BlackRock y compañía siguen llenándose los bolsillos o, mejor dicho, los ETFs con bitcoins, manteniendo así el precio del activo por encima de los 65.000 dólares.
Parece que la llegada del dinero institucional al mercado es una bendición largamente esperada.
Sin embargo, esto es solo a primera vista. Con la subida de la criptomoneda a un nuevo máximo histórico, la comunidad prospectiva podría pagar con centralización, es decir, concentración en pocas manos.
El hecho de que se acerque el halving del BTC echa más leña al fuego de la oferta de la moneda. En abril de este año, la recompensa para los mineros por encontrar un bloque se reducirá de 6,25 BTC a 3,125 BTC.
¿Qué consecuencias puede tener?
Es poco probable que los grandes actores se arriesguen a realizar acciones maliciosas para destruir la red. Sin embargo, existe el riesgo de que, en lugar de un activo puro, solo se pueda adquirir una cuasi activo.
Así, si quisiera comprar un mayor número de monedas, habría que recurrir a ETFs de BTC al contado. Y esto, por supuesto, implica la pérdida total del anonimato y, de hecho, la falta de propiedad.
Para los especuladores, esto puede no importar mucho, pero el concepto de un "quasibitcoin" probablemente no encaja muy bien con la idea que Satoshi Nakamoto tenía en mente.
¿Cuánto durará el crecimiento?
Cualquier predicción, aunque sea para un par de meses, será tan exacta como señalar con el dedo al cielo. Mucho depende de la aversión al riesgo de los inversores en el mercado en general.
Como vimos el martes por la noche, si cunde el pánico en el mercado de renta variable tradicional, los criptoactivos también sufren. La correlación entre activos ha aumentado.
En este sentido, confiar ciegamente en las predicciones, incluso de personalidades conocidas como Robert Kiyosaki, de que el activo puede alcanzar los 300.000 dólares en 2024, probablemente no sea la mejor idea.
Otro factor importante es que, con el creciente interés por las criptomonedas y diversas herramientas como el restaking, es posible que los reguladores intensifiquen su escrutinio del sector.
En resumen, parece que lo más interesante no ha hecho más que empezar.
¿Qué podemos esperar ahora?
Si la moneda no se mantiene por encima de los 60.000 dólares, podría sufrir una profunda corrección antes del halving. Al mismo tiempo, como es habitual, las altcoins también se verán afectadas.