5 trucos de productividad para mantener la concentración
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La productividad máxima es algo que todo el mundo desea conseguir. Desde los individuos hasta las empresas, todos buscan ser lo más productivos posible. Hay muchas herramientas y estrategias destinadas a ayudarnos con este objetivo.

Aunque hay muchos consejos genéricos disponibles en todas partes, hay algunos evidentes pero importantes que se nos escapan. A continuación te presentamos algunas formas de mantener la productividad que pueden ayudarte enormemente.

1. Trabajar en periodos cortos

Trabajar durante muchas horas agota a nuestro cerebro. Por supuesto, hacer descansos parece una pérdida de tiempo. Sin embargo, los estudios han demostrado que las pausas constantes pueden ayudarte a ser más productivo. Por ello, muchas técnicas de productividad incluyen la realización de pausas constantes y breves ráfagas de productividad extrema. Esto te ayuda a mantenerte alerta y a concentrarte en la tarea que tienes entre manos sin llegar a agotar tu cerebro.

Un ejemplo es la técnica Pomodoro. A continuación te explicamos cómo aplicarla:

  • Elige una tarea en la que quieras trabajar.
  • Programa un temporizador pomodoro durante 25 minutos. Existen aplicaciones para ello o puedes utilizar tu temporizador habitual.
  • Trabaja en la tarea durante 25 minutos.
  • Cuando termines y el temporizador se apague, pon una marca de verificación en un papel.
  • Tómate un descanso de 3 a 5 minutos para relajarte si tienes menos de 4 marcas en tu papel.
  • Después de 4 ciclos o 4 pomodoros, puedes tomarte un descanso más largo de unos 15-30 minutos.
  • Ahora reinicia el contador y empieza de nuevo el ciclo de 4 pomodoros.

2. Desconfiar de las técnicas de marketing

Intenta limitar las técnicas de marketing cuando vayas a trabajar. El marketing conversacional es una de ellas. Este tipo de marketing se centra en construir relaciones con los consumidores para que se conviertan en leads.

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Implementa el marketing conversacional en tu negocio y evítalo a la hora de trabajar. Escoger y elegir es importante a la hora de mostrar dedicación a tu trabajo.

3. Crear un espacio de trabajo dedicado

El entorno adecuado es de vital importancia en lo que a productividad respecta. Tener un espacio separado para trabajar en casa es muy importante, ya que esto te ayudará a trabajar mejor, y tu cama no es el sitio más propicio.

Si vas a hacer una conciliación bancaria o un simple presupuesto semanal, no lo hagas en el sofá o en la cama. Siéntate en tu mesa de trabajo o en algún lugar en el que no te relajes y holgazanees. Esto te ayuda a hacer el trabajo con más agilidad y precisión, y también te asegura que lo hagas en menos tiempo y con más eficiencia. También puedes utilizar la técnica pomodoro para esto.

4. Controlar tus finanzas

Este es uno de los consejos más infravalorados. Siempre que pensamos en ser productivos, pensamos en formas activas que afectan a nuestra productividad. No tener el entorno adecuado y tener que preocuparte constantemente por las cosas es tan perjudicial para tu productividad como cualquier otra cosa. Los problemas de dinero suelen atormentar tu mente, y si tienes a mucha gente metida en tus finanzas, es posible que desees estar atento a las transacciones que se realizan.

Aprende a hacer una conciliación bancaria. Compara tus registros financieros internos con los que te proporciona tu banco. Si hay transacciones inusuales o errores contables, podrás solucionarlo en cuanto te des cuenta. Esa es la razón por la que es importante hacer una conciliación mensual para tu negocio, de modo que siempre puedas estar al tanto de los gastos que se producen y de lo que hay que hacer. No querrás descubrir las cosas cuando ya sea demasiado tarde.

5. Desconectar después del trabajo

Esta es una de las cosas más difíciles de hacer, especialmente si trabajas desde casa. Mucha gente no sabe cómo tener un equilibrio entre la vida laboral y la personal. Esto puede acabar pasándote factura y no permitirte recargar las pilas. Cuando no tienes tiempo para recuperarte y refrescar tu mente, esta empieza a cansarse.

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Una mente cansada no te va a ayudar a ser productivo. Por eso debes aprender a decir "NO". Es muy importante que te tomes ese descanso que tanto necesitas y te des la oportunidad de reponer la energía que has gastado.

Conclusión

Ser productivo no es solo una decisión activa, sino también una forma de vida. Asegúrate de tener ordenadas todas las cosas que te rodean para que otras preocupaciones no asalten tu mente mientras intentas trabajar. Asegúrate de hacer muchas pausas y de descansar lo suficiente para poder dar lo mejor de ti sin cansarte.

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