A medida que nos acercamos a lo que todos esperamos que sea el fin de la pandemia, las empresas se enfrentan a un nuevo reto: cómo hacer que la gente vuelva al trabajo. No es fácil considerar cuándo y cómo hacer que tu equipo vuelva a la oficina de forma segura, o si es algo que debe hacer.
Esa es exactamente la cuestión que Google está abordando con un nuevo conjunto de políticas presentadas recientemente en una entrada de blog publicada por el director ejecutivo de la compañía, Sundar Pichai. La mayor parte de la plantilla de Google ha trabajado de forma remota desde el comienzo de la pandemia, y la empresa había dicho anteriormente que planeaba que sus empleados volvieran a la oficina en septiembre.
Ahora, sin embargo, la empresa ha cambiado su postura y permitirá a los empleados elegir dónde desean trabajar. Si quieren volver a la oficina, pueden hacerlo. Si quieren trasladarse a otra oficina, pueden hacerlo. O, siempre que su función lo permita, pueden seguir trabajando a distancia... de forma indefinida. Eso significa que si quieres irte a vivir a una casa de campo en la playa durante un año, no hay problema.
Google dice que espera que alrededor del 20% de su plantilla siga trabajando a distancia de forma permanente. El resto, la compañía espera que trabaje "aproximadamente tres días en la oficina y dos días donde mejor funcione".
"Muchos de nosotros también disfrutaríamos de la flexibilidad de trabajar desde casa un par de días a la semana, pasar un tiempo en otra ciudad durante parte del año, o incluso mudarnos allí permanentemente", escribió Pichai. "El futuro lugar de trabajo de Google tendrá espacio para todas estas posibilidades".
Traemos a colación el planteamiento de Google porque creemos que merece la pena destacar que la solución correcta a este problema puede ser diferente para cada miembro del equipo. El viejo modelo de "talla única" no solo se está volviendo, bueno, viejo; creemos que el año pasado ha demostrado que, en muchos casos, hay formas mucho mejores de trabajar.
Esto nos lleva a lo que creemos que es el principio impulsor del nuevo plan de la empresa: "Todos estos esfuerzos nos ayudarán a trabajar con mayor flexibilidad y elección una vez que podamos volver a nuestras oficinas a nivel mundial", escribió Pichai.
Flexibilidad y elección
Hay algo brillantemente simple en este enfoque, resumido en esas tres palabras. El plan de Google es ser flexible a la hora de establecer las estructuras de trabajo, para dar a los empleados la posibilidad de elegir. Claro que hay muchos detalles en torno a ello, pero el plan es sencillo. Ofrecer a la gente flexibilidad y capacidad de elección.
Para ser sinceros, eso es raro incluso entre las empresas que se enorgullecen de tener una cultura orientada a las personas. Los almuerzos gratuitos y un estudio de yoga son muy diferentes a decir a los empleados que son libres de trabajar donde crean que pueden trabajar mejor. Son muy diferentes a descentralizar la forma de colaboración de las personas y permitirles la flexibilidad de tomar la decisión que más les convenga, no solo a la empresa.
Mientras que la mayoría de las empresas intentan encontrar la forma más rápida de volver a la situación anterior a la covid-19, Google mira al futuro y reconoce que no hay ninguna razón para volver atrás. En su lugar, Google está incorporando a su cultura una forma completamente diferente de pensar en cómo sus equipos van a trabajar juntos.
"El futuro del trabajo es la flexibilidad", escribió Pichai. "Los cambios anteriores son un punto de partida para ayudarnos a hacer nuestro mejor trabajo y divertirnos haciéndolo".
Ese debería ser, en última instancia, el objetivo: averiguar cómo "hacer nuestro mejor trabajo". Además, divertirse mientras lo haces también es un buen incentivo.