Según ha informado hoy la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), la demanda global de viajes aéreos subió un 6,8% en marzo debido a que unas tarifas más bajas y la mejoría de las economías siguieron respaldando al crecimiento durante el primer trimestre de 2017.
La asociación ha señalado que tendrá que esperar a que salgan los datos de abril para ver el impacto de las restricciones para llevar grandes dispositivos electrónicos en la cabina en ciertos vuelos a Estados Unidos y Reino Unido. Esas restricciones en vuelos, principalmente aquellos procedentes de países de Oriente Medio, fueron impuestas en marzo por las autoridades británicas y estadounidenses.
Sin embargo, el aumento del tráfico en aerolíneas de Oriente Medio se desaceleró al 4,9% en marzo, desde el 9,5% de febrero, debido a que los bajos precios del petróleo tuvieron un impacto importante en la demanda. En un comunicado, IATA ha declarado:
"Esto está más relacionado con hechos vistos el año pasado, mientras que cualquier impacto de la prohibición de portátiles será visible a partir de los resultados de abril en adelante".