Un grupo de acreedores afectado por lo sucedido en 2014 a Mt. Gox quiere evitar que el exjefe del intercambio, Mark Karpelès, obtenga varios miles de millones de dólares aprovechando ciertas lagunas en la ley, según ha informado el Financial Times.
Los acreedores presentaron una nueva solicitud ante el tribunal, y su aprobación permitirá a Mt. Gox salir de la bancarrota e iniciar su proceso de reactivación.
Según la legislación japonesa actual, si Mt. Gox permanece en bancarrota, este está obligado a devolver el dinero a los clientes en dólares según su precio en 2014.
Según las estimaciones del periódico, Karpelès podría poseer más de 173.000 BTC de los 202.195 BTC que pertenecían al intercambio en el momento de la quiebra. Durante los últimos años, el precio del bitcoin (Bitcoin: BITCOIN) se ha disparado, y al tipo de cambio actual, las monedas presuntamente en poder del jefe del intercambio superan los 3.000 millones de dólares.
Los representantes del intercambio defienden que el plan de quiebra actual es justo, mientras que los representantes de los inversores afirman que su plan es mejor, ya que permite no devolver el equivalente en dólares del depósito, sino la cantidad exacta en bitcoins.
El propio Karpelès ha dicho recientemente que tiene la intención de resucitar el sitio. Para hacerlo, necesita 245 millones de dólares. Entre las posibles formas de recaudar estos fondos, el fundador del intercambio japonés baraja la posibilidad de llevar a cabo una recapitalización, unas emisión de acciones así como una ICO.
Mt. Gox fue la plataforma de negociación más grande del mundo: alrededor del 70% de todas las transacciones con bitcoin pasaron por el intercambio. A principios de 2014, Mt. Gox dejó de funcionar. Las pérdidas totales de los inversores de Mt. Gox se estiman en 850.000 bitcoins, que en este momento tienen un valor de aproximadamente 15.300 millones de dólares.