Importantes empresas han dejado de anunciarse en Google y YouTube debido a que sus anuncios aparecen junto a vídeos extremistas.
Entre las empresas se incluyen Marks & Spencer, Lloyds Bank, HSBC, O2, L'Oréal (EURONEXT: OR.EURONEXT), RBS, BBC, Channel 4, McDonald's (NYSE: MCD.NYSE). Más tarde se les unió Volkswagen (XETRA: VOW3.XETRA), Toyota (TSE: 7203.TSE) y Tesco (LSE: TSCO.LSE).
Un estudio de la semana pasada descubrió que los anuncios patrocinados por el gobierno del Reino Unido, así como por marcas como Sainsbury y L'Oreal, aparecían junto a vídeos que promovían el extremismo.
El gobierno del Reino Unido también ha suspendido su publicidad hasta que el problema sea resuelto.
Anuncios de la Home Office, la BBC y Traffic for London (TfL) han aparecido en vídeos que incitacan al odio y la homofobia, según ha informado The Times.
Según el periódico, la publicidad colocada junto a los vídeos ha permitido a sus autores ganar alrededor de 8 $ por cada mil clics. Esto significa que varias empresas han estado generando ingresos a grupos extremistas.
Google (NASDAQ: GOOGL.NASDAQ), propietaria de YouTube, ya ha realizado una disculpa formal. El jefe de la oficina europea, Matt Brittin, dijo durante un discurso en la conferencia Advertising Week Europe en Londres:
"Nos gustaría pedir disculpas a nuestros socios y anunciantes que pueden haberse visto afectados por los anuncios de contenido dudoso. Asumimos la responsabilidad".
Brittin ha dicho que Google está estudiando la manera de eliminar este "error" y que van a acelerar el proceso para cambiar la política de privacidad. La empresa también tiene la intención de ofrecer a los anunciantes herramientas para controlar dónde aparecen sus anuncios.