El fabricante de automóviles Ford (NYSE: F) está planeando lanzar un vehículo no tripulado, que no vendrá equipado con volante ni pedales. Será en el año 2021, y el primer coche de este tipo se utilizará principalmente para fines comerciales o en servicios de movilidad para promover el uso de transporte compartido.
Ford ha comenzado a cooperar con una serie de startups que desarrollan sistemas para vehículos autónomos, y también ha invertido en una empresa que desarrolla mapas tridimensionales.
Ford ha fijado el objetivo de crear un coche que se corresponda con el estándar SAE 4, que requiere que el vehículo pueda estar completamente bajo el control de un ordenador, pero en un área o ruta especialmente designadas.