Las características del sistema sanitario español están lastrando el rendimiento económico del país, según ha informado la agencia de calificación crediticia Fitch, que incide en la importancia de abordar reformas para poner fin a la situación.
El gasto sanitario supone aproximadamente un 40% de las partidas de las comunidades autónomas.
Fitch ha segurado:
"Las CCAA se encargan de proveer los servicios sanitarios, pero tienen un control limitado sobre el alcance de los servicios que pueden dar, lo que provoca que el gasto sea inelástico y difícil de controlar".