5 hábitos de las personas socialmente inteligentes
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Las personas socialmente inteligentes comparten una serie de rasgos comunes que les diferencian del resto de nosotros. Si quieres ser como ellos, tan solo debes adoptar sus hábitos. Te contamos cuáles son.

Las personas socialmente inteligentes comparten su red de forma proactiva

Las personas socialmente inteligentes son conscientes de que el mejor solucionador de problemas es una red fuerte. Sin embargo, esto es algo que ya sabe mucha gente. Lo que realmente diferencia a las personas socialmente inteligentes es que saben que la mejor forma de construir una red fuerte es ayudando a otros a hacer crecer la suya.

Las amistades son mejor cuando se comparten. Las personas socialmente inteligentes viven siguiendo este principio. La experiencia les ha demostrado lo lejos que se puede llegar ofreciendo cosas a los demás.

Cuando alguien te esté explicando un desafío al que se enfrenta, párate aunque sea unos instantes a reflexionar sobre las personas de tu red que han podido pasar por algo similar. Luego da un paso más y preséntalos. Es posible que descubras no solo cómo crece tu red, sino que el hecho de ayudar a los demás realmente te llena.

La gente socialmente inteligente no juzga a los demás

Independientemente de si se trata de la persona que sostiene la puerta, de alguien que comparte el ascensor o de la persona que te sirve el café, las personas socialmente inteligentes los reconocen y les muestran respeto.

¿Les caes realmente bien a tus amigos?

Lo hacen debido a que la vida les ha enseñado que la magia está en todas partes y que todo el mundo es capaz de hacer cosas mágicas. No solo eso, sino que también lo hacen porque son conscientes de que el mundo es pequeño, por lo que nunca se sabe si vas a volver a encontrarte con estas personas en el futuro.

Sigue el ejemplo de las personas socialmente inteligentes y la próxima vez que salgas de casa, deja el teléfono en el bolsillo y levanta la cabeza. Luego, haz un esfuerzo por sonreír y saluda a todas las personas con las que te cruces. Te sorprendería lo bien que hace sentir a otras personas el hecho de que les saluden y sonrían. Esto se debe al simple hecho de que la mayoría de nosotros estamos tan ocupados preocupándonos por nosotros mismos que olvidamos que el secreto de la felicidad está literalmente delante de nuestras narices.

Escuchan más de lo que hablan

¿Quieres saber quiénes son los que siempre acaban ganando? Los que escuchan. Las personas socialmente inteligentes lo saben, por lo que en lugar de hablar constantemente sobre ellos, prefieren preguntar a los demás.

La forma más rápida de gustarle a otras personas es demostrarles que te gustan. Las personas socialmente inteligentes son conscientes de este aspecto del comportamiento humano que a menudo se ve sobrevalorado, y lo utilizan en su beneficio haciendo preguntas que sacan lo mejor de los demás. Sin embargo, en lugar de ser como la mayoría de las personas, que en vez de escuchar, tan solo piensan en lo que van a decir a continuación, las personas socialmente inteligentes se callan, y prestan toda su atención a la persona que está hablando.

¿Cómo convertirte en un buen comunicador?

Cuando hables con alguien, escucha más de lo que hablas. No tardarás en darte cuenta de lo efectivo que es a la hora de construir relaciones.

Consideran cada interacción como una oportunidad de aprendizaje

Las personas socialmente inteligentes disfrutan aprendiendo sobre las perspectivas, pensamientos y sentimientos de las personas que les rodean. Esto se debe a que son conscientes de lo que ya saben y lo que hace que la vida sea divertida es aprender sobre lo que otras personas saben.

Nada crea más oportunidades que adoptar la mentalidad de un estudiante. Las personas socialmente inteligentes lo saben, así que todo lo que hacen lo hacen con el objetivo de conocer a personas nuevas y aprender.

Las personas socialmente inteligentes dan sin esperar nada a cambio

Las personas socialmente inteligentes no se sientan a pensar si les van a devolver el favor. John Maxwell dijo, "Llevar la cuenta es para los juegos, no para las amistades". Da sin esperar nada a cambio y adopta la mentalidad de que hacer el bien por los demás es siempre lo correcto.

Cuando tengas la oportunidad de hacer algo bueno por alguien, no lo dudes y hazlo. Seguramente acabes descubriendo que el hecho de ayudar a los demás también te ayuda a ti.

En lo que respecta a nuestro coeficiente intelectual, la genética desempeña un papel fundamental, por lo que no hay demasiadas cosas que puedas hacer para aumentarlo. Por suerte, son muchas las cosas que podemos hacer para aumentar nuestra inteligencia social.

No hay ninguna razón por la que cada vez que salgas de casa no puedas reconocer a cada persona con la que entres en contacto.

No hay ninguna razón por la que cada vez que mantengas una conversación no puedas priorizar el escuchar.

No hay razón por la que cada vez que alguien te cuente un problema al que se está enfrentando no puedas pensar en algún conocido que pueda ayudarle.

No hay razón alguna por la que cada vez que nos reunimos con alguien no puedas adoptar la actitud de un estudiante y dar por hecho que la persona que tienes frente a ti pueda enseñarte un par de cosas.

No hay ninguna razón por la que cada vez que se te presente la oportunidad de dar algo no lo hagas sin esperar nada a cambio.

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