Decenas de miles de policías y kilómetros de barreras estarán preparados este viernes en Washington, a la espera de la llegada de cientos de miles de personas que planean celebrar o protestar la toma de posesión de Donald Trump como presidente de Estados Unidos.
Se prevé que unas 900.000 personas se congreguen en el centro de Washington, incluyendo el National Mall frente al Capitolio, donde Trump será investido, y en el trayecto de su desfile a lo largo de la Pennsylvania Avenue hasta la Casa Blanca.
Un grupo de activistas liberales molestos por los comentarios de Trump sobre mujeres, inmigrantes ilegales y musulmanes han planeado protestas por el centro de la ciudad.
Los partidarios Trump también han inundado la capital, muchos con gorras de béisbol con el lema de su campaña "Hagamos Estados Unidos grande de nuevo".