Virgin Galactic, empresa de Richard Branson que quiere transportar turistas al espacio, está reforzando su cohete para que así pueda transportar mayores cargas hacia el espacio y ayudar a la compañía a competir por otra línea de trabajo: el lanzamiento de satélites de pequeño tamaño.
Las mejoras en su cohete LauncherOne le permitirán a la empresa transportar cargas mucho mayores hasta la órbita baja de la Tierra, incluyendo hasta 400 kilogramos, según anunció Virgin el lunes. El anuncio se produce después de que OneWeb, que planea construir un sistema de internet por satélite mundial, dijo que tiene la intención de contratar a Virgin para 39 lanzamientos para enviar una constelación de pequeños satélites al espacio.
El aumento de la capacidad de carga útil también permitiría a Virgin volar satélites del gobierno, según dijo el director ejecutivo de Virgin George Whitesides en una entrevista telefónica desde París, donde la empresa hizo el anuncio.
Aunque Virgin es conocida principalmente por sus ambiciones de turismo espacial, su intención de aumentar la carga útil del cohete muestra también su interés en el lucrativo negocio del lanzamiento de satélites. SpaceX, la compañía espacial de Elon Musk, también anunció el lunes que ha firmado recientemente dos contratos de lanzamientos comerciales, llegando así a un total de 60 lanzamientos.
Virgin dijo que también está cerca de la adquisición de un avión comercial que le ayudará a lanzar sus cohetes. A diferencia de los cohetes que se lanzan desde una posición de pie desde plataformas de lanzamiento tras la típica cuenta atrás 3-2-1, los cohetes de Virgin son escoltados hacia el cielo por aviones de grandes dimensiones. Los cohetes, que están atados a la panza del avión, se dejan caer desde el avión y luego encienden sus motores, lanzándose hacia la órbita.
Ese tipo de sistema libera a la empresa de las «plataformas de lanzamiento a menudo abarrotadas y las correspondientes restricciones de lanzamiento en tiempo real, tales como el clima», afirmó.
Whitesides dijo que la demanda de lanzamientos «ha llegado a ser tan importante que LauncherOne tendrá su propio avión para ello. Los pequeños satélites son un gran negocio».
La compañía todavía tiene que lanzar un satélite al espacio, pero dice que tiene varios clientes en espera. Los vuelos de prueba de LauncherOne están programados para que empiecen en 2017.
Whitesides dijo que la empresa se encuentra cada vez más cerca de regresar al proyecto SpaceShip Two, el transporte que se espera que algún día pueda llevar a turistas al espacio. La nave espacial se estrelló durante un vuelo de prueba en el desierto de Mojave el año pasado, donde falleció el copiloto.
Whitesides dijo que la compañía está «realizando grandes progresos en la construcción de la siguiente nave espacial», y que se está dando a los «ingenieros el tiempo necesario para su construcción».
«Estamos obviamente trabajando duro para asegurarnos de que la nueva nave tengas todas las mejoras que necesitamos, algo evidente tras el accidente».