Los empresarios de éxito dicen que “no” a la mayoría de las ofertas. Esa es exactamente la gente con la que estás intentando hacer negocios.
Todos somos conscientes de que vamos a tener que hacerle frente al rechazo a lo largo de nuestras vidas, especialmente en el mundo empresarial. Sin embargo, cuando sucede, es un escenario completamente diferente. Independientemente de si se trata de un rechazo "diminuto" o de un golpe importante en el camino, resulta muy fácil sentirse profundamente afectado. Un rechazo puede dar lugar a que te pases días, o incluso más tiempo, encerrado en casa viendo tu serie favorita de televisión.
Si estás intentando alcanzar tus metas, lo más seguro es que estés experimentando el rechazo constantemente. Si no es el caso, entonces tendrás que preguntarte si estás arriesgándote lo suficiente. El crecimiento se produce cuando sales de tu zona de confort para hacer las cosas que te dan miedo. En ese lugar es muy posible que tengas que enfrentarte al rechazo. Estas son cuatro cosas que puedes hacer cuando te sientas rechazado.
1. Tómate un momento para gritar
Eres humano. Puedes intentar guardar todos esos sentimientos y emociones en tu interior, pero vas a necesitar buena suerte si quieres que esa estrategia te funcione. En algún momento, explotará, probablemente en la situación más inoportuna. Deja salir tu humanidad. Grita, corre y golpea tu escritorio.
Habla en voz alta incluso si estás solo y analiza lo que estás pensando. Habla con tu pareja o con un amigo. Para curarte, primero tienes que reconocerlo. No puedes arreglar un problema que directamente no admites.
2. Analiza el “por qué” del rechazo
Nuestras mentes clasifican el rechazo como algo malo, pero no siempre es así. La vida es nuestro mejor maestro. El rechazo nos ofrece la oportunidad de asegurarnos de que lo que estamos haciendo es lo correcto para nosotros. Evalúa por qué has sido rechazado. Determina si esto es algo que realmente deseas hacer, pero necesitas un mejor enfoque.
Si necesitas más experiencia, consíguela. Si este es un mensaje de advertencia diciéndote que lo que estás persiguiendo no es lo mejor para ti, escucha. Cuando hayas terminado de procesar tus sentimientos y emociones, analiza lo que ha sucedido. Un rechazo puede ser un bache en el camino o algo peor. En tu mano está decidir qué va a suceder a continuación. Tu mejor opción es aprender y volver aún más fuerte.
3. Decide cuáles van a ser tus siguientes pasos
Tus próximos pasos después de un rechazo tienen que seguir una estrategia. Tómate unos días para planear qué hacer a continuación. Si estás adquiriendo más experiencia, averigua cómo hacerlo y cuánto tiempo deseas tardar. Si estás creando un enfoque diferente para perseguir la misma oportunidad, tómate un tiempo para examinar lo que han hecho otras personas antes que tú para alcanzarlo.
4. Aprovecha cada rechazo para alimentar tu motivación
Construir un negocio requiere mucho esfuerzo. En más de una ocasión sentirás que no te quedan fuerzas. Necesitarás estar inspirado y motivado para seguir adelante cuando sientas que todo va mal. Existe un cambio de mentalidad que puede proporcionarte el combustible que necesitas para motivarte constantemente. Usa cada rechazo como fuego para encenderte y motivarte.
Cada experiencia en la vida ofrece una lección. Esas lecciones te ayudan a convertirte en la mejor versión de ti mismo. Cambia la forma en la que ves el rechazo. Decídete aún más a lograr esa meta. Utiliza el rechazo como tu motivación para continuar haciendo el trabajo. Al final del día, hacer el trabajo consistentemente es lo que construye tu negocio y logra tus metas - no tus sentimientos y emociones.
Experimentar el rechazo no tiene que ser el final de nuestra historia. Cambia tu historia y podrás cambiar tu vida. Considera el rechazo como una lección y ponte a pensar en lo que vas a hacer a continuación. Esta es tu vida y solo tienes una. Ha que cada experiencia y decisión cuente.