Los primeros resultados de las investigaciones sobre la manipulación de las emisiones de óxido de nitrógeno de los coches de Volkswagen demuestran que se produjeron conductas indebidas por parte de algunos empleados.
El presidente de la junta directiva de Volkswagen, Matthias Müller, ha anunciado en la conferencia que ha tenido lugar hoy que la empresa «empezará a aplicar las soluciones en enero del próximo año».
La investigación interna de Volkswagen concluirá pronto, pero la auditoría externa llevada a cabo por la firma de abogados Jones Day se desarrollará «hasta bien entrado 2016». Esto se debe a Jones Day debe establecer quién es legalmente responsable.
Hans Dieter Pötsch, presidente del consejo de supervisión de Volkswagen, ha destacado la crisis de confianza, especialmente en vehículos diésel, provocada por la manipulación de los gases. Por esta razón consideran que lo más importante en este momento es «recuperar la confianza de sus clientes».
Mueller sobre compensar a los clientes europeos de Volkswagen: «Vamos a preparar paquetes de compensación para todas las regiones, incluyendo al Reino Unido».
El fabricante de coches ha reconocido falta de control en algunos procesos, lo que favoreció la falta de ética laboral de algunos empleados, por ejemplo en las pruebas y procesos de certificación que afectan a los dispositivos de control del motor. «El principal problema es que las responsabilidades no estaban lo suficientemente claras», dijo el fabricante de coches.
«Resulta imposible evitar conductas indebidas, pero los nuevos controles que se van a aplicar harán que llevarlas a cabo sea mucho más difícil».
Como resultado de la auditoría interna también se han descubierto deficiencias en algunas áreas de la infraestructura de tecnología de la información, que ahora la empresa también va a solucionar.
«El grupo Volkswagen es completamente funcional, incluso en estos días difíciles. Depende de nosotros, aunque no únicamente, cómo y cuándo logramos superar los desafíos actuales», dijo Pötsch.