China planea invertir 2,5 billones de yuanes (360,7 millones de dólares) para 2020 en fuentes de energía renovables, según la Administración Nacional de Energía (NEA, por su sigla en inglés).
El plan consiste en aumentar la proporción del consumo de recursos energéticos no fósiles y reducir el consumo de carbón. La NEA ha dicho:
"Podemos decir que las fuentes de energía limpia se convertirán en la principal fuente de energía durante el Plan de Cinco Años (2016-2020)".
La capacidad instalada de energía renovable - como la eólica, la hidráulica, la solar y la nuclear - contribuirá aproximadamente con la mitad de la nueva capacidad de generación de electricidad para 2020, dijo la NEA.