6 cosas importantes que aprendes después de convertirte en empresario
Página principal Estilo de vida

Para que los demás crean en tu negocio y en tu producto, es imprescindible que tú creas siempre en tu visión más que los demás.

En los negocios no hay atajos. Para tener éxito en los negocios y en la vida en general, hay determinadas cosas que debes saber y cumplir. De hecho, ser empresario es probablemente el trabajo más difícil del mundo.

Cuanto antes empiecen los niños a pensar como un empresario, mejor. Las habilidades que se adquieren al poner en marcha un pequeño negocio (aunque sea de niño) - puede ser algo tan pequeño como abrir un puesto de limonada en una calurosa tarde de verano - son difíciles de adquirir en la escuela. Los pequeños empresarios aprenden así a adaptarse a nuevos retos, a fijar sus propios objetivos, a crear un plan para ejecutarlos y a conocer sus propias limitaciones.

Sin embargo, lo que resulta realmente alarmante es que ningún instituto de educación infantil ofrezca clases sobre emprendimiento o negocios. Y aunque a continuación se mencionan algunas de las lecciones que uno aprende como empresario, no son todas ni mucho menos. Pero son realmente importantes y necesarias.

1. Cree siempre en tu visión e intuición

Para construir sus startups, los emprendedores se enfrentan a muchas elecciones diferentes y difíciles y sienten la importancia de la toma de decisiones cada día. Resulta imposible saber si una decisión es correcta o incorrecta antes de ver los resultados de la misma. El conocimiento y la comprensión del mundo de los negocios y la creencia en el producto que ofreces son excelentes formas de tener más confianza en tus decisiones. Así, para que los demás crean en tu negocio y en tu producto, es imprescindible que siempre creas en tu visión más que los demás.

2. El tiempo es el recurso más preciado, utilízalo con sabiduría

Todos los buenos empresarios son conscientes de que el tiempo es su recurso más valioso. No se puede comprar. No se puede encontrar. No se puede almacenar. No se puede comerciar con él. Pero siempre puedes planificar las cosas de manera que te ahorren tiempo y no acabes haciendo cosas innecesarias.

Sin embargo, al principio, todo empresario cree que puede y debe hacerlo todo en la empresa. Aunque esto puede ahorrar a muchos de ellos el tiempo de ejecución ya que vienen con más experiencia que sus empleados. Sin embargo, a la larga, siempre es inteligente agilizar el trabajo delegándolo en diferentes personas. Así siempre puedes ahorrar tiempo y concentrarte en una sola cosa: las ventas. Porque cualquier fundador de una empresa que no esté orientado a las ventas, al final acabará fracasando.

3. Conoce todo lo que puedas sobre tecnología

Lo bonito de la tecnología es que cambia a diario y por eso siempre se está en mejor posición para sacar nuevos productos. Dado que ambas piezas son complementarias, siempre es importante estar al tanto de las nuevas tecnologías.

Puedes mirar cualquier tecnología nueva de hoy o que hayas visto antes o cualquier tecnología sobre la que hayas leído. El día en el que la pieza de tecnología salga al mercado, estarás tan informado como cualquier otro. A partir de ese momento, solo se trata de esforzarte por aprenderla.

Si eres una de las pocas personas que conoce la tecnología al dedillo, te colocas en una posición única para presentar la tecnología a tu cliente y ver cómo podría beneficiarle.

La mentalidad que todo empresario debe tener para encontrar mejores oportunidades

Recuerda siempre que las nuevas tecnologías permiten el cambio. Y siempre que hay un cambio hay una oportunidad.

4. Potencia a tu equipo y celebra las pequeñas victorias

Aunque muchos empresarios y fundadores creen que deben impulsar a su equipo al máximo, por las buenas o por las malas, es imposible crear un ambiente de trabajo saludable si tú y tu equipo no estáis en la misma página. Una vez que empieces a creer en tu equipo de una manera que los empodere a venir a trabajar todos los días con una sonrisa y no con el ceño fruncido, ellos mismos agregarán valor a la empresa como nunca antes.

5. El fracaso forma parte del viaje

Todo buen empresario debe ser consciente de que el fracaso forma parte del viaje. Y el hecho es que la razón por la que solo un pequeño porcentaje de emprendedores tiene éxito es porque se dan cuenta de los errores que hay detrás del fracaso y no los vuelven a cometer. Así pues, el fracaso es una gran forma de juzgar las agallas que se tienen para dirigir un negocio.

Aunque puede haber ocasiones en las que el fracaso te llegue independientemente de lo mucho que trabajes. Así que aquí es donde la suerte juega un papel importante. Pero no es la única métrica del éxito. El fracaso puede enseñarte cosas que puedes pasar y tener en cuenta mientras trabajas en otro proyecto. Y esa capacidad de seguir aprendiendo y adaptándose es lo que hace que un gran emprendedor sea mejor que el resto.

5 habilidades de fitness que todo empresario debería desarrollar

6. Mantén la mente abierta: lo mejor de las cosas viene de los lugares más inesperados

Si algo tan simple como la gravedad pudo ser descubierto gracias a la caída de una manzana, no puedes imaginar cómo o cuándo podrías tropezar con algo tan importante para ti en tu vida.

Una vez que empiezas a mantener la mente abierta, pero también te refrenas de dejarte llevar, empiezas a subir de nivel para convertirte en un mejor empresario. Puede que haya días en los que tu conocimiento de las cosas no sea suficiente. Por lo tanto, de acuerdo con el punto antes mencionado sobre la tecnología, siempre es bueno tener la mente abierta. Estructuralmente, es posible que puedas evitar muchos retos operativos. Sin embargo, eso no significa que seas el único gran innovador de tu equipo.

Por favor, describa el error
Cerrar