8 formas de aumentar la confianza en ti mismo
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Una de las mejores formas de tener una vida feliz, productiva y de éxito es teniendo confianza en ti mismo.

Las personas verdaderamente seguras de sí mismas creen en sí mismas. Son conscientes de sus puntos fuertes y débiles y los utilizan sabiamente. No buscan la aprobación externa, sino que optan por escuchar su intuición.

La mayoría de las personas carecen de confianza debido a que no saben mucho de sí mismas. Pasan más tiempo probándose a sí mismas ante el mundo exterior que yendo hacia dentro y siendo auto-reflexivos. Temen estar solas porque es cuando necesitan enfrentarse a sus lados oscuros.

Sin embargo, la vida es mucho más divertida cuando crees en ti mismo. Tener más confianza en uno mismo no solo conduce a una mejor calidad de vida, sino a relaciones más sanas, una mente tranquila y una sensación de relajación, incluso cuando las cosas van mal.

"Cuando tienes confianza, puedes divertirte mucho. Y cuando te diviertes, puedes hacer cosas increíbles". - Joe Namath

1. La confianza debe ganarse

La confianza no es un rasgo de la personalidad. Se trata de una habilidad. Puedes fortalecer tu músculo de la confianza tomando las decisiones correctas.

El crecimiento de tu autoestima es el resultado de creer en ti mismo y establecer las prioridades correctas durante el tiempo suficiente. También hay una diferencia entre decir que tienes confianza en ti mismo y creer de verdad en ti mismo y en tu valor como ser humano.

Repetir afirmaciones y decir que eres una persona segura de sí misma está bien, pero tu capacidad para mantener la fuerza y la calma en situaciones desafiantes demostrará si estás seguro de ti mismo o no.

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Tienes que creer en ti mismo, pero también tienes que demostrar que puedes enfrentarte a situaciones difíciles. De lo contrario, perderás la confianza en cuanto surjan las dificultades.

La confianza real te ayudará a rendir más, pero no te convertirá en un éxito de la noche a la mañana. Únicamente experimentarás los beneficios de ser una persona segura de sí misma si tus habilidades coinciden con tus creencias durante el tiempo suficiente.

2. Sal de tu cabeza

Resulta difícil tener confianza en uno mismo si estás constantemente preocupado por el pasado o el futuro. Y la mayoría de nuestras inseguridades tienen su origen en nuestros pensamientos. Tus miedos, juicios y dudas únicamente existen en tu cabeza.

Cuanto más tiempo pases escuchando tus inseguridades, más difícil será prestar atención a los demás, pero también a ti mismo.

Sin embargo, ser consciente y estar presente te ayudará a centrarte en lo bueno y a aumentar tu autoestima.

Aunque una rutina de meditación o mindfulness pueda parecer que requiere mucho tiempo, puedes empezar a cultivarla con pequeños pasos.

Meditar cinco minutos es mucho mejor que no meditar nada. Tomar tu café de forma más consciente, tomándote unos minutos, es mejor que ir con prisas a la oficina.

A veces, son los pequeños cambios los que pueden tener un impacto más significativo en nuestro bienestar.

Estar plenamente presente te permitirá experimentar la vida de una forma totalmente nueva. Además, aumentará tu confianza porque perderás menos tiempo preocupándote.

Tu lenguaje corporal, la ropa y la forma de tu cuerpo pueden influir en tu confianza, pero si tu mente no está clara, será difícil creer en ti mismo, por muy buen aspecto que tengas.

3. Déjate llevar por la corriente

De acuerdo con el Instituto Gallup, menos de un tercio de los empleados puede utilizar sus puntos fuertes en el trabajo. Sin embargo, los que sí utilizan sus puntos fuertes cada día tienen seis veces más probabilidades de estar comprometidos con su trabajo y tres veces más de tener una calidad de vida excelente.

Hacer lo que te gusta y lo que se te da bien no solo conduce a una vida mejor, sino también a una mayor confianza.

Las mejores cosas de la vida ocurren cuando puedes dejar que fluya y estar plenamente presente. A menudo, tu voz interior puede llevarte a los lugares más increíbles. Tan solo tienes que permitir que te guíe.

Sin embargo, la mayoría de la gente opta por hacer planes detallados y perderse en todo lo que queda por hacer en lugar de disfrutar del viaje. Y aunque la planificación es útil y a veces incluso necesaria, confiar en la intuición suele dar los mejores resultados.

4. Conoce la mejor versión de ti mismo

Tener más confianza es mucho más fácil cuando sabes por qué lo haces.

Visualizar tu mejor versión no significa que estés luchando contra tu versión actual. Al contrario:

Trabajar en ti mismo es un signo de autoestima.

Una vez que sepas quién quieres ser en el futuro, será más fácil actuar como esa persona en el presente.

Para conocer la mejor versión de ti, piensa en las diferentes áreas de tu vida:

  • Salud
  • Negocio/Carrera
  • Finanzas
  • Familia y amigos
  • Diversión y ocio
  • Espiritualidad/Religión

Al crear una visión para cada área, obtendrás una imagen ideal de lo que quieres ser.

Tómate tu tiempo para reflexionar sobre cada uno de estos campos. Comprueba si ya te estás mostrando como la mejor versión de ti mismo y qué podrías mejorar:

  • ¿Cómo es tu entorno físico? ¿Dónde vives?
  • ¿Cómo cuidas tu salud? ¿Cómo te sientes en tu piel?
  • ¿Cómo manejas tus finanzas? ¿Cuál es la trayectoria profesional ideal?
  • ¿Y las relaciones? ¿Cómo te relacionas con tus seres queridos?

Pregúntate quién quieres ser en cada una de estas áreas y recuérdate esa versión ideal de ti siempre que te falte valor para tomar una decisión audaz.

Si te muestras como esa persona, podrás crear la realidad de tus sueños.

5. La gente te inspira o te agota

Te costará creer en ti mismo si estás rodeado de personas que no creen en ti. Y si estás rodeado de quienes te quieren y te apoyan, también serás más consciente de tus puntos fuertes y de tu singularidad.

Por eso, reorganizar tu círculo social puede hacer que ganes o pierdas la confianza en ti mismo.

Hay que reconocer que este puede ser el paso menos doloroso para aumentar tu confianza, pero es fundamental. No puedes llegar a la cima si tus amigos y tu familia intentan hundirte. Simplemente no funciona.

Sin embargo, no es necesario que cambies todo tu círculo social de golpe. Puedes hacerlo paso a paso. Puedes, por ejemplo, empezar reduciendo el tiempo que pasas con personas negativas y que no te apoyan y aprovechar ese tiempo para actividades que te hagan sentir con más energía y más vivo.

Con el tiempo, puedes unirte a eventos y redes con personas afines donde conocerás a compañeros que te entenderán y apreciarán.

Tu tiempo y tu energía son tus recursos más preciados y, al estar cerca de alguien, le dedicas tu tiempo y tu energía. Así que asegúrate de que valen tus recursos.

"No puedes controlar a la gente, pero sí puedes controlar de quién te rodeas. Elige rodearte de gente que crea en ti y sucederán grandes cosas". - Robert Tew

6. "No" es una frase completa

Si no sabes decir que no, acabarás viviendo la vida de otras personas en lugar de la tuya.

Cada vez que dices sí a una cosa, estás diciendo no a otra. Y cuando nos falta confianza, solemos decir sí a los demás y no a nosotros mismos. Al repetir ese patrón con frecuencia, normalizamos el hecho de poner a los demás en primer lugar y a nosotros en segundo.

Sin embargo, no necesitas justificar tus decisiones. A veces, decir "no" es suficiente y hay que respetarlo.

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Las personas seguras de sí mismas pueden establecer límites. Saben que necesitan cuidar de sí mismas. Por eso son capaces de decir que no sin arrepentirse.

De acuerdo con Bronnie Ware, enfermera de cuidados paliativos, uno de los arrepentimientos más comunes de las personas que están a punto de morir es:

"Ojalá hubiera tenido el valor de vivir una vida fiel a mí mismo, no la vida que otros esperaban de mí".

En tu último día, no estarás orgulloso de satisfacer las necesidades de los demás. En cambio, te arrepentirás de no haber vivido tu vida al máximo.

Aunque a veces parezca que tenemos tiempo suficiente para hacer ciertas cosas más adelante en la vida, probablemente no lo tengamos.

No sabes si te levantarás mañana. Cada uno de tus días es un regalo. Y depende de ti aprovechar al máximo tus 24 horas.

"La mitad de los problemas de esta vida se deben a haber dicho sí demasiado rápido y a no haber dicho no lo suficientemente pronto". - Josh Billings

7. Come, duerme, muévete, repite

No es casualidad que las personas con gran confianza en sí mismas estén más sanas y vivan más tiempo: Los estudios demuestran que la confianza desencadena emociones positivas que conducen a beneficios para la salud.

Además, estas emociones positivas mejoran nuestra capacidad cerebral, lo que se traduce en una mayor concentración y productividad.

Cuidar tu salud física también te conducirá a la claridad mental, lo que te permitirá tomar decisiones mejores y más sustanciales y tener más confianza en ti mismo.

Es un círculo vicioso, pero positivo. La confianza y la salud van de la mano. Una alimenta a la otra.

Si te sientes bien en tu piel, tendrás más confianza. Y si tienes confianza, cuidarás mejor tu salud física.

Además de la nutrición y la actividad física, la calidad de tu sueño desempeña un papel importante en el aumento de tu confianza. A veces, una hora de descanso adicional puede marcar la diferencia entre un día de éxito y un día pésimo.

8. Céntrate en las cosas buenas

Recordar nuestros errores y preocuparnos por el pasado es mucho más fácil que estar orgullosos de nuestras victorias. A la mayoría de las personas se les da muy bien machacarse recordando lo negativo y los fracasos del pasado. Sin embargo, criticarte a ti mismo siempre reducirá tu autoestima.

Cometer errores no significa que tengas que aferrarte a ellos. Puedes elegir dejarlo pasar y seguir adelante.

Mientras que las personas inseguras se recuerdan a sí mismas los fracasos, las que tienen confianza en sí mismas se centran en las victorias.

Si no estás acostumbrado a destacar tus victorias, puedes empezar un diario de éxitos y anotar todo lo que logras a lo largo de tus días.

Es muy fácil olvidarse de lo bueno y centrarse en lo malo porque así está conectado nuestro cerebro.

Tu cerebro no quiere que seas feliz; quiere que estés seguro. Por eso es mejor centrare en las situaciones desafiantes y peligrosas que en los buenos recuerdos.

Todo nuestro sistema educativo se basa en este hecho: los errores se destacan, pero las victorias no se aprecian. Por eso resulta tan extraño celebrar nuestros logros y estar orgullosos de nosotros mismos. Sin embargo, sentirse bien con las victorias es un gran estímulo para la confianza.

Anotar los momentos positivos te ayudará a tener en cuenta lo bueno y a recordar más las cosas que funcionaron bien en el pasado.

Al final de cada día, anota lo que ha ido bien y lo que has conseguido.

"Llevas años criticándote y no ha funcionado. Prueba a aprobarte a ti mismo y verás qué pasa". - Louise Hay

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