Chris Sacca, el multimillonario inversor de capital riesgo y uno de los primeros inversores en dar su apoyo a Twitter (NYSE: TWTR.NYSE), ha proclamado abiertamente su odio hacia la empresa que en el pasado tanto admiraba.
Irónicamente, Sacca ha compartido la noticia en su propia cuenta de Twitter, donde ha escrito que ha vendido todas sus acciones de la empresa debido a que se encuentra decepcionado con la administración de la misma. El inversor ha dicho que su fondo vendió la mayoría de sus acciones tras la vuelta del cofundador de Twitter, Jack Dorsey, como director ejecutivo en 2015 y que se deshizo de todas sus acciones personales en otoño del año pasado.
Probablemente no sea el único que ha perdido la confianza en la empresa: el precio de las acciones de Twitter se ha desplomado casi un 80% desde su salida a Bolsa en 2013.
Twitter sigue sufriendo pérdidas y lleva ya unos cuantos años sin conseguir aumentar su base de usuarios tras el importante repunte de los primeros días.
Según Sacca, Twitter debería "abrirse por completo a los desarrolladores".