10 trucos para volver al trabajo tras unas vacaciones
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Has disfrutado de unas merecidas vacaciones, pero ha llegado la hora de volver al trabajo.

Las vacaciones son algo maravilloso. También son beneficiosas, ya que te permiten recargar las pilas, aumentar la felicidad, relajar tu mente e incluso reducir el riesgo de sufrir muchas enfermedades. Sin embargo, hay algo sobre las vacaciones que no es tan fantástico, y es la vuelta al trabajo. Si pones en práctica estos 10 consejos, lo tendrás mucho más fácil para volver a recuperar el ritmo.

1. Prepárate antes de marcharte de vacaciones

Seguramente estés deseando salir de la ciudad, pero la vida será mucho más fácil cuando vuelvas si haces algunos preparativos antes de irte. Por ejemplo, puedes ordenar tu lugar de trabajo para que cosas como el correo sin abrir no se añadan al desorden ya existente. Revisa todos tus mensajes, correos electrónicos y el buzón de voz, y no te olvides de programar un mensaje que informe de que estás de vacaciones así como de proporcionar a tus empleados toda la información que puedan necesitar en caso de emergencia.

Por último, escribe una lista de los proyectos en curso y de las principales prioridades, así como de lo que esperas que tu equipo haya completado mientras estás fuera para que así puedas evaluar mejor los progresos.

2. Tómate un día de descanso

No vuelvas al trabajo directamente. Reserva un día o dos para relajarte, dormir un poco y recuperarte del jetlag si vas a viajar a un lugar que esté en otra zona horaria. Aprovecha este tiempo para deshacer las maletas, lavar la ropa e ir al supermercado.

3. Vuelve a la rutina

A nuestros cuerpos y mentes les encantan los hábitos diarios, así que asegúrate de que ya tienes una rutina establecida y saludable y síguela todo lo que te sea posible mientras estés fuera de la ciudad. Intenta despertarte y acostarte a la misma hora, come sano y haz ejercicio, aunque por supuesto, no seas tan estricto como cuando estás en casa, no debes olvidar que estás de vacaciones. Si no sigues tu rutina a rajatabla, no te culpes por ello. Aprovecha esos días de descanso para restablecer tus hábitos saludables para así ser productivo y estar concentrado cuando llegue el momento de volver al trabajo.

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4. Revisa el calendario

El día antes de volver al trabajo, revisa tu calendario. Lo último que deseas es llegar a la oficina y encontrarte con una sorpresa como una reunión cancelada. Es más, comprueba si alguna entrada del calendario se pueda posponer hasta que hayas lidiado con tus prioridades. Esto te permitirá tener la atención y la energía que necesitas para centrarte en las cosas más importantes.

5. Controla el tiempo

Seguramente tengas un millón de cosas en las que trabajar en cuanto vuelvas al trabajo, sin embargo, no tienes por qué completarlas todas hoy. Puede que incluso algunas de ellas puedan esperar algunas semanas o incluso un mes. Un truco para evitar estresarte nada más llegar al trabajo es no programar ninguna cita o reunión el día que regreses. Además, asegúrate de tomar descansos frecuentes para no agotarte.

Ni se te ocurra saltarte el almuerzo durante tu primer día de trabajo tras las vacaciones. Necesitas la energía que proporciona una comida nutritiva. Además, comer con tu equipo te permitirá hablar con él y descubrir lo que ha pasado durante tu ausencia, así como compartir historias de tus vacaciones.

6. Delega todo lo que puedas

Deja tu ego a un lado y admite que no eres capaz de hacerlo todo por tu cuenta. Este adagio es igual de apropiado cuando sales de la ciudad o regresas de vacaciones. La transferencia de responsabilidades puede ser complicada, pero la clave para delegar tareas es explicar claramente tus expectativas y asegurarte de que encuentras a la persona adecuada para el trabajo. Por ejemplo, no tendría sentido pedirle a un empleado sin interés en las redes sociales que revise tus cuentas mientras estás fuera.

7. Recuerda la razón por la que vas a trabajar

Tu "por qué" es lo que te saca de la cama todas las mañanas. Es lo que te da impulso y dirección y, lo más importante, aclara tu misión y responde a la pregunta crucial: ¿Qué estoy intentando conseguir hoy? Incluso un par de días fuera pueden cambiar tu forma de pensar. Redescubrir tu "por qué" te da enfoque y te permite priorizar lo que debes hacer para alcanzar tus objetivos.

8. Elimina las distracciones innecesarias

Como cualquier otro día, si quieres ponerte manos a la obra, primero debes bloquear las distracciones más significativas que te rodean en la oficina. Estas interferencias pueden ser de todo tipo, desde las notificaciones de tu teléfono hasta compañeros de trabajo preguntando cómo te ha ido el viaje. Cuando estés listo para ponerte a trabajar, mantén el teléfono apagado, cierra el navegador web, no asistas a reuniones inútiles y cierra la puerta de tu despacho.

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9. Trae tus vacaciones contigo

Si te has comprado algo fantástico durante las vacaciones que te evoque unos recuerdos placenteros, llévatelo al trabajo, porque cuando eres feliz, eres productivo. Otra forma de traer sus vacaciones de vuelta es hacerle frente a algo que te haya supuesto un reto antes de irte de viaje. Revisar estos obstáculos rápidamente te permite abordarlos desde una nueva perspectiva.

10. Planea tu siguiente escapada

Aunque acabas de volver a la rutina diaria, organizar tus próximas vacaciones es una forma excelente de mantenerte centrado y motivado. Busca algunas ideas frescas y empieza a pensar y a planificar, porque organizar tu viaje puede ser la parte más interesante.

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