3 errores en tu rutina matutina que te están robando tu energía y productividad
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A todo el mundo le gusta intercambiar consejos sobre cómo seguir una rutina matutina perfecta, pero cuando se trata de ponerla en práctica, hay algunos errores que son demasiado fáciles de cometer. Pulsar el botón de repetición, empezar el día desde la cama y sacrificar tu tiempo de productividad matinal por un maratón nocturno de Netflix son formas potenciales de sabotear todo el potencial de tus mañanas.

Cada vez son más las investigaciones que demuestran que las mañanas son el momento más óptimo para idear o ser creativo. Un estudio reciente ha llegado a la conclusión de que los momentos que se perciben como menos óptimos para el pensamiento y la creatividad (por ejemplo, a primera hora de la mañana, cuando se está aturdido y se toma la primera taza de café) son en realidad los más óptimos. "Los resultados mostraron un mayor rendimiento en la resolución de problemas durante los momentos no óptimos del día en comparación con los momentos óptimos", afirma la investigación.

Por lo tanto, el coste de cometer errores en tu rutina matutina es bastante alto. Imagina las ideas innovadoras para tu negocio, tu próximo libro o incluso las próximas vacaciones familiares que podrían surgir a la luz de la mañana. Asegúrate de no cometer los siguientes errores que te costarán productividad y paz.

Error 1: Salir de la cama en cuanto suena la alarma

Seguro que este error se comete con buena intención, como un mecanismo de defensa, por así decirlo. Si te obligas a salir volando de la cama en cuanto suena la alarma, es menos probable que te quedes tumbado y te pongas a discutir mentalmente si el viaje matutino puede permitirte cinco minutos más de siesta. Sin embargo, esta acción drástica te desconecta inmediatamente de tu cuerpo. ¿Una alternativa mejor? Tómate unos minutos para estirar y alargar tu cuerpo al máximo.

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Este concepto está inspirado en la investigadora Amy Cuddy, que acuñó el término "Power Pose". Cuando tu cuerpo se estira, te sientes más seguro de ti mismo. Además de este impulso al estado de ánimo, un estiramiento a primera hora (incluso poniendo los brazos en forma de V, lo que según Cuddy potencia una felicidad increíble) aumenta el flujo sanguíneo a todas las zonas del cuerpo.

Después de unos minutos de estiramiento, tómate tu tiempo para salir de la cama y realizar tu rutina matutina inmediata: preparar el café, lavarte los dientes y vestirte. A continuación, considera la posibilidad de volver a hacer la Power Pose de pie, o incluso durante tu ducha matutina.

Error 2: Consultar el teléfono inmediatamente

Una encuesta sobre el estilo de vida de los consumidores de móviles ha desvelado que uno de cada cuatro adultos jóvenes consulta su teléfono al minuto de despertarse. No cabe duda de que resulta tentador, sobre todo hoy en día, cuando hay tanta información en el correo electrónico, las redes sociales y los mensajes de texto. Pero Glenn Lundy, el anfitrión y fundador del increíblemente popular podcast #RiseandGrind, dice que esto es un gran error.

"Ni tu mente ni tu cuerpo están preparados para ese tipo de estimulación a primera hora", ha compartido Lundy. "Cuando te estás despertando, es importante centrarte en la presencia y la gratitud, enraizarte en tu propio cuerpo a través de algún movimiento matutino y anotar tus objetivos".

"Recuerda que no hay nada en tu teléfono que no pueda esperar", explica Lundy. "Además, estarás mejor equipado para gestionar cualquier crisis laboral o noticia emocionante cuando te hayas despertado completamente y hayas completado una rutina matutina saludable".

Error 3: Acostarte demasiado tarde

No te estamos diciendo cuántas horas debes o no debes dormir, pero considera lo siguiente. Si sabes que tienes la tentación de revisar tu teléfono a primera hora porque sientes que te estás perdiendo algo, imagina cuánto residirá esa tentación si te despiertas más temprano que la mayoría. Esto tiene su razón de ser. Un estudio realizado por Amerisleep puso de manifiesto las impresionantes diferencias entre los madrugadores y los que no madrugan en cuanto a productividad, salario y calidad de vida en general.

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El estudio reveló que "las personas que se levantan de la cama al amanecer - sí, estamos hablando de las 4 de la mañana - respondieron que se sentían "altamente productivas" el 71% de las veces. En el caso de las personas que duermen hasta las 11 de la mañana, el grupo con menos probabilidades de ser productivo, estos son productivos el 36% de las veces".

Esta productividad también se traduce en dinero, ya que el estudio descubrió que los madrugadores ganaban una media de 15.000 dólares más al año que los que dormían hasta tarde.

En última instancia, lo que funciona mejor en tu rutina matutina se reduce a la preferencia personal. Esto es una invitación a experimentar. Todos tenemos las mismas 24 horas, y todos tenemos una "rutina matutina", tanto si está grabada en piedra y se sigue habitualmente, como si es algo diferente cada día. Piensa que la primera hora del día marca la pauta para el resto de la jornada y, por lo tanto, es probablemente el momento más importante que debes aprovechar al máximo. Estírate, mantén el teléfono apagado y considera la posibilidad de levantarte antes de lo que estás acostumbrado. La prueba, tanto de productividad como de tranquilidad, se revelará por sí sola.

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