Una nueva startup ucraniana de construcción de viviendas llamada Passivdom utiliza un robot de impresión 3D capaz de imprimir piezas para casas pequeñas. La máquina puede imprimir las paredes, los techos y los suelos de la maqueta de 35 metros cuadrados de Passivdom en apenas ocho horas. Las ventanas, puertas, fontanería y sistemas eléctricos son añadidos más tarde por un trabajador humano.
Una vez finalizada su construcción, estas casas son completamente autónomas y móviles, lo que significa que no necesitan conectarse a sistemas eléctricos y de fontanería externos. La energía solar se almacena en una batería conectada a las casas, y el agua se recoge y se filtra de la humedad del aire (o tú mismo puedes introducir agua en el sistema). Las casas también cuentan con un sistema de alcantarillado independiente.
El modelo más pequeño de Passivdom mide 35 metros cuadrados y cuesta 31.900 $, según cuenta la diseñadora Maria Sorokina a Business Insider.
Este es el aspecto de la casa cuando entras por la puerta principal. Se trata de un gran espacio abierto con una pequeña cocina y unas ventanas que van desde el suelo al techo.
Este modelo no incluye dormitorio independiente, lo que significa que los residentes necesitan un sofá cama. Hay un pequeño cuarto de baño cerca de la cocina.
Passivdom ofrece tres modelos de casas, aunque también fabrica modelos personalizados. Los modelos premium están equipados con muebles, pero el que se muestra a continuación no viene amueblado.
Estas casas también te permiten vivir sin estar conectado a los servicios públicos.
"Así podemos vivir en la naturaleza lejos de la civilización, pero con la comodidad de una casa tradicional. Esta tecnología puede permitirnos vivir en los bosques, en las montañas o en la costa. Muy lejos de la gente y las infraestructuras”, dice Sorokina.
Para construir una casa, el equipo de Passivdom traza el plan para la impresora 3D en sus fábricas de Ucrania y California. Capa por capa, el robot de siete ejes imprime el techo, el suelo, y las paredes de 20 cm de espesor, fabricados con fibras de carbono, poliuretano, resinas, fibras de basalto y fibra de vidrio.
Luego se añaden las puertas, ventanas, electrodomésticos, el sistema de alarma, los paneles solares, así como el sistema de limpieza, eléctrico y de ventilación.
Dependiendo del modelo, todo el proceso puede tardar menos de 24 horas. El diseño y la producción de casas más grandes con más especificaciones y acabados, como la de abajo, pueden tardar hasta un mes. Si la casa ya está fabricada, se puede enviar al día siguiente.
La startup cree que la impresión 3D es una forma más barata y eficiente de construir casas que se puedan vender a un precio relativamente asequible. "Más de 100 millones de personas no tienen casa", dice Sorokina. "Es necesario construir viviendas más asequibles".
Passivdom no es la única empresa que utiliza la impresión 3D para construir casas. Las startups de viviendas con sede en San Francisco Apis Cor, Dus Architects de Ámsterdam, así como Branch Technology de Chattanooga, Tennessee, dicen que pueden construir casas en cuestión de días o semanas.