El creador del protocolo ethereum, Vitalik Buterin, está pensando en introducir un mecanismo que permita limitar el número de ethers en circulación en el futuro, tal y como ha contado a Bloomberg. El desarrollador ha tomado esta decisión debido al gran número de tokens basados en ethereum que están siendo lanzados a través de ICOs.
No considera una restricción similar a la existente en la cadena bitcoin, en cuya cadena no puede haber más de 21 millones de monedas en circulación. Buterin está barajando la posibilidad de introducir una comisión para las aplicaciones basadas en ethereum. Estas comisiones deberían provocar que algunos ethers desaparezcan con el tiempo.
Otra forma de limitar la cantidad de monedas, al menos de forma temporal, es bloquear una parte de las transmisiones (ETH/USD) en circulación. Esto podría suceder cuando el ethereum empiece a utilizar un nuevo método para verificar las transacciones en su red: el proof-of-stake. Este sistema requiere que los usuarios que deseen recibir una remuneración por las transacciones depositen una cantidad de ether durante un tiempo determinado. Cuanto más tiempo lo mantengan, mayor será la recompensa.
De acuerdo con Buterin, la comunidad ethereum empezará a utilizar el mecanismo proof-of-stake para finales de año.
Sin embargo, cabe destacar que el exceso de ethers no ha provocado una caída de los precios. Desde principios de año, el valor de la criptomoneda ha aumentado en aproximadamente un 3.500%.
Según Buterin, el mecanismo de las ICOs tiene sus ventajas e inconvenientes. La forma en que están estructuradas actualmente desvía los incentivos de las startups, que este año han recaudado más de 3.000 millones de dólares. En casi todas las colocaciones se han recaudado fondos para financiar proyectos que todavía están en desarrollo, y esto deja abierta la pregunta de qué sucederá si las startups no acaban cumpliendo con sus promesas iniciales.
Buterin cree que debería crearse un mecanismo que divida las ICOs en varias rondas o que ofrezca reembolsos a los inversores si la startup en cuestión no consigue lanzar con éxito el producto al mercado.
El mecanismo de las ICOs resolvió un problema esencial: simplificó la recaudación de fondos de los desarrolladores para financiar proyectos. Sin embargo, esto no significa que cada proyecto deba comenzar con la colocación de tokens, dijo Buterin.
Anteriormente, sugirió que el 90% de los tokens ya lanzados perdería valor con el tiempo.