Independientemente de si eres un estudiante con una tarea asignada, un padre con un proyecto en casa, o un director ejecutivo con una reunión importante para la que debes prepararte, todos compartimos una lucha común: la pereza.
"La gente hará más para evitar el dolor que para obtener placer" - Tony Robbins
¿Por qué soy tan perezoso?
La mayoría de la gente asume que eres perezoso por tus acciones. ¿Te has pasado el día entero usando tu smartphone? ¡Debes ser un vago!
En realidad, es posible rastrear tus acciones hasta tus creencias. Lo que crees que afectará directamente a la forma en que actúas. Pregúntate lo siguiente:
- ¿Qué proyecto reciente has dejado para más tarde?
- ¿Qué creencias tenías que te hacían ser perezoso?
- "Lo haré más tarde"
- "No es importante ahora mismo"
- "Voy a revisar mi teléfono un minuto más"
- ¿Cuáles fueron las consecuencias de mis creencias?
Imagina cómo cambiaría tu vida si cambiaras esas creencias e hicieras más cosas. Una vez que lo comprendas, podrás empezar a romper viejos hábitos y construir otros positivos.
El proceso no está exento de dolor, pero el éxito vale la pena.
Cómo derrotar a la persona egoísta que hay dentro de ti
Afrontémoslo... Si estás tomando la decisión de posponer algo que has dicho que harías, estás siendo egoísta. Puedes tratarte a ti mismo de la misma forma en la que tratarías a cualquier persona egoísta.
Establece unos límites claros sobre lo que harás para lograr tus metas y lo que no tolerarás
Un poco de precaución: no seas demasiado duro contigo mismo. Tener la cabeza llena de declaraciones negativas es tan malo para tu productividad como decidir pasar toda la tarde sentado navegando por Facebook.
Todo el mundo se sale del camino de vez en cuando, no es el fin del mundo. Conquistar la pereza es algo que requiere tiempo conforme adaptas tu cerebro para rechazar las distracciones y mantenerte concentrado.
Aprende a no ser perezoso y deja de posponer las cosas
Ahora que has dado el primer paso para ser consciente de que estás siendo perezoso, puedes implementar una serie de técnicas para motivarte y mejorar tu productividad. No existe ningún remedio mágico, todo comienza con la creencia, que construye una base para la técnica.
Empieza por escribir las metas para ti o tu proyecto. Poder leer esto te hará más responsable
Añade una fecha de vencimiento para tu meta y empieza a trabajar para alcanzarla. Recuerda que no debes darte demasiado tiempo o volverás a acabar en el hábito de posponer las cosas. Existen formas de equilibrar el tamaño de tu tarea y las fechas de vencimiento tales como...
Para alcanzar más, divide tus tareas en trozos más pequeños
"El hombre que mueve una montaña comienza por llevarse pequeñas piedras" - Confucio
¿Alguna vez te has encontrado con una tarea que creías que tardarías días o semanas en completar? ¿Crees que te sentirías motivado para empezar a trabajar en ello inmediatamente o para posponerlo?
Utiliza tu propia psicología a tu favor dividiendo tus tareas y aprovecha las pequeñas victorias
Divide la enorme tarea en varias tareas pequeñas que puedas realizar y tacha cosas de tu lista de tareas pendientes. Esto te dará confianza para mantener el buen camino sin sentirte abrumado.
Elige el entorno adecuado
Los hábitos son algo más que cosas que hacemos repetidamente, están fuertemente influenciados por el entorno en el que trabajamos.
Piensa en ello.
- ¿Tienes el teléfono cerca?
- ¿Está encendida la radio?
- ¿Tienes abierto el correo electrónico?
- ¿Hay otras personas dando vueltas por la habitación?
Las distracciones pueden parecer pequeñas, pero pueden sumarse rápidamente y hacer que pierdas la concentración. Elige un ambiente de trabajo propicio para tu estilo de trabajo.
Algunas personas pueden trabajar en una cafetería con auriculares, otras prefieren hacerlo en una habitación cerrada con solo una lámpara. No existe una respuesta equivocada.
Haz un seguimiento de tu progreso para multiplicar tu éxito
"Lo que se mide, se puede gestionar" - Peter Drucker
Si quieres perder peso y no estás controlando las calorías que consumes, ¿cómo esperas tener un éxito constante? ¡El seguimiento de tus objetivos no es diferente!
Puedes usar métodos de la vieja escuela, como lápiz y papel, o usar un servicio útil de seguimiento de metas, pero sea como sea necesitas registrar tu progreso. Además, hay algo extrañamente satisfactorio en ir tachando cosas de tu lista de tareas pendientes.
Aprende a hacerte responsable de tu nuevo estilo de vida. Ser responsable me lleva al siguiente tema...
¡Centrarte en trabajar y dejar de lado la diversión te convierten en una persona aburrida!
Conforme crees los nuevos hábitos y rompas tu rutina de pereza querrás seguir tu progreso y recompensarte a ti mismo.
Estás trabajando mucho escribiendo ese artículo sobre las antiguas artes marciales coreanas. Tómate un descanso y date una recompensa - unos minutos de descanso, una caminata por la calle, una siesta o un simple bocadillo.
No te veas tentado a ver la televisión durante una hora
Los grandes atletas saben cómo descansar y recuperarse. Al relajar tus músculos mentales y recuperarte adecuadamente, continuarás construyendo tu autodisciplina.
Reflexiones finales
Una última cosa que me gustaría decir sobre la lucha contra la pereza es la siguiente: empieza poco a poco.
Todo el mundo empieza este viaje con buenas intenciones, pero tal vez no comprenden sus creencias, o no saben cómo recompensar su progreso, o simplemente esperan demasiado de sí mismos, por lo que acaban fracasando y abandonando.
¿Sabías que puedes fracasar y no abandonar? Si te encuentras con viejos hábitos, no te castigues por ello. Reconoce lo que ha sucedido y vuelve a empezar. ¡Vuelve a ponerte de pie y ponte en camino hacia una versión más exitosa de ti mismo!