Si estás planeando hacer un viaje en Halloween, podrías plantearte visitar alguno de estos increíbles lugares. Muchos personajes famosos tienen sus tumbas aquí.
En el mundo moderno, tendemos a pensar en la muerte y la belleza como cosas incompatibles. Sin embargo, un vistazo a algunos de los cementerios más bellos de todo el mundo debería convencer rápidamente a cualquier viajero de lo contrario. Estos 12 lugares no son simples parcelas de tierra, sino santuarios escénicos vigilados por grandes árboles o con vistas al vasto océano.
El extenso Père-Lachaise en París, por ejemplo, contiene decenas de miles de tumbas, incluidas las de figuras literarias muy famosas. Es un lugar de enterramiento, sí, pero también es un importante monumento histórico y un oasis urbano. En el norte de Rumanía, el encantador Cementerio Alegre sólo contiene varios cientos de tumbas, pero todas están pintadas con colores vivos – es un espectáculo visual que ayuda a preservar la memoria de los vecinos que vivieron en una relativa oscuridad.
Todos estos cementerios honran a los difuntos, ofreciéndoles hermosos lugares para su descanso. Pero, al servir como parques públicos, sitios sagrados, e incluso destinos turísticos, también nos ayudan a sentirnos un poco más cerca de los que están enterrados allí.
Cementerio de la Catedral de St. Andrews, St. Andrews, Escocia
Erigida en los siglos XI y XII, la catedral de St. Andrews fue la más grande de Escocia durante varios siglos. Pero la guerra, los incendios y las tormentas la redujeron a una ruina de piedra en un acantilado tempestuoso con vistas al Mar del Norte, rodeada por un austero cementerio. Aquí, los aficionados al golf pueden ver la tumba del profesional del siglo XIX Young Tom Morris, los amantes de la cultura pueden admirar las esculturas medievales en el museo, y cazadores de fantasmas pueden buscar alguno de los muchos espíritus que, según dicen, acechan este lugar.
Cementerio Alegre (Cimitirul Vesel), Săpânţa, Rumanía
En una población de 5.000 habitantes en el norte de Rumanía se encuentra uno de los sitios turísticos más populares del país – y no debido a quienes están enterrados allí. Cada una de las cientos de tumbas en el Cementerio Alegre está adornada con una cruz de roble tallada, pintada de azul celeste y adornada con escenas que representan la vida de los difuntos, junto con un verso especial. El carpintero que talla las cruces y compone los poemas no se contiene: hay referencias a la bebida y al engaño e incluso algunos chistes de suegras.
Cementerio de Père-Lachaise, París, Francia
Considerado el cementerio más visitado del mundo, este camposanto de 44 hectáreas está lleno de caminos adoquinados, alamedas arboladas, y elegantes mausoleos. La concentración de residentes notables – incluidos Moliere, Marcel Proust, Oscar Wilde, Gertrude Stein, y Jim Morrison – entre los 70.000 parcelas no es casualidad. Abierto en 1804, el cementerio se utilizó por primera vez para los nuevos enterramientos procedentes de otras partes de la ciudad. Como una forma macabra (e involuntaria) de promocionar a las celebridades, los funcionarios trasladaban los cuerpos de alto perfil para aumentar la popularidad. Un concejal de la ciudad de Florida ha propuesto recientemente mover la tumba de Morrison a su lugar de nacimiento al otro lado del Atlántico. El plan recibió abucheos por parte de los aficionados, el cementerio y sus herederos.
Okunoin, Prefectura de Wakayama, Japón
El cementerio más grande de Japón, que data de 816 D.C., mantiene un ambiente sereno, peculiar, y profundamente espiritual a la vez. Okunoin, cubierto de cedros y considerado Patrimonio de la humanidad por la UNESCO, es el hogar de los monumentos de más de 200.000 monjes budistas, incluyendo el maestro budista Kūkai. La puerta de entrada a su lugar de descanso está adornada con 10.000 linternas; monjes le sirven dos comidas rituales diarias. En el cementerio también hay algunos monumentos singulares, como una enorme taza de café en honor a los trabajadores de una empresa de café y un monumento a las termitas construido por empresas de pesticidas.
Cementerio de Waverley, Sídney, Australia
Encontrarás algunos famosos australianos enterrados aquí, entre ellos el escritor Henry Lawson, el jugador de cricket Victor Trumper, y el rebelde irlandés Michael Dwyer. Pero la verdadera razón para visitar este lugar son las vistas. Inaugurado en 1877, Waverley ocupa aproximadamente 16 hectáreas sobre los acantilados con vistas al Pacífico Sur. Ángeles, cruces, y obeliscos pueden observarse en la ladera, disfrutando de lo que sin duda es una de las mejores vistas del mundo.
La Recoleta, Buenos Aires, Argentina
Lo que una vez fue el huerto de una iglesia anexa, La Recoleta ahora parece una ciudad en sí misma, pálida como un hueso y enclavado en el centro de Buenos Aires. Eva Perón es la persona más famosa enterrada aquí, a unos cuatro metros y medio bajo tierra, para asegurarse de que sus restos no sean molestados. El cementerio data de 1822 y está llena de esculturas de ángeles, así como art deco, art nouveau, barroco, y postes y mausoleos neogóticos. Pero la tumba más memorable posiblemente sea la monumental de Rufina Cambaceres, que murió en 1902 a la edad de 19. Cuenta la leyenda que unos días después de su entierro, se oyeron gritos procedentes de su tumba. La abrieron para revelar arañazos en el ataúd y en su cara, resultado de su intento fallido de escapar.
Bonaventure, Savannah, Georgia, EE. UU.
Con sus ángeles cubiertos musgo y robles nudosos, Bonaventure es un ejemplo perfecto de cementerio gótico meridional. El compositor Johnny Mercer está enterrado aquí, ya que fue el primer gobernador de Georgia. Pero más gente conozca el cementerio, que fue fundado en 1846, por aparecer en la portada del libro de John Berendt, “Medianoche en el jardín del bien y del mal”.
El cementerio ha estado cerrado tras el huracán Matthew, pero volverá a abrir la próxima semana, una vez que los equipos de limpieza locales se deshagan de algunos de los cedros caídos. Una cosa que no encontrarás: la escultura “Bird Girl” que aparece en la portada de Berendt, que fue trasladada a un museo local – el Centro Jepson local para las Artes – mucho antes de la tormenta. Pero si deseas ser un residente permanente, sigue siendo un cementerio activo.
El cementerio ha estado cerrado tras el huracán Matthew, pero volverá a abrir la próxima semana, una vez que los equipos de limpieza locales se deshagan de algunos de los cedros caídos. Una cosa que no encontrarás: la escultura “Bird Girl” que aparece en la portada de Berendt, que fue trasladada a un museo local – el Centro Jepson local para las Artes – mucho antes de la tormenta. Pero si deseas ser un residente permanente, sigue siendo un cementerio activo.
Monte de los Olivos, Jerusalén, Israel
La tradición cuenta que cuando llegue el día de la resurrección, comenzará en el más sagrado de cementerios judíos, que ha estado en uso durante más de 3.000 años. Repleto de tumbas de color arena, el Monte de los Olivos se levanta sobre Jerusalén al oeste y el desierto al este. Es el lugar donde descansan rabinos, profetas cristianos, y el primer ministro israelí Menachem Begin – y recientemente se ha quedado sin espacio.
Cementerio Nacional de Arlington, Virginia, EE. UU.
Pocos lugares son tan elegantes y emotivos como Arlington, el cementerio de más de 400.000 veteranos estadounidenses, militares en servicio activo y sus familias. La tierra fue una vez propiedad del nieto de Martha Washington. En 1863, parte de su finca se convirtió en un pueblo que ayudó a los antiguos esclavos a hacer la transición hacia la libertad; luego se convirtió en un cementerio de la Guerra Civil. Entre las extensiones inmaculadas de césped y árboles centenarios están la Tumba del Soldado Desconocido, vigilada permanentemente; la tumba de John F. Kennedy, iluminada con una llama eterna; y los lugares de descanso de Pierre L'Enfant, Thurgood Marshall, y Medgar Evers.
Cementerio de Highgate, Londres, Reino Unido
Los diseñadores del siglo XIX de Highgate lo infundieron con el espíritu del lugar. Obeliscos se elevan sobre su Avenida Egipcia llena de criptas, que conduce al Círculo de Líbano, un conjunto de tumbas construidas alrededor de un antiguo árbol de cedro. En la época victoriana, era el lugar de enterramientos más codiciado de la ciudad, pero el cementerio terminó prácticamente abandonado durante muchos años. Cubierto de hiedra, el lugar todavía tiene un aspecto dormido. Entre sus más de 170.000 habitantes están el pintor Lucien Freud, el novelista George Eliot, y Karl Marx, cuya tumba está marcada con un enorme busto. Menos reconocible pero quizás aún más interesante es la tumba de Alexander Litvinenko, el espía ruso envenenado: fue enterrado en un ataúd forrado de plomo debido a los niveles de radiactividad en su cuerpo.
Centro Cultural Assistens, Copenhague, Dinamarca
Tan bonito que los vecinos lo utilizan como parque, donde hacen picnics y recrearse en el recinto, Assistens fue fundada en 1760 y se ha convertido en el hogar final de muchos daneses famosos. En este país igualitario, no verás grandes y elaborados monumentos. Hans Christian Andersen tiene una lápida alta y sencilla. El epitafio del filósofo Søren Kierkegaard lo muestra descansando sobre rosas y conversando con Jesús. Y todo está a dos pasos de una de las zonas gastronómicas más interesantes de la ciudad, Nørrebro.
Green-Wood, Brooklyn, Nueva York, EE. UU.
Boss Tweed y Jean-Michel Basquiat, Leonard Bernstein y los generales de la Guerra Civil – todos ellos encontraron su lugar final de descanso en las colinas de Brooklyn. Situado frente a Central Park y Prospect Park, el cementerio de Green-Wood siempre ha sido utilizado como un espacio de recreo. De hecho, en la década de 1960, fue el segundo destino turístico más popular del país, después las Cataratas del Niágara. La extensión de casi 200 hectáreas se mantiene verde y serena, con estanques, lagos y vistas del horizonte de Manhattan.