Según cifras facilitadas hoy por el ministro de Hacienda español, el Gobierno cumplió con sus compromisos fiscales y cerró el ejercicio de 2016 con un déficit público del 4,54% del PIB, por debajo del objetivo del 4,6% pactado con Bruselas.
Sin contar las ayudas financieras a la banca, la brecha fiscal se reduce al 4,33%.
Por organismos, la Administración Central se desvió del objetivo al registrar un déficit del 2,52%, frente a un objetivo del 2,2%. Las Comunidades Autónomas también tuvieron un desfase de algo más de una décima en su objetivo hasta alcanzar un déficit del 0,82%.
No obstante, los salvavidas del Gobierno han sido la Seguridad Social y los ayuntamientos, al registrar saldos mejores de lo esperado. La primera registró un déficit del 1,62% frente al 1,7% previsto, y los ayuntamientos registraron un superávit del 0,64%.