Hillary Clinton dijo ayer martes que todo indicaba que iba a ganar las elecciones presidenciales de 2016 hasta que la interferencia de los hackers rusos y del director del FBI hicieron a muchos votantes potenciales cambiar de opinión.
Clinton dijo en una conferencia en Nueva York que sufrió un duro golpe con la carta de Comey al Congreso a finales de octubre, en la que se informaba de que el FBI había reabierto la investigación sobre el uso de un servidor privado de correo electrónico cuando todavía era secretaria de Estado.
Esta ha añadido:
"Si las votaciones hubieran tenido lugar el 27 de octubre, ahora yo sería la presidenta".