Los fiscales alemanes han ampliado su investigación por el escándalo de emisiones diesel de Volkswagen y están investigando ahora a 17 empleados, desde los seis inicialmente, dijo el martes el fiscal Klaus Ziehe.
«Esto es parte de la investigación de diesel, el número de sospechosos ha aumentado, aunque ninguno es del consejo de administración», dijo Ziehe en Braunschweig, cerca de la sede de VW en Wolfsburgo.
El consejero delegado de Volkswagen, Matthias Müller, dijo el martes a los empleados reunidos en Wolfsburgo que el escándalo de emisiones infligirá daños «sustanciales y dolorosos» a la imagen financiera del fabricante de automóviles. El escándalo mantendrá ocupado a VW «durante mucho tiempo» dijo el director ejecutivo, añadiendo que el fabricante no había tratado de ocultar mala praxis.
El segundo mayor accionista de Volkswagen espera que aparezcan más «malas noticias» del escándalo de las pruebas de emisiones después de que el fabricante de automóviles admitió en septiembre la manipulación de las pruebas de contaminación en Estados Unidos.
Stephan Weil, el primer ministro de Baja Sajonial, dijo en la reunión a la que asistieron miles de trabajadores:
«Probablemente este año nos enfrentemos de vez en cuando a noticias desagradables relacionadas con el escándalo del diésel».
Weil agregó que la marca debería ser capaz de lidiar con las consecuencias de la manipulación.
«El daño no será pequeño, eso es todo lo que se puede decir hoy, pero por suerte Volkswagen tiene un fondo económico fuerte», dijo.
Baja Sajonia, que posee un 20 por ciento de las acciones comunes de VW, no tiene motivos para alterar su compromiso con el fabricante de automóviles, dijo Weil.