5 preguntas que debes hacer para destacar en las entrevistas de trabajo

5 preguntas que debes hacer en tus entrevistas de trabajo para convertirte en el candidato perfecto.

Has pasado una hora respondiendo a las preguntas de los entrevistadores de la empresa para la que deseas trabajar. El entrevistador principal acaba de tomar algunas notas en su página, te mira, sonríe y dice, "así que, ¿tienes alguna pregunta para nosotros?"

"Ermm..."

Eso no da una buena impresión.

Has preparado respuestas a preguntas probables y ahora te quedas en blanco cuando te conviertes en el entrevistador.

No tengas miedo, ya que después de leer este artículo jamás volverás a verte en esta situación.

Es posible que te digan que la entrevista ha terminado cuando te pregunten si tienes alguna pregunta. Sin embargo, tus preguntas o la falta de ellas serán utilizadas para evaluarte.

No permitas que esto te acobarde. Ya has hecho lo más difícil, a partir de ahora eres tú quien controla la entrevista.

Aprovecha esta oportunidad para sacarle ventaja al resto de candidatos y conocer más sobre el puesto y la empresa.

Cualquier nuevo trabajo es el comienzo de una nueva relación. Pasas la mayor parte del día o yendo al trabajo o trabajando. Luego están todos los correos electrónicos que tienes que leer desde casa, las conferencias telefónicas, las cenas de trabajo…

Considera estas dos preguntas: ¿Te conformarías con alguien que no tuviera nada en común contigo? ¿Estarías dispuesto a invertir tu valioso tiempo y energía en alguien que no compartiera tus valores fundamentales?

Lo más probable es que no. Entonces, ¿por qué te conformarías con una empresa con la que no tienes nada en común y que no comparte tus valores?

Hazte un favor, aprovecha tus preguntas para explorar las cualidades internas de tu posible futura empresa.

Los entrevistadores son unas personas muy ocupadas.

Además de entrevistarte a ti y al resto de candidatos, también tienen otro trabajo. Más que eso, normalmente tienen familias y les gustaría llegar a casa a una hora razonable.

Debes investigar un poco sobre la empresa antes de acudir a la entrevista. Si lo has hecho, entonces no necesitarás hacer preguntas del tipo…: "¿Quiénes son los principales competidores de la empresa?" o "¿Qué cualidades debe tener la persona que ocupe el puesto?"

No importa lo bien que hayas hecho la entrevista, este tipo de preguntas harán que seas descartado de forma automática.

No puedes conocer la dinámica de los entrevistadores, pero tendrás una idea general de sus puestos de trabajo y de la forma en la que interactúan.

Cuando hagas tus preguntas, debes ser considerado con la gente a la que preguntas. No quieres poner a alguien en una situación incómoda al formular una pregunta en la que, por ejemplo, fomentas comentarios potencialmente negativos sobre la organización, especialmente si tu futuro jefe se encuentra entre los entrevistadores.

Haz preguntas neutrales o animadas/positivas si es posible. Y, si ves a alguien que tiene dificultades para responder a tu pregunta, ayúdale.

Tú: Se trata de una gran oportunidad para comprender la dinámica de la organización, especialmente la que existe entre el titular del puesto y el jefe.

Si te dicen que el titular del puesto ha sido ascendido, entonces puedes esperar que la organización desarrolle a su personal. Sin embargo, si este abandonó su puesto porque las exigencias eran demasiado altas, entonces puedes esperar que te resulte difícil tener una vida fuera del trabajo.

Escucha con atención, lee entre líneas si es necesario, y toma una decisión sobre lo que te digan.

Entrevistador: Ellos ven a alguien que está evaluando la organización y asegurándose de que son los adecuados para la organización.

Si te ofrecen el puesto después de hacer esta pregunta, y aceptas, sabrán que vuestros ideales coinciden, que es justo lo que buscaban cuando empezaron a entrevistar candidatos.

Tú: En primer lugar, eres capaz de evaluar en qué te vas a meter si acaban contratándote.

Quieres oír resultados claros y concisos que sean alcanzables. Esto pone de relieve la comprensión de los objetivos de la empresa y que cada individuo tiene un papel importante que desempeñar para que la organización alcance sus objetivos.

Si te dan una lista enorme, entonces sabrás que estarás entrando en un edificio en llamas, algo que probablemente no deseas.

En segundo lugar, esto te ofrece una visión general de los principales resultados a corto y medio plazo y te permite evaluar si eres la persona adecuada para el puesto.

Entrevistador: Ven a un candidato motivado que establece prioridades y plazos claros para poder alcanzarlos. Este es el candidato perfecto para cualquier entrevistador.

Tú: Esta es la pregunta perfecta para comprender cuál es su prototipo de un trabajo bien hecho.

¿Son sus expectativas alcanzables? ¿Son apropiadas para el puesto? ¿Entienden lo que quieren del papel?

De nuevo, dependiendo de la respuesta, podrán evaluar si eres la persona adecuada para el puesto.

Entrevistador: Ven a un candidato lógico.

Está diciendo: "Para entregar X, necesito ser capaz de mostrar Y". Estás demostrando que entiendes que cada entrega necesita un conjunto de acciones para obtener un resultado.

Tú: Esto pone al entrevistador en un aprieto, ya que le obliga a centrar todos sus pensamientos en una respuesta exacta. No es una pregunta agradable, pero aprenderás mucho de su respuesta.

Debido a que no se les da mucho tiempo para pensar, es probable que respondan con mayor sinceridad. Esta es la honestidad que quieres oír.

Tendrás que evaluar si el consejo es positivo o negativo y lo que haces con él.

Entrevistador: "AHHHHHH!"

Les gustará la idea de que tu pensamiento vaya más allá, pero te aseguro que no lucharán por ser los primeros en responder a la pregunta.

Tú: Haz una pregunta que sea clave para decidir si encajas en la organización y la organización encaja contigo.

Si te apasiona el cambio climático y deseas conocer la postura de la empresa en este tema - pregunta.

Si ves el lugar de trabajo como una familia y quieres saber cómo ve la organización a sus empleados - pregunta.

Piensa en esta pregunta como en la pregunta del millón. Si no te preocupa la respuesta, entonces no vale la pena hacer la pregunta. Si la respuesta puede ayudarte a decidir si deseas trabajar para esta empresa o no, entonces la pregunta es perfecta.

Solo tienes una pregunta, úsala con cabeza.

Entrevistador: Sinceramente, ¿a quién le importa? Esta es tu pregunta. Lo que importa es su respuesta.

Estas son cinco preguntas para asegurarte de que nunca desaprovechas la oportunidad de averiguar algo sobre la empresa. Prepáralas con antelación, intenta memorizarlas, pero si no puedes, anótalas en un bloc de notas y llévalas a la entrevista.