10 formas de mantenerte saludable mientras diriges una empresa
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No importa lo buenos que sean los números de tu empresa si permites que tu salud se deteriore.

Cuando se trabaja para construir un negocio, resulta fácil dejar de lado las necesidades propias para poder dedicarle todo el tiempo y energía posibles a que la empresa tenga éxito. Sin embargo, descuidar tu propio bienestar es tan malo como descuidar tu empresa.

Incluso si te encuentras en medio de una negociación importante, cuidar de tu salud es incluso más relevante. Aunque parezca extraño, el autocuidado debe ser un objetivo importante del negocio. Si permites que los hábitos no saludables acaben dominando tu vida, es probable que también dejes caer tu productividad.

Asegúrate de que tu salud siga siendo una prioridad mientras llevas tu negocio. Sigue estos 10 consejos para mantenerte a ti (y a tu empresa) en plena forma y seguir prosperando junto con tu negocio.

1. Comprueba tu salud mental

Dirigir una empresa suele requerir muchas horas de trabajo duro. Por desgracia, esto puede dar lugar a que te sientas abrumado, estresado y aislado. Es posible que te sientas tan ocupado y concentrado en el trabajo que ni siquiera te des cuenta de que estos sentimientos están afectando a tu salud mental. Es esencial que te mantengas conectado a tus sentimientos y que compruebes tu salud mental con regularidad.

Una opción es escribir un diario. Este puede ayudarte a aclarar tu estado emocional e identificar un patrón de conductas perjudiciales. Un diario ofrece un formato fácil de seguir y puede ayudarte a controlar de forma visual cómo estás. Te permitirá registrar fácilmente hábitos como la dieta, el sueño, la actividad física, el consumo de alcohol y cafeína, los niveles de estrés y la actividad social.

2. Encuentra formas de reírte

En la gestión de un negocio hay momentos en los que no sabes si reír o llorar. Elige la risa siempre que puedas. Esta te ayudará a aliviar el estrés y a superar los momentos difíciles.

Encontrar formas de reír nos hace más felices y saludables, y nos permite sentirnos más relajados y rejuvenecidos. El humor se puede encontrar en todo tipo de cosas, ya sea en lo ridículo de una situación, encontrando cosas divertidas que leer o ver, o simplemente pasando el rato con personas que ven el lado divertido de cualquier situación. Ponte el objetivo de reírte al menos una vez al día.

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3. Sé social

Los humanos son seres sociales. Prosperamos en las interacciones sociales y encontramos consuelo en las comunidades de apoyo. No importa lo ocupado que estés, no permitas que esto te aisle. Dedícale tiempo a los amigos, la familia, la pareja y los hijos... a todas las personas que te importan.

Desarrollar y cultivar estos vínculos es un elemento importante de la salud emocional, mental y física. No siempre se trata de la cantidad de tiempo que pasas socializando, sino de la calidad del tiempo que pasas con tus seres queridos. Haz un esfuerzo por guardar el móvil. Esfuérzate por estar en el momento, involucra a otros y construye conexiones verdaderas.

4. Gestiona el estrés

El estrés conlleva una serie de emociones negativas y puede afectar a tu salud de forma negativa. Aprender a gestionar el estrés es esencial para cualquiera que esté haciendo frente a las presiones de dirigir una empresa. Una buena forma de gestionar el estrés es asumir el control de las situaciones difíciles y encontrar soluciones a los problemas que, de otra manera, te harían sentir molesto o abrumado.

Esto significa ser más proactivo en la gestión del tiempo, priorizando tu horario y compromisos, y aprendiendo a fijar límites y a decir no cuando sea necesario. Asume el control de tu día y trabaja para resolver proactivamente los asuntos y problemas que de otra manera acabarían agobiándote.

5. Muévete

El ejercicio regular es una parte importante de un estilo de vida saludable. Estar activo puede significar tener sesiones de entrenamiento regulares en el gimnasio o practicar un deporte, o simplemente incorporar más movimiento y actividad en tu día a día. Poner el cuerpo en movimiento de forma regular puede ayudar a mejorar la salud, reducir la presión arterial, mejorar el estado de ánimo y hacer frente al estrés, la ansiedad y la depresión.

Todos deberíamos hacer al menos 30 minutos de actividad física al día. Algunas de las cosas que puedes hacer son caminar o montar en bicicleta en lugar de conducir, subir las escaleras cuando sea posible, o incluso darte un descanso para levantarte del escritorio y hacer estiramientos.

6. Construye tu mente

No importa todo lo que hayas aprendido, no importa cuánta educación acumules o cuántas experiencias vivas, siempre debes continuar desarrollando y haciendo crecer tu mente. Tu mente es tu recurso más importante... tus pensamientos y acciones provienen del funcionamiento interno de tu mente.

Al comprender y desarrollar tu mente, puedes dirigir tu comportamiento de la manera que quieras. Y si esperas construir una empresa de éxito, deberías esforzarte por construir y entrenar tu mente retándote constantemente a aprender cosas nuevas.

7. Fíjate una rutina

Uno de los trucos más importantes para hacerle frente al agotamiento es simplemente evitar permitirte agotarte. La mejor forma de hacerlo, y de mantenerte al día con todas las cosas que tienes en tu lista, es fijarte una rutina que te funcione... y seguirla.

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Eso puede significar levantarte todos los días a las 5 de la mañana para poder hacer ejercicio y tener tiempo para meditar antes de sumergirse en un día agitado. También puede significar fijar una hora límite para irte a la cama, lo que te permite dormir toda la noche, dándote la energía necesaria para hacer todas las cosas que haces.

Juega con tu horario y haz ajustes para descubrir qué es lo que te funciona y qué rutina puedes mantener a largo plazo. Una vez que lo hayas hecho, tu cuerpo y mente se acostumbrarán a ello; se convertirá en un hábito. Descubrirás que tu rutina te da tranquilidad y crea espacio para un día productivo.

8. Lleva una dieta saludable

Cuando nos sentimos apurados y estresados, comer comida rápida sin ni siquiera darte cuenta es bastante fácil. Sin embargo, cuando nuestros cuerpos están mal alimentados, el estrés se cobra un precio todavía mayor en nuestra salud y dificulta que nuestros cuerpos y cerebros funcionen de forma óptima. Comer sano es una forma básica de apoyar tanto a tu cuerpo como a tu mente cuando te sientes presionado.

9. Recarga las pilas y descansa

Los empresarios suelen trabajar demasiado y no dormir lo suficiente. Muchos nunca se toman tiempo libre debido a que creen que eso va a afectar de forma negativa a su capacidad para tener éxito. Si ponemos excusas de que tenemos demasiado trabajo, ¿cómo podemos encontrar tiempo para dormir toda la noche o tomarnos un tiempo para recargar las pilas?

Estas excusas nos impiden disfrutar del descanso que necesitamos y alcanzar nuestro máximo potencial. Asegúrate de reconocer cuándo necesitas descansar. Dándole a tu cuerpo y mente suficiente descanso y tiempo libre para que se sienta rejuvenecido y recargado te permitirá ser más productivo y estar más concentrado durante las horas de trabajo.

10. Hazte un chequeo

A nadie le gusta tomarse tiempo para ir al médico, sin embargo, hacerte un examen físico regular es una parte importante para mantenerte sano y detectar cualquier problema médico antes de que se convierta en un problema mayor. Aunque hagas todas las cosas que hemos mencionado anteriormente, la visita al médico sigue siendo obligada.

Si algo no parece estar bien, o si te sientes mal, asegúrate de hacerte un chequeo. Y estamos hablando de todos los aspectos de tu salud, como hacerte limpiezas dentales. Asiste a tus citas médicas y recuerda seguir priorizando tu salud y bienestar.

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