El ministro de Asuntos Exteriores en funciones español, José Manuel García-Margallo, mostró el lunes su rechazo al preacuerdo entre la Unión Europea y Turquía para que Ankara readmita a los inmigrantes que crucen ilegalmente a Europa y lo tachó de «inaceptable y contraria a la legalidad internacional».
«España solo aceptaría un acuerdo coherente, compatible y obediente con la legalidad internacional y respetuoso con los derechos humanos de las personas que tienen que huir de su país por razones de persecución de cualquier tipo», dijo a su llegada a una reunión de ministros de Asuntos Exteriores en Bruselas.
Sus declaraciones llegan después de que la semana pasada los partidos de la oposición pidieran al Gobierno español en funciones que no apoyase un acuerdo con Turquía al que Mariano Rajoy se había mostrado favorable tras la última cumbre de presidentes del Gobierno europeos.
El acuerdo, que ahora deben ratificar los 28 estados miembros, está diseñado para permitir que Turquía readmita a inmigrantes entrados en la Unión Europea a cambio de más dinero y una aceleración en el proceso para su ingreso en el bloque europeo.
Margallo indicó que el Gobierno español se opone a las expulsiones colectivas y pidió la suspensión de las deportaciones «hasta que se resuelva el tema».
La vicepresidenta del Gobierno Soraya Saénz de Santamaría aseguró el viernes en rueda de prensa tras la reunión semanal del Consejo de Ministros que el gobierno buscaría «consenso» con el resto de grupos de la Cámara.
Rajoy se ha negado a comparecer ante el Congreso para consensuar la posición de España ante Bruselas, y será el secretario de Estado para la UE, Fernando Eguidazu, quien comparecerá el miércoles ante la comisión mixta de Asuntos Exteriores.
Margallo añadió en Bruselas:
«Lo importante siempre es la aquiescencia, no la persona que comparezca, lo importante es el contenido y no el actor que declama la obra».