El conocimiento es fortalecedor y puede cambiarte la vida. Las habilidades, comportamientos, hábitos, herramientas, métodos y principios intemporales y herramientas mentales nos ayudan a avanzar en nuestras vidas y carreras.
En nuestra economía moderna, ser capaz de aprender cosas rápidamente es esencial para tener éxito. Aprender más rápido significa obtener más conocimientos más rápido que otras personas.
Las personas que aprenden más rápido tienen ventaja. Y la buena noticia es que el aprendizaje acelerado es versátil y flexible: no tienes por qué dedicarle horas y horas a adquirir las habilidades que necesitas para mejorar. Puedes adquirir cualquier habilidad de forma incremental. Para ello puedes reservar una pequeña fracción de tiempo cada día o semana.
Los aprendices más inteligentes no tienen ningún secreto especial: cualquiera puede acelerar su proceso de aprendizaje. Con las técnicas adecuadas, puedes mejorar enormemente la forma de aprender, procesar nueva información y ampliar rápidamente tus conocimientos.
1. Combina estilos de aprendizaje compatibles con tus puntos fuertes
Cuando intentas acelerar el aprendizaje, no debes limitarte a un plan de estudios o a una estructura de aula, sino que prácticamente puedes elegir el contenido de muchas fuentes, expertos y autores. La forma en la que aprendes puede determinar tu ritmo de aprendizaje.
Un estilo personal de aprendizaje permite a los aprendices percibir, procesar, almacenar y recordar lo que están intentando aprender de una forma eficiente y más eficaz.
Actualmente existen muchas formas de estudiar cualquier tema, habilidad o materia: libros, cursos online, podcasts, vídeos, seminarios web, talleres, campamentos de entrenamiento, blogs, boletines informativos, conferencias, aplicaciones educativas, grupos de estudio y programas de tutoría.
El estilo o material de aprendizaje que elijas puede acelerar o ralentizar tu proceso de comprensión. El mejor estilo de aprendizaje es el que facilita el procesamiento o la comprensión de las ideas y los temas más rápidamente.
Una vez averigües cuáles son tus fortalezas y debilidades de aprendizaje, podrás elegir las estrategias de aprendizaje que mejor se ajusten a tus fortalezas.
Por ejemplo, algunas personas aprenden mejor solas que en grupo, mientras que otras prefieren ver vídeos en plataformas como YouTube.
Por otra parte, las personas a las que se les da bien escuchar pueden preferir los podcasts. Sin embargo, otros usan mapas, gráficos, diagramas, mapas mentales y esquemas, cualquier cosa que represente la información de forma visual. En última instancia, lo más importante es utilizar estrategias de aprendizaje que maximicen tu memoria.
Una vez hayas elegido el estilo de aprendizaje adecuado, utiliza técnicas avaladas por la ciencia como organizar tus sesiones de estudio dejando bastante tiempo entre ellas y enseñar a otras personas lo que has aprendido para mejorar tu retención y memoria.
2. Intenta comprender primero la estructura básica del tema que elijas
Cada tema o asunto tiene una estructura lógica: raíz, tronco, ramas y hojas. Primero intenta entender lo más básico. En otras palabras, tienes que conocer la raíz del árbol, el tronco, y luego ir avanzando a partir de ahí.
No empieces por las ramas o las hojas, sigue la raíz y ábrete camino hacia el tema. Primero tienes que entender los puntos básicos.
Elon Musk ha aprendido a dominar los pagos online, el vuelo de cohetes, la fabricación de coches eléctricos y un montón de otros sectores. Durante una sesión de preguntas en Reddit, un usuario le preguntó cómo le resultaba posible aprender tan rápido, a lo que Musk respondió:
"Creo que la mayoría de las personas pueden aprender mucho más de lo que creen que pueden. Abandonan poco a poco sin intentarlo. Un consejo: es importante ver el conocimiento como una especie de árbol semántico - asegúrate de que entiendes los principios fundamentales, es decir, el tronco y las grandes ramas, antes de entrar en las hojas/detalles".
Independientemente de los que decidas aprender o estudiar, empieza con lo básico. No te hagas el listo en el proceso. Es mejor conocer la raíz de un tema que buscar hojas y ramas sin unos fundamentos firmes.
Empieza por hacer lo que todos los demás han hecho. Una vez domines lo básico, puedes seguir adelante. Aprende de los expertos. Amplía tus horizontes y sigue el ejemplo de los expertos.
3. Date tiempo en modo "centrado" y "difuso"
Independientemente de lo que elijas aprender, ten en cuenta tanto los modos centrado como difuso. El modo centrado es el estado de aprendizaje que permite a tu cerebro profundizar en el tema que estás aprendiendo sin interrupciones.
El modo difuso se produce cuando permites que tu mente se tome un descanso y deambule libremente para hacer conexiones significativas. La mayoría de las personas se concentran en el aprendizaje durante demasiado tiempo sin disfrutar de descansos de calidad.
El cerebro humano no está hecho para permanecer en modo centrado durante horas. La atención prolongada a una sola tarea puede dificultar la retención y el recuerdo. Cuando el cerebro está activo durante mucho tiempo, lo que en realidad estás haciendo es bloquear el acceso al modo difuso, un estado más relajado.
Según las investigaciones, el cerebro deja de registrar gradualmente una vista, un sonido o un sentimiento si ese estímulo se mantiene constante en el tiempo - su rendimiento en la tarea disminuye.
El modo difuso es tan valioso como el modo centrado. Por lo tanto, haz descansos, permite que tu mente deambule, piensa en otras cosas y dale a tu cerebro tiempo para hacer mejores conexiones. Aprende mejor obligándote a descansar. El aprendizaje efectivo aprovecha los dos modos de aprendizaje.
El aprendizaje acelerado puede ayudarnos a aprender nuevas habilidades, conceptos e ideas de forma más rápida. Si deseas destacar en cualquier sector, tómate en serio tu aprendizaje personal. Si encuentras algo que pueda ayudarte a conseguir lo que quieres, ¡explóralo y no te detengas hasta que lo consigas!