BBVA ha anunciado hoy miércoles una caída del beneficio neto durante el cuarto trimestre del año pasado debido a los gastos relacionados con las cláusulas suelo en las hipotecas comercializadas a través de su red.
El beneficio entre octubre y diciembre se situó en los 678 millones de euros, lo que supone una caída del 27,9% en comparación con el mismo periodo del año anterior, pero por encima de los 548 millones esperados por los analistas.
Según el banco, las nuevas dotaciones relacionadas con las cláusulas suelo han tenido un impacto negativo de 404 millones de euros en sus resultados.