Los 10 ganadores del sector de la tecnología

Recordamos quiénes son los ganadores del marcado en 2015.

Dirigir un negocio es duro. Pero para algunos, la posibilidad de poder dejar su impronta en el mundo – o, según la frase lapidaria de Steve Jobs, «haz mella en el universo» — es algo atractivo. Algunos incluso lo consiguen.

En 2015, algunas empresas tecnológicas hicieron algo más que mella. Demostraron que la tecnología actualmente define los términos del mundo de los negocios. Seguro que también ganaron miles de millones. Pero lo más importante, forzaron al resto del mundo a vérselas con su forma de reconstruir el paisaje.

Amazon es una compañía de 21 años de edad, ¿a que es una locura? Sin embargo, a pesar de tener la mayoría de edad para beber, Amazon ha continuado con el mantra de las startups de «crecer antes de obtener beneficios». Hasta 2015 ha sido así. Este año Amazon alcanzó el momento esencial en su historia. Comenzó a obtener beneficios- de manera consistente.

Pero la razón más grande de ese crecimiento no fue la compra minorista (aunque esa parte del negocio fue un factor sólido también). Fue la nube de Amazon.

Por primera vez, en abril, Amazon superó los beneficios obtenidos con los servicios de su web Amazon, revelando una cifra de negocios de 4.600 millones de dólares – con márgenes realmente buenos. Amazon lideró la idea de proporcionar acceso instantáneo a servicios informáticos en Internet cuando introdujo AWS hace cerca de una década. Ahora, muchas empresas y desarrolladores alquilan acceso en vez de instalar sus propios equipos. Esto corroe lentamente a los negocios de un manojo de arraigados gigantes tecnológicos – los llamados «walking dead» de la tecnología. Y mientras la nube de Amazon se enfrenta ahora a los retos de los servicios similares ofrecidos por Microsoft y Google, Jeff Bezos y compañía han establecido un enorme liderazgo en el mercado que podría valer 191.000 millones de dólares en 2020.

Este año, Netflix se convirtió en mucho más que una alternativa cord-cutting a la televisión por cable. La compañía dio un primer paso para introducirse en el reino de los contenidos originales para desafiar a la tarifa Premium de HBO cuando adquirió la destacada House of Cards en 2011. Pero en 2015 realmente fue a por todas en cuanto a programación original. Hoy en día, su cartera de contenidos incluye documentales, especiales de comedias, programas de variedades, películas originales (de las que vaticinan Oscar), y series dramáticas. Su programación ahora deja pequeña a la oferta tanto de Amazon como de Hulu.

En resumen, Netflix es un fuera de serie. Pero lo que quizás sea más interesante sobre el hecho de que Netflix es un ganador, es que no es precisamente por ser una compañía tecnológica – aunque se apoya en datos de usuario para diseñar los hits de la audiencia. Se sitúa en cabeza en televisión a niveles hollywoodienses. Netflix dominó los Golden Globes, los SAG Awards y los Emmys en los premios de esta temporada. Junto con los críticos, sus accionistas están también muy contentos.

Instagram, la pequeña red social favorita de todos, ya no es tan pequeña.

La compañía propiedad de Facebook, con cinco años ya, todavía experimenta un crecimiento lujoso y firme. En 2015 superó a Twitter en el número de usuarios activos mensuales: 400 millones, contra los 320 millones de Twitter. Twitter tuvo en general un año bastante movido, luchando por atraer el mainstream y conseguir una mejor base en el mercado de valores.

Instagram, por el contrario, atrae a casi todo el mundo. Esto es otra cosa que debe temer Twitter: la red social basada en la imagen está funcionando increíblemente bien en las noticias. Su expresión directa a través de las fotos es a menudo mucho más sencilla de entender que la transmisión de texto rápida como el rayo de Twitter. Por lo menos una gran institución lo ha reconocido: en julio Instagram consiguió un enorme triunfo cuando la NASA decidió publicar su primera imagen de la superficie de Plutón en la red social.

Uber es actualmente un gigante mundial con miles de millones de financiación en sus arcas. Su actual valoración publicada es de 62.500 millones de dólares. Esta cifra que nos saca los ojos de las órbitas, hizo que Uber pasara viento en popa a Xiaomi, la startup más valiosa en el año pasado, convirtiéndose en la empresa privada más valorada en el mundo en 2015.

No es que llegar a este estatus haya sido un camino de rosas. En California, una demanda colectiva que en principio implicaba a cientos de miles de conductores, se está abriendo camino a través del sistema judicial federal, desafiando al gigante de los transportes a convertir a sus conductores en empleados oficiales de Uber. Perder este litigio podría producir un impacto inmenso en la llamada economía de demanda, que depende del trabajo de contratistas autónomos. En julio del año próximo se celebra un juicio ante jurado.

Sin embargo, no se puede negar que el crecimiento de Uber ha sido astronómico. Se forjó un camino a la fuerza en los mercados de EE. UU. y del extranjero y dirigió exitosas campañas contra los legisladores. La señal más segura de su dominio: sus mayores rivales han formado una alianza mundial conjunta anti Uber.

Vamos a dejarnos de tonterías. Todos sabemos que Star Wars dominó en 2015. Así que por supuesto, Disney, que posee Star Wars, controló la sociedad. ¿Cómo íbamos a obviar esa sinergia? (En realidad no lo hicimos).

Pero este año, el puntal de la vieja empresa mediática fue también ganador en otros aspectos más sutiles. La empresa, con sus muchas divisiones y filiales, dictaba a menudo las condiciones de cada faceta de comunicación y entretenimiento, incluso en el mundo de las startups donde jugadoras como Netflix y Buzzfeed parecen dominar. ESPN, por ejemplo, es la última reacia en la mayoría de los hogares a cortar el cable por completo. Y desde Marvel hasta Pixar y ABC, las joyas culturales de Disney, no conocen (casi) límites.

Sin embargo, Disney comienza a mostrar signos de que está lista para abrazar el futuro. Está entrado en las apps e incluso ha firmado un acuerdo con su amienemigo Netflix, donde sus películas se retransmitirán el próximo año. Después de todo, mientras los medios tradicionales todavía sustentan mucho poder, los consumidores quieren que se sirva un buen contenido como quieren verlo – y Disney lo comprende.

Facebook quiere ser todo tu mundo. Esta misión estaba clara, especialmente en 2015. Este fue el año en que la empresa lanzó productos como Instant Articles (noticias), escaparates digitales (compras), Facebook M (asistencia personal inteligente artificial) y un Messenger ampliado como plataforma de servicios. ¿La amenaza común que invade todos estos esfuerzos? Nunca debes dejar que Facebook haga algo que querías hacer tú.

Pero quizás su triunfo más sorprendente haya sido en vídeo. En 2015, Facebook de repente invadió el territorio de YouTube como lugar para visualizar vídeo clips de BuzzFeed y vídeos de Star Wars, ofreciendo lo que la compañía dice que son miles de millones de visualizaciones de vídeos al día. Ese éxito vino con algunas controversias y se colgaron montones de vídeos en Facebook de tal manera que los creadores de sus contenidos no podían ganar dinero con ellos, algo que Facebook al final abordó. Facebook, después de todo, no puede salirse siempre con la suya, especialmente cuando se trata de poseer el mundo.

Está claro, Apple lo está haciendo realmente bien, pero las razones detrás de su grandeza han ido cambiando año tras año. Una vez fue porque Apple dominaba la música. Ahora Apple está a la cabeza por sus iPhones. Y eso es en gran medida gracias a las tendencias en China.

Teniendo esto en cuenta: el mercado de los smartphones se está saturando. En 2015, por primera vez, el crecimiento en el mercado mundial de los smartphones se hundió a un solo dígito. En China, los compradores noveles casi han desaparecido también – lo que significa que el potencial de crecimiento está ahora en su mayoría en los teléfonos premium, una categoría que Apple domina. En China, Apple tuvo un beneficio del 99% en el último trimestre. Y cuenta con una cuota de mercado enorme en todo el mundo (aunque le desbancan del nº 1 de vez en cuando). Pero aunque la compañía no venda todos los teléfonos, gana todo el dinero.

YouTube es todavía con diferencia, el claro líder en vídeos de Internet – desde los negocios de vídeos virales hasta las agencias de talentos en las redes sociales. Pero ese no es exactamente el motivo por el que creemos que es el ganador este año.

No, tenemos que elogiar a YouTube por salir de su zona de confort en 2015, desde lanzar un servicio de subscripción en YouTube Red (que realmente podría acabar en un mejor YouTube para todos), hasta reducir la barra de acceso a la realidad virtual (con una genial asociación con el equipo barato Cardboard VR de Google). Lo que es incluso más fascinante este año, YouTube se lanzó al ruedo de la música en streaming. Se puede decir que tiene más contenido musical que todos los demás reproductores, aunque sea un campo increíblemente concurrido. Pensemos en ello: cuando Taylor Swift se lanzó una vez a retirar todo su material de plataformas como Spotify, nunca hizo lo mismo en YouTube porque todavía es una forma de llegar a 1.000 millones adicionales de usuarios- y fans- de golpe.

Hay muchas aplicaciones de mensajería, incluido Facebook Messenger, Tango, Kik, y Snapchat, por no mencionar el antiguo sistema de SMS. Pero de todas estas opciones de mensajería, ninguna gana en su sistema de mensajes como lo hace WhatsApp- sobre todo en el extranjero. Aunque los medios estadounidenses suelen tener poco que decir acerca de WhatsApp, el servicio propiedad de Facebook en el que se gastó 19.000 millones de dólares para su compra el año pasado es usado por más de 900 millones de personas en todo el mundo, en lugares como Oriente Medio y África – y todo eso con solo 50 ingenieros en el equipo.

Es difícil decir la importancia que tiene. Para mucha gente en todo el mundo, WhatsApp trae Internet a lugares donde no lo hay. Actúa como una especie de puerta a la conectividad. Y así es como Facebook dominará al mundo, infiltrándose en lugares que no tendrían acceso de otra forma.

Justo antes de que Atlassian se hiciera pública, iban a por ella en un referéndum de otros «unicornios»- compañías tecnológicas privadas con valoraciones por encima de los mil millones de dólares que algunos consideraban dudosas. Si el mercado público validó los miles de millones que supuestamente valía cuando todavía era privada, la idea era que quizás estos unicornios realmente merecían sus marcas.

Afortunadamente, la OPV de Atlassian fue bien. Y sí, fue pionera en su clase- pero no entre los unicornios. La empresa australiana había sido rentable durante más de una década y sobre todo impulsada, lo que significa que no tenía el fondo de capital de riesgo del que presumen muchas otras startups como Airbnb, Dropbox, y Snapchat. En cualquier caso, el triunfo de Atlassian sobre las expectativas de Wall Street fue una luz en el camino para las OPV de las tecnológicas, que debería calmar al menos a ciertos inversores nerviosos en la industria.