vital de la salud física. Eso podría significar ir al gimnasio y/o hacer actividades físicas antes o después del trabajo. Podría significar meditar y/o usar aceites esenciales para sentirte más tranquilo mientras trabajas.
Independientemente de cuál sea tu preferencia, para mantener tu salud física debes establecer una rutina y un horario seguirlo.