La Asamblea Nacional de Venezuela, de mayoría opositora, aprobó ayer lunes una resolución que declara que Nicolás Maduro no ha cumplido con sus funciones en medio de la crisis que azota al país, y por consiguiente ha abandonado su cargo, aunque ha reconocido que el fallo no dará lugar a su destitución.
Según la oposición, Maduro es el responsable de la crisis en la que el país se encuentra sumido. No se espera que la declaración tenga un efecto práctico, al menos de momento, aunque sí que agravará la crisis institucional por la que está pasando Venezuela.