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Si has empezado a trabajar desde casa, estos trucos de productividad te ayudarán a mantenerte organizado y a evitar distracciones.

1. Vístete igual que si fueras a la oficina

Cuando se empieza a trabajar desde casa, mucha gente suele ponerse lo primero que encuentra para estar lo más cómodo posible. Sin embargo, la ropa demasiado informal te hará sentir como si estuvieras en casa, no trabajando desde casa.

Por esta razón, debes hacer todo lo posible para sentirte como en la oficina, y eso empieza por ponerte la misma ropa. Si para ir a la oficina te pones traje, ponte lo mismo en casa. Esto te ayudará a concienciarte de que estás en el trabajo.

2. Mantén un horario y asegúrate de que todo el mundo lo respete

Uno de los mayores desafíos para aprender a trabajar desde casa es fijarte y mantener un horario real. Por norma general, debes empezar a trabajar a las 8 o 9, almorzar a la misma hora y encontrar algo de tiempo para hacer deporte por las tardes.

El siguiente obstáculo es asegurarte de que todo el mundo respete tu horario. Claro, trabajas desde casa, por lo que la gente puede tener la impresión errónea de que siempre vas a estar disponible para que te visiten, te llamen, o cualquier cosa. Sin embargo, debes dejar claro que durante tus horas de trabajo estás haciendo precisamente eso, trabajar.

3. Haz descansos

Además de mantener un horario real para asegurarte de ser productivo, necesitas hacer descansos con el fin de recargar las pilas y poder seguir con tus tareas.

Cuando vayas a la cocina a tomar café, date cinco minutos para hojear una revista o navegar un poco por Internet, y cuando sea la hora de comer, ve la tele, lee algo o relájate mientras comes.

4. Crea un espacio de trabajo real y mantenlo

Aunque trabajes en un apartamento pequeño, es de vital importancia que crees un espacio de trabajo dedicado. Además, es esencial que lo mantengas organizado. Pon siempre el ordenador, el teléfono, los papeles y la taza de café en el mismo lugar de la mesa. Ese lugar debe estar ordenado, ya que en él vas a pasar 8 horas todos los días.

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5. Aprende a usar listas y software de gestión del flujo de trabajo

Incluso si eres un empleado a tiempo completo de una empresa que trabaja a distancia, trabajar desde casa supone una carga de trabajo mucho mayor. Y si eres autónomo, la cosa es todavía más difícil.

Aunque puedes usar programas como Slack y Trello para organizar tu carga de trabajo y coordinarte con otros compañeros que también trabajen a distancia o en una oficina, una de las mejores plataformas es Google. Entre el calendario de Google, con sus recordatorios personalizables, y Google Drive, que te permite acceder a los archivos desde cualquier lugar, el software de Google es un multiplicador de fuerza cuando eres tu propio equipo de recursos humanos. Y lo mejor de todo es que es totalmente gratis.

6. Olvídate de que estás en casa

Siempre hay un millón de cosas que puedes hacer en casa, desde arreglar la cisterna a cambiar esa bombilla fundida, sin embargo, debes ser consciente de que estás trabajando.

Si te permites desdibujar la línea entre la casa y el trabajo durante las horas de trabajo, pronto empezarás a perder tiempo en otras cosas que no son tu trabajo.

7. Toma un poco de aire fresco y haz deporte

Acabar el día de trabajo desde casa con aire fresco y hacer que la sangre se mueva (como en un gimnasio) es de vital importancia para reducir el estrés.

Al no tener a tus compañeros de trabajo cerca, quienes pueden ayudarte a hacer el trabajo más llevadero, dar un paseo o salir a correr o a montar en bicicleta son unas formas fantásticas de recargar las pilas.

8. Asegúrate de tener luz en tu espacio de trabajo

Incluso si sueles tener una luz tenue en casa, el lugar en el que trabajes debe estar bien iluminado. Esto ayudará a aumentar tu energía, reducir el cansancio de la vista y mantenerte más concentrado.

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Cambia las bombillas o consigue una lámpara de escritorio brillante que genere una luz similar a la del sol natural.

9. No pases todo tu tiempo de trabajo en casa

Incluso si tu casa es tu principal lugar de trabajo, deberías intentar trabajar de vez en cuando en una cafetería o en una biblioteca así como mantener reuniones en las oficinas de tus colegas o en restaurantes de vez en cuando. Esto mantendrá las cosas más frescas y te ayudará a mantener tus habilidades interpersonales para cuando puedas volver a trabajar en una oficina.

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