Banco Popular cerrará el actual ejercicio con pérdidas de en torno a 2.700 millones de euros, después de haber provisionado el 50% de sus activos adjudicados. El consejo convocará una junta extraordinaria durante la primera mitad de febrero, para nombrar presidente a Emilio Saracho, que sustituirá a Ángel Ron. Mientras tanto, se han reavivado las tensiones entre los consejeros que apoyan a Ron y sus opositores.
Popular tiene previsto poner el contador a cero una vez que presente sus cuentas de 2016, que mostrarán unas pérdidas de 2.700 millones de euros, ya que el banco cubrirá estos números rojos con la ampliación de capital que se llevó a cabo en junio por 2.500 millones de euros. Por esta razón, insiste en que no necesita una nueva inyección de capital, como aseguran los bancos de inversión.