Cada vez hay más españoles viviendo solos por elección.
El año pasado, el número de hogares unipersonales se incrementó en términos absolutos un 1,1% (+49.100) hasta alcanzar la cifra de 4.584.200. Estos hogares suponen ya el 25% del total en España, uno de cada cuatro. Lo interesante es que este aumento de hogares ocupados por una sola persona se ha producido sobre todo entre la población menor de 65 años, población madura y joven, por encima del incremento en la tercera edad.
En su conjunto, el número de hogares en España volvió a aumentar el año 2015 y alcanzó la cifra de 18.346.200 (43.100 más que el año anterior), según la última estadística del INE (PDF). Este incremento es más noticia si cabe porque se produce en una coyuntura de reducción de la población residente, lo que significa que es consecuencia directa del aumento de los hogares unipersonales.
En España, son todavía los solteros y las viudas son los principales ocupantes de los hogares unipersonales. Cuando aún no se han cumplido los 65 años, son más los hombres que viven solos (1.606.300 / 59%) que las mujeres (1.118.00/41%). Mientras entre los mayores de 65 años este datos se invierte y predominan las mujeres, siendo ellas casi tres de cada cuatro. Sin embargo, el último año la estadística demuestra que mientras aumentan los hogares unipersonales de mujeres (+2,6), los de los hombres descienden (-0,6%).
Lo que se produjo en 2015 fue un fenómeno de claro repunte del número de personas menores de 65 años que decidieron vivir solas, y sobre todo mujeres. Así, el número de hogares unipersonales con habitantes menores de 65 años (+1,6%) subió a un ritmo cinco veces superior al del número de nuevos hogares unipersonales con personas mayores de 65 años (+0,3%).
Pese a este significativo auge, la fórmula de vivir en solitario no es ni de lejos la más común en España. Solamente vive solo un 10% de la población. La mayoría de los españoles reside en un hogar formado por cuatro miembros (28,2%), seguido de una vivienda con tres miembros (25,2%) o en pareja (24,4%) y en familias numerosas (12,2%).
Otra de las tendencias sociológicas más interesantes que revela la estadística de los hogares del INE en 2015 es el aumento de las familias monoparentales, que si en 2014 eran el 9,6% del total ahora son el 10,3%, habiendo registrado un aumento absoluto de 142.800 hogares (+8,1%) en un año.
En la mayoría de los casos son las madres las que viven solas con hijos, siendo el 81,3% de las familias monoparentales. De ahí que muchos expertos consideren que deberían llamarse familias monomarentales. Sin embargo, mientras el año pasado las mujeres con hijos subieron un 6,3% el año pasado, los padres con hijos aumentaron a mayor ritmo, un 16,9%.