El G7, el grupo formado por las 7 mayores economías del mundo, publicó ayer su esperado informe sobre las criptomonedas estables.
Según se desprende del documento, el grupo de trabajo centrado en desarrollar el informe señala que aunque las criptomonedas estables como Libra, la stablecoin de Facebook, representan un riesgo para la estabilidad financiera global, también poseen un gran potencial en el campo de los pagos.
Asimismo, el G7 ha informado de que no permitirá el desarrollo de ninguna stablecoin en sus territorios hasta que estas hayan resuelto de antemano todos los retos y riesgos que puedan representar.
El informe dice literalmente:
"Ningún proyecto global de stablecoin debe empezar a operar hasta que los retos y riesgos legales, regulatorios y de supervisión sean abordados adecuadamente, a través de diseños apropiados y adhiriéndose a una regulación clara y proporcional".
El informe también señala que la primera generación de criptomonedas no ha sido capaz de proporcionar un medio de pago o de almacenamiento de valor fiable. Sin embargo, las stablecoins reúnen una serie de características que les permiten ser utilizadas como medio de pago y de almacenamiento de valor.
Los ministros de Economía de Francia y Alemania han dicho recientemente que sus países no van a permitir el desarrollo del proyecto Libra, la stablecoin de Facebook, en sus países.