Si eres una persona tímida y tienes problemas a la hora de hablar en público, sigue leyendo. A continuación te presentamos una serie de trucos que puedes utilizar para mejorar tus habilidades a la hora de hablar delante de otras personas.
Anota tus temores y metas
Tómate un tiempo para pensar sobre el origen de tus miedos. ¿Te asusta hablar en público porque has tenido una mala experiencia? ¿Es porque siempre has sido tímido? ¿Se debe a que te preocupa lo que la gente va a pensar sobre ti?
Anota tus miedos y especifica cómo te han frenado, tanto en el ámbito profesional como en el personal. Luego cambia de estrategia y escribe las diferentes formas en las que el hecho de superar este miedo puede ayudarte a avanzar. Describe cómo sería tu vida si fueras un orador público seguro de sí mismo. ¿Qué podría cambiar?
Grábate a ti mismo hablando sobre tus metas en lo que respecta a hablar en público
Ahora, habla sobre tus temores y objetivos al hablar en público - mientras te grabas a ti mismo. Este es un gran ejercicio por varias razones:
- El hecho de ponerte delante de la cámara ayuda a que hablar frente a otras personas resulte más fácil en el futuro.
- Te empuja a pensar en cómo estructurar mejor tu historia.
- Expresar tus miedos en voz alta y hablar sobre las soluciones que pretendes darles suele ser de ayuda.
Graba tu discurso 10 veces más y critica cada una de las grabaciones
¿Por qué algunas personas parecen naturales al hablar en público? Porque se han permitido el lujo de hacerlo mal.
Grabarte a ti mismo durante solo tres minutos al día es la mejor inversión que puedes hacer para mejorar tus habilidades de oratoria. Es posible que te sientas avergonzado cuando reproduzcas tus grabaciones, pero sigue viéndolas. Anota dónde necesitas mejorar, pero también toma nota de lo que estás haciendo bien.
Una vez que empieces a sentirte más cómodo hablando sobre tus objetivos de hablar en público ante la cámara, grabándote a ti mismo dando otros mini discursos - podrías contar tu historia favorita de la infancia o lanzar una idea.
Ya estás empezando a familiarizarte con el sonido de tu voz. Ahora ha llegado el momento de empezar a hablar delante de un público real.
Cuéntale una historia a un amigo de confianza
Si te sientes más cómodo en casa, invita a un amigo. Ponte cómodo. Tómate una copa si eso ayuda a que tus palabras fluyan mejor. Luego, simplemente comparte una historia que algún día podrías querer contar a un grupo más grande de personas.
Ve a una charla y haz una pregunta
Una buena forma de ganar más confianza es convertirte brevemente en el centro de atención - y luego salir de él. Asiste a una charla - puede ser una firma de libros, una discusión sobre comida mexicana, cualquier cosa - y levanta la mano durante la parte de preguntas y respuestas.
Publica en las redes sociales videos de ti mismo hablando
Probablemente ya sepas que en los Stories de Instagram y en YouTube, la gente se graba hablando sobre cualquier cosa - enseñan sus casas, describen lo que han comido o hacen preguntas y respuestas en directo. Para los que son reacios a hablar en público, este podría ser un gran ejercicio. Incluso puedes anunciar a tus seguidores que tienes miedo a hablar en público y preguntar si alguien tiene algún consejo.
Búscate a alguien para hablar en público
La probabilidad de que tengas amigos a los que les gustaría mejorar sus habilidades para hablar en público es bastante alta. Pregúntale a uno o dos de ellos si les gustaría formar un equipo para hacerle frente a ese miedo juntos. Podéis criticar los videos de los demás o entrevistaros mutuamente sobre varios temas. Tener un compañero puede hacer que toda la misión sea más motivadora y divertida.
Organiza una fiesta de narración de historias
Invita a un pequeño grupo de amigos a casa, y durante la cena, pídele a todos que compartan una historia. Podéis hacer preguntas del tipo "¿Qué cosa has soñado siempre con hacer pero todavía no has hecho?". Es posible que al principio tus amigos te miren raro, pero seguro que acaban animándose a participar.
Encuentra un público de bajo riesgo
Antes de hacer una presentación importante frente a 50 compañeros de trabajo, busca un público menos intimidatorio. Puedes ofrecerte como voluntario para hablar sobre tu carrera profesional en el colegio de tus hijos o para cantar en un karaoke.
Practica una charla real en un escenario con algunos amigos o compañeros de trabajo
Una vez conquistados estos pasos, es hora de dar una verdadera charla frente a un público real. Reúne a algunos amigos o compañeros de trabajo y pídeles que te den una opinión sincera. Si no lo haces, tendrás a 20 personas diciendo: "Buen trabajo". Pregúntales si has hablado demasiado rápido en ciertas áreas o si estabas haciendo algo raro con las manos. Luego hazlo una y otra vez con diferentes grupos de personas.
Es bastante común que a la gente le dé miedo hablar en público, es algo realmente intimidante. Sin embargo, si sigues estos consejos, podrás hacerle frente a tus miedos y convertirte en un orador de éxito.