Para la mayoría de la gente, los días festivos son un momento para relajarse y disfrutar de la compañía de amigos y familiares. Pero para muchos empresarios, es un día más de trabajo.
Aunque quemar el aceite de medianoche es a menudo una necesidad para poner en marcha tu empresa y mantenerla en marcha, un poco de descanso no solo puede ayudarte a recargar las pilas, sino que las investigaciones han demostrado que puede ayudar a aumentar tu productividad.
Un estudio interno realizado por la empresa de contabilidad Ernst & Young en 2006 demostró que por cada diez horas de vacaciones que un empleado tomaba, su calificación de rendimiento laboral al final del año aumentaba un 8%. En 2011, el sitio de viajes Expedia descubrió que el 52% de los empleados se sienten mejor en su trabajo y son más productivos después de las vacaciones. Otro estudio realizado por Harvard afirmó que la privación del sueño costaba a las empresas estadounidenses 63.200 millones de dólares al año debido a la pérdida de productividad.
Así que, antes de que decidas saltarte la barbacoa de un amigo o descartar la idea de escaparte un día, aquí tienes cuatro razones para darte un respiro durante los días festivos.
1. Reconectar con la gente
Hay más personas en tu vida además de los compañeros de trabajo. Sin embargo, ser un emprendedor hace que sea mucho más difícil mantener amistades fuera de tu startup. Cuanto más ocupado estás, más fácil es decirte a ti mismo que llamarás a alguien más tarde.
Deja que los días festivos sean un momento para recuperar las amistades que has relegado a un segundo plano y una ocasión para rodearte de tus seres queridos. Eso sí, asegúrate de hacerlo completamente desvinculado del trabajo.
2. Dar ejemplo
Los días festivos son el mejor momento para subirse al carro y apagar el teléfono, encender la parrilla y disfrutar de un día desconectado del acceso instantáneo y la conectividad que impulsa tu startup.
Si alguien te llama con el negocio en la cabeza, la pista del buzón de voz podría recordarle que en realidad es un día festivo.
Como empresario, deberías intentar construir la marca de los días festivos. Anima a otros emprendedores a apartarse del trabajo y disfrutar de su entorno.
3. Los días festivos deberían recordarte qué significa estar despreocupado
¿Te acuerdas de cuando eras un niño que iba en bicicleta por su barrio sin preocuparse por nada? Deja que los días festivos sean el momento de recuperar tu sentido de la aventura.
Divertirte no solo ayuda a relajarte, sino que puede ayudar a despejar la cabeza, lo que puede ayudar a fomentar la creatividad. Quién sabe, quizás vuelvas al trabajo con un enfoque totalmente nuevo para un problema que te ha estado molestando algún tiempo.
4. Necesitas reiniciar la marcha
Construir tu negocio o hacer un brainstorming de algo nuevo es genial, pero la única forma de recargar las pilas después de unas cuantas jornadas de 12 horas es dedicar algo de tiempo a reenfocar tu perspectiva. Cualquier emprendedor sufrirá de visión de túnel después de haber estado trabajando en un proyecto durante una semana, y probablemente notarás una gran caída en tu productividad. La única forma de solucionarlo es ahorrarte la fatiga visual e ir a un lugar tranquilo y desconectado. Haciendo esto, volverás renovado y listo para afrontar los problemas.