6 cosas que se adelantaron a su tiempo y fracasaron

El columnista de Medium Matt Croydon nos explica que todo lo nuevo es un viejo olvidado.

A veces me encuentro con artilugios que intento comparar con cosas del pasado reciente que tuvieron mucho menos éxito pero que eran sorprendentemente parecidas. Estos son seis dispositivos de este tipo, cuyos modernos "descendientes" gobiernan el mundo de la tecnología.

Hoy es difícil imaginar una vida sin música en streaming. Todos los días decimos cosas del tipo: "Alexa, quiero escuchar música clásica", "Ok Google, reproduce They Might Be Giants" o "Oye, Siri, reproduce mi última lista de canciones" - y la música empieza a sonar en nuestros teléfonos, tablets, televisores y coches.

Pero cuando miro a todos ellos, no puedo evitar acorarme del Kerbango Internet Radio, un producto que apareció justo cuando Diamond Rio 32 era considerado el mejor reproductor de MP3 de bolsillo del mundo. La empresa concibió su producto, lo desarrolló, lo vendió a 3Com y lo canceló mucho antes de la llegada de iTunes, Rip. Mix. Burn. o el iPod.

El dispositivo contaba con unos pocos botones y una pantalla - una interfaz casi idéntica a la que nos encontramos en cualquier dispositivo para escuchar música, sin contar los que son gestionados exclusivamente por voz. Sin embargo, a diferencia de cualquier reproductor de MP3, no tenía un catálogo de pistas individuales. De hecho, el dispositivo era un pequeño ordenador que ejecutaba Linux (en ese momento ya era un sistema operativo importante), por lo que podía reproducir estaciones de radio a través de Internet en formato MP3 y RealAudio - por supuesto, la tasa de bits de estas transmisiones ahora nos parecería ridícula.

Lo más probable es que el dispositivo fracasara debido a las altas exigencias: para utilizar Kerbango era necesaria una conexión de banda ancha a Internet a través de un cable ethernet.

En ese momento, la banda ancha ya estaba muy extendida, pero la mayoría de los usuarios todavía estaban satisfechos con la tecnología de acceso telefónico. E incluso aquellos que podían permitirse una conexión de banda ancha rara vez usaban hubs y enrutadores, por lo que solo conectaban un ordenador a la red. Para que Kerbango fuera útil, era necesario contar con un cable separado para el dispositivo. Si querías escuchar la radio cerca de tu ordenador, lo único que tenías que hacer era abrir Winamp o el RealAudio Player.

Probablemente no sea una buena idea lanzar un nuevo producto inmediatamente después del colapso de la burbuja de las puntocom. Especialmente si se trata de un dispositivo de Internet de cocina que vale 500 $. El Audrey de 3Com iba a ser el primer gadget de la serie Ergo - unos dispositivos conectados para cada habitación de la casa. Por desgracia, fue el último.

Recuerdo cómo la empresa anunció el lanzamiento de Audrey. El dispositivo funcionaba con una versión especial de Unix llamada QNX que era las delicias de todos los fans de Linux. Tenía un diseño atractivo y realmente podía caber en el interior de la cocina.

Recuerdo bien el último día de Audrey. Fui a Circuit City (una gran tienda que vende ordenadores, electrónica, música y películas) para ver si vendían alguno barato. Tuve la mala suerte de que cuando llegué solo quedaba el modelo de exposición, y no estaba a la venta.

Ahora puedes ir a cualquier tienda de electrodomésticos y comprarte un frigorífico Samsung con pantallas táctiles gigantes en el panel frontal. Todavía es demasiado pronto para afirmar que esta idea fuera un éxito, pero lo que está claro es que se está volviendo a utilizar.

Muchas empresas estadounidenses intentaron hacer negocios con la entrega de productos durante el "boom de las puntocom". Algunas, como Peapod, realmente lograron cierto éxito. Sin embargo, la mayoría - Webvan, Streamline.com, Kozmo.com y muchos otros - fracasaron.

Webvan se gastó un montón de dinero en logística e infraestructura antes de darse cuenta de que el mercado no era tan grande como esperaba. La compañía fue una de las primeras cuyo colapso marcó el comienzo del fin de la burbuja de las puntocom.

Kosmo.com eligió un campo de actividad un poco más interesante, algo entre Amazon Prime Now y Favor. Con su ayuda, se podía solicitar la entrega de música, películas y otros productos de las tiendas normales. Por desgracia, esta empresa también fracasó.

¿Qué vemos hoy? La mayoría de las principales cadenas minoristas ofrecen sus propios servicios de entrega o colaboran con una de las muchas empresas nuevas en este mercado. ¡Qué decir sobre los servicios omnipresentes como Amazon Fresh y Google Express!

Otra idea parecida: "Me gustaría comer algo en este momento, pero no quiero salir de casa". En Estados Unidos, este nicho lo cubren actualmente empresas como Favor, Uber Eats, Amazon Restaurants y otras compañías.

Durante un tiempo, los conductores de Uber Eats eran capaces de llevarle los pedidos muy rápidamente. Echo de menos esos maravillosos días en que la abundancia de capital de riesgo permitió que las startups llevaran a cabo esos experimentos. Pero incluso hoy en día, la mayoría de estos servicios le pueden entregar un pedido en 30-40 minutos, un plazo que sigue siendo muy bueno.

Resulta fácil averiguar cómo comenzó esta floreciente industria. Uno de los primeros servicios de este tipo fue Takeout Taxi, que estuvo particularmente activo en los años 90. Fue diseñado principalmente para familias de clase media. Era estudiante y tan solo pude pagar sus servicios un par de veces, pero fue realmente cómodo.

En ese momento, uno de los principales obstáculos para el éxito de este tipo de servicios era el problema con el menú. Debías saber exactamente lo que querías o pedir un menú a la empresa por fax. Para ayudar a sus clientes, Takeout Taxi llevó a cabo un gran trabajo al introducir su información de contacto en el menú de los restaurantes asociados.

La compañía también colocó anuncios en directorios telefónicos, era como una versión primitiva de Yelp (a excepción de las reseñas).

Actualmente, Microsoft ha acabado teniendo éxito con su línea de tablets Surface, pero fue hace 10 años cuando la compañía intentó lanzar una tablet con funciones de ordenador (antes de la llegada del iPad). Recuerdo que solía ver este tipo de dispositivos en las conferencias de tecnología, principalmente en un factor de forma híbrida; sin embargo, había disponibles configuraciones más exóticas en el mercado, por ejemplo, ordenadores portátiles de doble pantalla y tablets con teclado enchufable.

Todavía es un misterio para mí por qué en ese momento estos dispositivos no atrajeron al público, probablemente porque eran bastante caros y lentos en comparación con los ordenadores portátiles tradicionales. De una forma u otra, fueron un producto de nicho.

Aunque la obsesión general por los dispositivos portátiles está desapareciendo gradualmente, recientemente han tenido éxito una gran cantidad de productos móviles, especialmente los relacionados con la actividad física.

Muchos relojes inteligentes se pueden conectar a los teléfonos móviles a través del Bluetooth o a Internet a través del Wi-Fi; algunos, como el Apple Watch, incluso admiten la comunicación celular.

Sin embargo, en 2004, Microsoft lanzó una serie de relojes con conexión a Internet que utilizaban las frecuencias auxiliares de las estaciones de radio FM. En grandes metrópolis, esto era suficiente para transferir información clave en un solo sentido, como el clima, informes de tráfico y noticias locales. Incluso permitían recibir notificaciones por correo electrónico, recordatorios del calendario, cotizaciones bursátiles... y algo más, ¿tal vez horóscopos?

Usé el reloj Fossil Abacus durante un año más o menos, y fue muy cómodo. Sin embargo, la resolución de la pantalla era bastante baja, y toda la información debía ser ajustada. Por lo tanto, generalmente tenía que ver los detalles que me interesaban en otros dispositivos, lo que limitaba significativamente la utilidad del gadget.

¿Qué cambiará en los próximos 10 años? ¿Qué productos y servicios que han fracasado hoy tendrán un gran éxito mañana?

Esperemos que no sea Juicero.