Información sobre el hackeo de Ashley Madison que está haciendo que los abogados matrimonialistas se froten las manos.
Los usuarios de Ashley Madison probablemente se han estado mordiendo las uñas todo el día hasta comprobar si sus datos personales (incluyendo sus preferencias sexuales, sus devaneos extramatrimoniales y número de tarjeta de crédito) saldrán a la luz como parte del pirateo de la página web de citas que contribuye a que los casados a engañen a sus cónyuges.
¿Sabes quién está teniendo un buen día? Los abogados matrimonialistas.
«Vi la historia anoche y mi compañero llegó esta mañana y dijo: olvídate de que los matrimonios del mismo sexo dupliquen nuestro trabajo. Esto va a ser una bomba», afirmó Nancy Chemtob, socia del bufete familiar y matrimonial Chemtob Moss & Forman, refiriéndose al hackeo de Ashley Madison.
Si la información acaba haciéndose pública en la red, podría desencadenar una inundación de divorcios porque los cónyuges tendrán que enfrentarse no solo a la humillación personal por lo sucedido, sino además con la humillación de enfrentarse con un abogado familiar de Niman Gelgoot and Associates LLP en Toronto, afirmó Harold Niman.
«Una vez que se haga pública, supongo que los abogados empezarán a subir sus honorarios», dijo.
Según Raoul Felder, un abogado matrimonialista neoyorquino que ha trabajado en muchos casos con páginas web similares a lo largo de los años, que te pillen es algo que no se le pasa a la gente por la cabeza.
«Aquellos que se suscriben a estas cosas lo consideran un universo alternativo. Su matrimonio es una cosa y lo que hacen en Internet es otra».
Los abogados matrimonialistas han tratado este tipo de casos antes de que este pirateo sucediese. Niman afirmó que piensa que cada abogado matrimonialista tiene clientes que pillaron a sus cónyuges engañándolos en Ashley Madison o una página similar.
Este tema ha sido continuo en Chemtob, que afirma tratar con al menos dos clientes al mes que llegan a la empresa en Nueva York como consecuencia de la página web. Esta página usa el eslogan «La vida es corta. Tenga una aventura».
Chemtob dijo que alrededor de dos tercios de estos clientes de Ashely Madison son hombres o mujeres que llegaron a la conclusión de que necesitaban buscar algo en la web y en primera instancia tenían problemas matrimoniales. El tercio restante eran cónyuges que pillaron a sus parejas visitando la página web.
Ella afirma, «algunos cónyuges se sienten tan desmoralizados por sus parejas que acaban haciendo un post solo para ver si obtienen respuesta. Muchos de mis clientes se enamoran de los que conocen (en la web) o de la idea de que alguien les diga lo altos y apuestos que son aunque realmente estén gordos y sean bajos. Se conoce a alguien que se convierte en una fantasía».
En ocasiones, la fantasía da la vuelta. Chemtob dice que está trabajando con tres casos de romances en Ashley Madison en los que una mujer se queda embarazada y empieza a buscar apoyo económico para el bebé.
Un resquicio de esperanza para los clientes es que aunque se descubra el engaño, no van a estar peor porque su matrimonio acabe ya que muchos estados posibilitan algún tipo de divorcio sin culpa. Esto significa que no se puede usar la infidelidad en contra del cónyuge cuando se vaya a determinar la división de dinero en los tribunales.
No obstante, los abogados afirman que sí se puede utilizar el daño psicológico del cónyuge engañado para obtener más en el acuerdo si el infiel se siente culpable.