Zack Korman, fundador de Awesome Power, financiero y programador, habla sobre los problemas que resuelve el blockchain y si realmente necesitamos solucionarlos.
En mi opinión, el blockchain no va a revolucionar la economía global ni a alterar fundamentalmente las estructuras corporativas existentes, y no va a provocar el fin de los intermediarios. Esto se debe a que el blockchain es una solución a un problema inexistente.
El bitcoin
El blockchain apareció con el bitcoin. La percepción en ese momento era que los sistemas de pago existentes no permitían que los pagos no reversibles se realizaran online, lo que significaba que los micropagos eran poco prácticos. El bitcoin se concibió como una solución a ese problema. Tampoco tiene que creer en mi palabra; esta es literalmente la introducción al white paper del bitcoin:
“El blockchain fue diseñado para resolver este problema; el objetivo era crear un sistema de pago sin intermediarios financieros en el que las transacciones fueran prácticamente irreversibles. Esto, en teoría, reduciría los costes de transacción y haría posibles los micropagos”.
La lógica no era que la confianza y los intermediarios son intrínsecamente malos o ineficientes. Más bien, tener un intermediario de confianza hace difícil realizar transacciones verdaderamente irreversibles y que las comisiones por transacción sean lo suficientemente bajas como para hacer posibles los micropagos. Creo que esto también es probablemente correcto.
Pero cuando empecé a interesarme por el tema en 2013, todo el mundo había olvidado esta historia, o al menos no le importaba. Como sistema de pago, el bitcoin era supuestamente mejor que, digamos, utilizar una tarjeta de crédito, ya que las comisiones por transacción eran más bajas. Si se les hubiera preguntado, la mayoría de las personas involucradas en el bitcoin habrían dicho que los intermediarios son, en el peor de los casos, completamente innecesarios, en el mejor de los casos, obsoletos e ineficientes. Hasta donde yo sé, nadie se detuvo a preguntarse si los intermediarios cumplían realmente una función útil.
Por muy estúpido que pueda parecer, esta idea ha persistido:
El blockchain no se deshizo de la necesidad de intermediarios. Los intermediarios cumplen funciones útiles, y la idea detrás del bitcoin era simplemente que a veces no queríamos esas funciones y el coste asociado; recuerde, “transacciones no reversibles para servicios no reversibles”. Pero eso había desaparecido hace mucho tiempo.
De repente, el bitcoin se había convertido en una mejor manera de comprar productos online, ya que permitía ahorrar un 2% en los costes de transacción a pesar de que se asumía el riesgo de que el vendedor nunca enviara los productos. ¡Y este era el sistema de pago destinado a eliminar la confianza!
A todo esto hay que añadir que el bitcoin ni siquiera resolvió el problema que se propuso abordar. Las comisiones por transacción son demasiado altas para hacer posibles los micropagos, y la confirmación de transacciones es demasiado lenta. No obstante, fue un buen intento, así que no estoy intentando quitarles nada a Craig Wright y Hal Finney.... Me refiero a Satoshi.
El uso del blockchain en la actualidad
Esto no demuestra que el blockchain no sea la tecnología del futuro, pero sí sugiere que al menos debemos mostrarnos escépticos. Una propuesta de aplicación del blockchain no puede hacer una vaga referencia a la confianza y la eliminación de intermediarios y decir que eso es suficiente. Quiero respuestas: ¿Por qué quiero eliminar al intermediario? ¿Por qué no puedo confiar en un tercero? ¿Realmente la eliminación de intermediarios reducirá los costes y, de ser así, hay algo a lo que estoy renunciando al perder al intermediario?
No es de extrañar que prácticamente todas las aplicaciones blockchain propuestas sobre las que he leído no respondan a ninguna de estas preguntas. Hay una serie de errores que veo por todas partes. Voy a hablar sobre alguno de ellos, ya que quiero poner fin a esta actitud incuestionable con respecto al blockchain. El problema no es solo que la descripción sea inadecuada; realmente parece que las personas involucradas en los proyectos no han pensado en estas cosas.
El primer error común que surge es el argumento “gracias al blockchain esto es ahora posible”. Esto ocurre cuando una persona tiene una idea que él o ella piensa que solo es posible utilizando el blockchain; en casi todos los casos, esto significa que la persona no ha podido pensar a través de medios alternativos de implementar la misma idea. Este tipo de razonamiento no sería aceptado en ninguna otra parte del mundo tecnológico. Sería como si alguien dijera: “Gracias a NoSQL podemos almacenar datos”.
He aquí un ejemplo, aunque sea de un periodista:
O imagine esto: Mi coche, que ya casi parece un ordenador, cierra un acuerdo para alquilar tiempo en un aparcamiento, que es gestionado por otro ordenador. “Firma” este contrato simplemente entrando en la plaza de aparcamiento y ocupándola. A cambio, el coche transfiere una pequeña cantidad de bitcoin, la criptomoneda elegida por los ordenadores, en la cartera del aparcamiento.
Puesto que son los ordenadores los que se hacen cargo de todo el proceso, nunca me olvidaría de pagar el aparcamiento. La única forma en la que podría suceder es si mi coche se queda sin bitcoins, en cuyo caso el aparcamiento tiene un buen recurso: Puesto que el sistema de arranque de mi coche está conectado a un ordenador, la plaza de aparcamiento simplemente no permitiría que arranque el coche.
Los escenarios de este tipo son posibles cuando el blockchain - el registro de transacciones inventado en un principio para validar las transacciones de bitcoin - es utilizado para otros fines aparte de los pagos.
Así que, básicamente, su coche hará automáticamente un pago a algún sistema... una especie de etiqueta de peaje, pero con la posibilidad de influir en el coche si no pago. Tengo una etiqueta de peaje en mi coche desde que conduzco. No creo que las etiquetas de peaje usen blockchain. Tal vez podrían usar un blockchain, y tal vez serían más eficientes, pero quiero saber por qué. Como dije, quiero respuestas. Esto demuestra que no se ha logrado lidiar con formas alternativas de implementar la misma idea y las compensaciones involucradas.
El segundo error común que veo es el de fingir que la naturaleza centralizada de una base de datos tradicional nunca es una característica:
Las bases de datos tradicionales son mantenidas por una organización, y esta organización tiene control total sobre la base de datos, incluido el cambio de información, la prohibición de cambios o la adición de datos de manera fraudulenta. En la mayoría de los casos, esto no es un problema, ya que las empresas generalmente mantienen sus propias bases de datos y no están interesadas en falsificar sus contenidos; sin embargo, hay casos, por ejemplo, una red financiera, en los que los datos almacenados son demasiado importantes y la tentación de manipularlos es demasiado alta como para permitir que una organización los controle completamente. Incluso si confiamos en su sinceridad y sabemos que nunca modificará los datos en su propio interés (que ya es suponer), todavía existe la posibilidad de que los hackers pirateen y roben la información.
Por supuesto, el caso de querer pagos reversibles es un ejemplo en el que una autoridad central de control es algo positivo. Hay muchos más ejemplos, también. Me sorprende que la gente no lo entienda intuitivamente; como cofundador, la gente que utiiza mi página odia que diga: “No puedo arreglar eso”. La gente solo quiere que haga lo que hay que hacer.
Espere hasta que esta gente oiga hablar del blockchain, donde realmente no hay nadie que pueda arreglar las cosas que podrían salir mal. El mejor (y más divertido) ejemplo de esto es el DAO. (El DAO, para los que no lo sepan, era ese vehículo de inversión de ethereum donde todos insistían en que “el código es la ley” hasta que alguien descubrió cómo usar el código para desviar millones de ETH, momento en el cual las partes agraviadas quisieron encontrar a la persona y llevarla ante los tribunales).
El último error común es el supuesto de que “todos los problemas son tecnológicos”. El mejor ejemplo de ello es la propuesta de utilizar el blockchain en la industria de la energía:
La tecnología blockchain reduce los costes de transacción al almacenar una sola copia lógica de los registros de transacción. Como resultado, no hay necesidad de conciliación y cálculos. Debido a sus cualidades únicas, el blockchain puede desempeñar un papel importante en el sector energético y, potencialmente, cambiarlo radicalmente.
La tecnología reducirá las facturas de servicios públicos o la necesidad de capital en el mercado mayorista del gas y la electricidad. Al mismo tiempo, el blockchain permitirá que millones de dispositivos de energía (calefacción, sistemas de ventilación, aire acondicionado, calderas, coches eléctricos, baterías, baterías solares) se paguen entre sí directamente, brindando apoyo a los operadores de redes eléctricas y permitiéndoles integrar fuentes de energía renovable con unos costes mínimos.
Esta podría ser una idea perfectamente buena y razonable. Me gustaría oír más. Creo que es un error del tipo “esto es posible ahora gracias al blockchain”; esta tecnología ciertamente no es necesaria para que los dispositivos se comuniquen entre sí. Pero lo más importante es el hecho de que esto supone que el mercado de la electricidad solo se ve frenado por una falta de tecnología suficientemente avanzada. En otras palabras, si podemos concebir un sistema mejor, se aplicará y todo el mundo estará mejor.
El blockchain podría ser genial para el sector energético, pero la supuesta inminente revolución económica estará llena de consultas y procedimientos de elaboración de normas. Los seres humanos están a cargo, y ese seguirá siendo el caso. Es mejor que planifique en consecuencia.
Un problema que nadie tiene
El blockchain intenta resolver un problema que usted no sabía que tenía: el problema del intermediario de confianza. Como programador, nunca me he preguntado: “Necesito diseñar un sistema que funcione como una base de datos pero que garantice que nadie pueda controlarlo, ni siquiera yo”. Tampoco he visto a nadie haciendo esa pregunta. Y como consumidor individual, nunca he pensado: “Lo que no me gusta de este producto/servicio es que tiene un intermediario de confianza”. Estas cosas no salen a relucir.
Satoshi tenía una razón para necesitar estas características, pero la aplicación en cuestión era extremadamente inusual. Satoshi también fue lo suficientemente amable como para explicar expresamente por qué estas características eran necesarias. Aquellos que han tomado la causa del blockchain aparentemente no sienten esa necesidad. Eliminar intermediarios es ahora el objetivo en sí mismo, y se supone que debemos estar contentos por ello.
Así que no cuenten conmigo. El blockchain resuelve un problema que nadie tiene en realidad, y la gente que defiende el blockchain como una revolución no parece entender eso. El bombo está destinado a continuar, pero espero que nos demos cuenta de la utilidad limitada del blockchain lo antes posible.
La opinión del autor puede no coincidir con la posición de los editores.